llego mi salvación

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Acepto. Dijo Ayato, mirando a los ojos a su tío.

Richter hizo una sonrisa de lado a lado,

pero Ayato se la borró en cuanto le objesionó

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pero Ayato se la borró en cuanto le objesionó.-Pero...¿Tu qué ganas con esto? 

Richter lo miró serio y entonces respondió.-Seré la cabeza de la familia, y podre tener la dignidad que siempre debí tener.

Narra Ayato:

Es cierto que este desgraciado siempre quiso ser la cabeza de la familia, y si el tratara de matarme siendo yo rey, los ancestros lo mataran después. Entonces no hay mucho que descifrar, mis hermanos no se dejaran manipular por el y el no creo que sea tan estúpido como para tratar de matarme.

-De acuerdo. Hecho, ahora lárgate antes de que alguien nos vea aquí.

Narra autora:

Dicho esto, Richter se fue sigilosamente a quien sabe donde, mientras Ayato regresaba a su habitación para dormir con su esposa.

Llego a la habitación, abriendo la puerta lentamente. Ya a dentro, la cerro de la misma manera en que la abrió, se teletransporto al lado de la cama y mientras contemplaba a Yui dormir de arriba a  abajo, poco a poco se fue acostando a su lado.

Cuando la abrazo por a tras, Yui empezó a moverse un poco.-Mmm. Ayato...A donde fuiste, tardaste mucho. Dijo con los cerrados y la voz adormecida.

-Salí a caminar. Mejor vuelve a dormir amor, mañana hablaremos. Le dijo Ayato dulcemente al oído. Yui sonrió, pero antes de volver adormir recibió un dulce no muy largo beso de buenas noches por parte de Ayato.

Narra Yui:

Al día siguiente...

Desperté y noté que Ayato no estaba en la cama. Así que me levanté, tomé una toalla, una bata de baño y me fui al baño.

Me quite el pijama y me metí en la tina la cual no tardo mucho en llenarse.

Mientras me relajaba sentí el sonido del agua, pero no me asuste ya que quien mas sería si no Ayato. Una mano empezó a acariciar uno de mis pechos y otra inclino mi cuello a un lado. Luego de eso sentí unos fríos labios en mi cuello, bajando hacia mi espalda.

Arque la espalda por lo bien que se sentía, tomé la mano que acariciaba uno de mis pechos y con la otra acaricie por de tras del cuello de Ayato. En un momento acaricie su cabello y se sentía raro, como un poco ondulado. Gracias a esa reacción abrí los ojos en señal de sospecha, sentí como los labios que estaban en mi espalda volvieron a mi cuello y sentí su respiración en mi cuello acompañado de un gemido.

-Parece que acerté en decir que eres una mujer obscena.

Salí rápidamente de la tina y voltee a verlo, como era posible que no me diera cuenta.

Parece que le fuera infiel a Ayato sin que me diera cuenta, ahora me estoy sintiendo horrible.

-S-shu, ¡que estás haciendo aquí!?

-Qué más, vine a saludar a mi cuñada. Me dijo mirándome con una sonrisa perversa en su rostro.

Estaba asustada ya que Shu poco a poco se estaba acercando a mi y aun peor que solo estaba en bata ya que mientras retrocedía pude tomarla y ponérmela rápido.

Cuando choque con el lavado Shu me acorraló y se fue inclinado lentamente para besarme, pero yo giré la cabeza a un lado para impedir todo contacto, creí que me mordería pero solo escuche unas palabras de su parte...

-Extrañaba verte de esta manera...querida cuñada. Aunque tenía los ojos cerrados por el miedo, podía sentir su mirada excitada estaba sobre mi.

Pero en un momento sentí como los brazos de Shu me soltaron rápidamente y se escucho el ruido de una pared siendo golpeada

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Pero en un momento sentí como los brazos de Shu me soltaron rápidamente y se escucho el ruido de una pared siendo golpeada.

Queda sorprendida por ver a Shu sentado en el suelo con unas grieta en las paredes sobre donde estaba apoyado, suponía que fue un fuerte golpe.

-Que manera que tratar a nuestra cuñada. ¿Qué te crees? Una vos masculina se hizo presente, giré mi cuerpo entero para ver quien era. Y ahí estaba, mi salvación ya había llegado.




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