La noche es para los amantes//obikaka//

Capítulo 1

Han pasado catorce años desde lah supuesta muerte de nuestro amado Obito...

~Kakashi~

Unas semanas atrás tomé un grupo de gennin, Sasuke, Naruto y Sakura.

Sasuke es frío, reservado y hasta antisocial, al igual como lo era yo a su edad. Naruto es un hiperactivo e impulsivo cabeza hueca al igual que Obito. Sakura es la mediadora, quien aunque sin mucho potencial para luchar, tiene un fuerte control sobre Naruto. Este grupo me recuerda a mi antiguo equipo, en especial la relación que llevan ambos chicos, es un retrato exacto de mi relación con Obito.

Obito...por más que he intentado no he logrado resignarme a perderlo, realmente quiero olvidarlo y me odio por amarlo tanto.

En ese momento pensaba que era un simple amor de niños, de esos que se olvidan, pero después de haberlo perdido supe que nunca fue así...era amor verdadero.

Si me hubiese dado cuenta antes, hubiese tenido mucho más tiempo con él...pero ahora está muerto, igual que Rin y Minato sensei...por mi culpa.

Hoy se cumplirá el aniversario de muerte de Obito y ,como cada vez que tengo tiempo libre, decidí ir a dejarle flores.

Salí del campo de entrenamiento y me dirigí a la floristería de los Yamanaka.
Me atendió una pequeña de unos doce o trece años aproximadamente.

-Hola, busco flores par...

-Son para alguién especial...¿cierto?-preguntó la pequeña rubia con diversión.

Me sonrojé al pensar en Obito. Él es más que especial...

-Se sonrojó, significa que sí-se burló la chiquilla.-Tengo unas perfectas por aquí...-la niña comenzó a juntar distintas flores rojas y las ató con una cinta.

-Serían emmm...-la niña extendió la mano y apenas saqué mi billetera, me la arrebató y sacó lo que supongo que habrá sido la cantidad correspondiente.

-¡Gracias y buena suerte! -exclamó al verme salir de la tienda.

Decidí apresurarme al cementerio, ya se hacía tarde y la oscuridad me impediría acomodar bien las flores y traería también el frío nocturno.

Una vez se terminaron los edificios y comenzaron los árboles me sentí observado, pero preferí no darle importancia para no demorarme más.

Una vez aterricé frente a la tumba, una figura comenzó a aparecer de entre los árboles. Me puse en guardia, listo para recibir un ataque.

Cuando se fue acercando distinguí que usaba una máscara naranja de espiral y usaba la capa de akatsuki. Era Tobi un criminal rango S y estaba caminando lentamente hacia mi.

-¿Eres Tobi?¿Qué quieres?-pregunté desconfiado pero sin alterarme. A falta de respuesta me alejé del extraño.

-Soy Obito-afimó.

-¿A qué te refieres?

-Soy Obito-reiteró.

-Tú no eres él. Obito está...

Se quitó la máscara permitiendome ver su rostro. Efectivamente de trataba de él.

-¿P-porqué...?

-¿Sigues viviendo en el mismo departamento que cuando éramos niños?

Lo miré con confusión justificada. ¿Porqué después de tantos años sin ponerse en contacto una sola vez preguntaría algo como eso?

-Responde rápido.-ordenó sacándome de mis pensamientos.

-¿Y si así fuera qué contigo? Dime cuáles son tus razones-contesté frío crusándome de brazos.

La situación se sentía irreal, después de años sin siquiera por su nombre tenerlo frente a mí. Pero este no era el Obito de antes, pude saberlo por la dureza en su voz . Su mirada igualmente había cambiado, ya no era aquel niño dulce y atrevido.

-Como quieras.-dijo encogiéndose de hombros-Me arriesgaré, hasta mañana.

Dicho eso se dio la vuelta desapareciendo en los arbustos tan súbitamente como había aparecido.
Solté el aire retenido y me desplomé sentándome en el pasto húmedo. Aún tenía el ramo de flores en la mano.

Los arbustos se removieron frente a mi para que luego Obito saliera de ellos de un salto. Lo observé caer con gracia frente a mí y extender la mano.

-Olvidé mis flores.

Se las extiendo y él rosa mi mano para después tomar el ramo desde el tallo.

-Gracias por el gesto, Kakashi.

Me mira directamente a los ojos y mi corazón da un vuelco que acelera mi corazón y ensiende mis mejillas. Puedo ver el brillo en sus ojos que me recuerda que es el mismo hombre que he amado con locura todos estos años.

Desvío la mirada, sintiendo la suya sobre mí. Se da impulso y salta a los arbustos por segunda vez.

Estoy hecho un desastre de emociones. Mi corazón sigue latiendo a mil y siento mi cara arder. Me llevo las manos a la cara para intentar calmarme, no me reconozco.

Recuerdo sus ojos y una sonrisa inconciente se apodera de mi boca. Me golpeo la frente y la sonrisa desaparece. ¿Cómo puede dejarme así sólo con una mirada?

No, no puedo caer. No se sus verdaderas intenciones y no puedo dejar que mis sentimientos me ceguen. Deslizo mis manos frías una última vez por mi cara antes de ponerme de pie.

No caeré tan fácilmente. Ya no es el mismo, y tampoco yo...

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Uno otra vez!
Que tal?
Ya lo mejoré!!! Díganme si les gustó!!!
Gracias por leer^-^