Noche de bodas

1.6K 75 15
                                    

Hacía una preciosa noche, fresca y tranquila. Fue ideal para que una pareja de recién casados caminen por la playa.
En una bella isla desierta con nada más que una hermosa e elegante casa de playa, se encuentra un chico pelirrojo oji-verde dando un paseo romántico por la playa con su esposa, una chica rubia oji-rosa.
Caminaban tomándose de la mano, disfrutando de la suave brisa que corría mientras juntos cantaban una canción...

Terminaron de cantar y el esposo se detuvo, se quitó su camisa quedando sólo en short y comenzó a caminar hacia el agua. Se volvió a detener para mirar a su esposa que lo veía tiernamente sonriente, el le respondió igual levemente, extendiéndole su mano para que ella la tomará.
La rubia retrocedió y miro a su marido desconfiada y temerosa para después hablar.-Ayato...recuerda que yo no se nadar.
El agrando un poco más su sonrisa sin perder la gentileza y después le hablo a la contraria-Lo sé. Pero recuerda lo que te dije cuando nos casamos, dije que jamás te soltara y ahora mucho menos lo haré...Yui.
Yui se quitó el saco que cubría su cuerpo quedando sólo en masha (traje de baño). Volvió a sonreír como antes y se acercó a Ayato, tomó su mano y juntos se adentraron al mar.
Narra Ayato:
Mientras estuvimos dentro del mar no existió el tiempo para nosotros.
Estuve paseando a Yui por el agua, siempre sin soltarla.
En un momento la atraje hacía a mi, alegando nuestros cuerpos y la abrace, ella rodeó mi cuello con sus brazos, quedando a unos centímetros de distancia nuestros rostros, nos miramos entre sí y yo aproveché a contemplar sus hermosos ojos rosados que reflejaban millones de palabras amorosas, pero ya fueron suficientes miradas así que cortamos toda la distancia entre nosotros con un apasionado beso. Note que en un momento ella se separó para tomar aire, pero yo volví a atrapar sus labios, basándolos con más pasión que antes, ya que para mi cada segundo que ella corta un beso nuestro para mi es una eternidad sin poder tocar esos labios rosados, tan suaves y carnosos.
Narra Yui:
El beso de Ayato estaba lleno de pasión y lujuria.
En un instante el tomo mis piernas y se acercó rápidamente a la orilla mientras aún me besaba.
Cuando llegamos a la orilla caímos en la arena Ayato en sima mío y yo de bajo de el, Ayato comenzó a besar todo mi pecho acariciando mi espalda hasta llegar a mi parte superior del traje de baño y me lo quitó, lo que me provocó un sonrojo muy notorio, quise taparme con las manos por la vergüenza pero Ayato me detuvo poniendo mis manos a unos lados de mi cabeza e hizo una leve carcajada y me dijo.-jaja. De que te vergüenzas, sólo estamos tu y yo, así que no te resistas a tu dueño. Dicho eso deje que continuará, besaba mis pechos y los acariciaba de una manera lenta y seductora, lo que me hacía gemir.
-Ah....A-ayato...ah.
Yo acariciaba su cabeza mientras me basaba pero no pude hacerlo más por que su cabeza bajo hasta mi abdomen y siguió bajando hasta llegar a una de mis piernas, dando besos como Raito lo hizo aquella ves en la Iglesia, pero ahora estoy con Ayato y con el es diferente, el lo hace por que me ama.
Después subió por mi otra pierna y se detuvo en mis caderas para bajar mi ropa interior y el hizo lo mismo con su short.
En un movimiento me dio una fuerte embestida que me hizo gritar y cada ves daba más y más fuertes que termine gritando y gimiendo de placer, con mis puños apretando la arena.
Poco a poco se fue cansando y cayó rendido sobre mi, así que aproveche para besar todo el cuello de Ayato y en momento me coloqué sobre el para gastar lo último que me quedaba de energía en besar y lamer todo su pecho y abdomen.
Ya gastada toda mi energía me acosté a su lado y ambos terminamos abrazados y dormidos.
Díganme: Que les pareció el lemon, estuvo bien o mal díganme para la próxima ves si es que quieren que continúe.
Bueno espero que les haya gustado, si les gustó denme un voto o un comentario si quieren decirme algo más.
besos enormes

Cambié de opiniónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora