El escape no fue de lo más sencillo, noqueamos a un seguridad por si Peter revisaba la habitación se viera el cuerpo bajo las sábanas, escondí dentro de unos cartuchos de basura mis pertenencias y yo también me escondí dentro de uno. La Sra. Marie me ayudó y también escapó conmigo.
Me sentía tan viva después de haber salido de ese lugar, lo único que me atormentaba era la cara de Peter en mis sueños. No fue fácil sobrevivir, pues como no tenía estudios no era sencillo encontrar trabajo, y no me quería aprovechar de los ahorros de la Sra. Marie. Tardé alrededor de cinco meses en adaptarme a esta vida sin los lujos que me daba mi padre y sin los lujos de Peter.
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Han pasado 2 años desde que la Sra. Marie escapó conmigo. Ahora tengo 20 años. No he tenido contacto con "Mi querido padre", ni con el maldito comprador, Peter.
Trabajo en una agencia inmobiliaria desde hace un año y la Sra. Marie se queda en casa para ayudar con los quehaceres. Vivimos en una casa que ella compró con sus ahorros, yo le doy algo de dinero pues siento como si me aprovechara de ella, muchas veces ella me regresa el dinero pero entonces lo gasto es cosas para ella como ropa, algunos caprichos, etc. También pago las cuentas.
Los recuerdos de la última noche en casa de Peter se borraron, igual que mis días de estancia en ella, ya no recuerdo ni siquiera como es su cara. No quiero ningún recuerdo acerca de ese desgraciado.
Susan, una de mis amigas, me saco de mis pensamientos con un pequeño toque en el hombro.
- Disculpa, estaba distraída ¿Se te ofrece algo, Susan?
- Hoy tengo una cita y me preguntaba si me podrías prestar uno de esos fabulosos vestidos que tienes en tu armario y que personalmente, nunca te he visto usar.
Ni nunca usaré, pensé.
- Claro. ¿Quién es el afortunado?- dije con un tono pícaro y riéndome un poco.
- Peter Standford ¡ay! ¡Es tan guapo! y...
Me desconecté totalmente de lo que me estaba diciendo. Peter, ¡Mierda! Peter esta aquí. Tengo que decirle Marie. Tenemos que huir antes de que nos descubra.
- ¡Phoebe! ¿Me estás escuchando?
- Lo siento.
- Bueno no importa. Hoy me pasara a recoger ¡Hoy lo conocerás! Espero que lo apruebes, ya sabes que no salgo con alguien hace tiempo y...- Me siguió contando sus cosas pero ya yo no prestaba atención.
- Lo siento. Hoy me tengo que ir más temprano, olvidé que tenía una cita con la Sra...
- Phoebe, soy tu secretaria. Para hoy no tienes ninguna cita y tú nunca aceptas citas a esta hora y...- se escuchó una puerta
- Creo que vino por mi.-Dijo sonriendo nerviosa.
- ¿Y cómo quieres que te preste el vestido si ya te vas?- Dije dándole la mejor excusa para irme.
- ¡Por eso! Quiero que vengas conmigo. Se pueden conocer y me puedo cambiar en tu casa. Por favor.- Me miró con cara de perrito.
- Creo que...
- Por favor. Es mi pequeña travesura. Necesito tu ayuda.
- ¿Pequeña Travesura?
- Está comprometido.
- ¿Comprometido?- Con menos razón entiendo por qué me compró.
pero prometido, wow. No puedo describir lo que sentí al escuchar eso. .
- Sí, por eso necesito tu ayuda.
- Realmente no creo que deba hacer esto.- y no lo quiero hacer, dije para mis adentros.
- Muchas, Muchas gracias Phoebe.- me abrazó- Gracias.
- Ya entendí - dije casi sin aliento por el fuerte abrazo.
Tome mis cosas y metí algunas dentro de mi bolso. Salí con un par de gafas oscuras puestas para que no me reconociera. Me había pintado el cabello más claro. No creo que me reconozca.
Susan estaba en su escritorio recogiendo sus cosas mientras que el "sujeto" estaba en la otra sala leyendo una revista. Lo vi ya que la pared es de cristal y se puede ver hacia donde él está.
Cuando Susan termina de recoger sus cosas le digo bajito.
- No le digas mi nombre real. Para él, me llamo Stephanie Vanhouten.
- ¿Por qué?
- Solo sígueme la corriente por favor.
- Ok, pero eso es muy extraño.
- Yo te ayudo y tú me ayudas.
Salimos y Peter se levanto para saludar a Susan con un beso en la mejilla y cuando se volteó a mirarme, me vio con cara de confundido. Pero luego una sonrisa maliciosa apareció en sus labios.
Tomó mi mano y se la llevo a sus labios. Sus labios se sentían cálidos en mi piel. Pero rápidamente me aleje.
- Mucho gusto. Soy Peter Standford.
- Stephanie Vanhouten.-Dije intentando que mi voz sonara un poco diferente a lo usual y que él no me reconociera.
- Tenemos que irnos ya si queremos llegar a tiempo a la reservación...
- Claro, Susan.
- Pero antes hay que pasar por la casa de Pho... Stephanie. Necesito cambiarme.
Nunca haré que Susan diga otra mentira. Es mala mentirosa.
- No hay ningún problema.-Y allí estaba de nuevo esa maldita sonrisa maliciosa, cuanto lo odio.
Susan engancho un brazo al de Peter y empieza a caminar hacia la salida pero antes de salir se volteo a mi y me guiña el ojo. Es muy , muy descarado.
Como él estaba sosteniendo la puerta para que Susan y yo pudiéramos salir, tomó uno de mis brazos y acerco sus labios a mis oídos
- Te encontré.
Mierda. Ahora mas que nunca la Sra. Marie y yo tendremos que huir de aquí. Pero ¿A dónde?Huiríamos esta noche de eso estaba segura.
Hola chicas, ahora sí, oficialmente regresé. Sé que tarde más de lo que les había prometido pero es mejor tarde que nunca.
Espero que este capítulo les encante ya que lo hice con mucho cariño para ustedes (y para que no me dejen).
La verdad me divierte mucho responder sus comentarios y espero que sigan comentando y votando. Los extrañé y los quiero.
Pronto sabrán de mí. :D
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Eres Mía
Romance¿Qué harías si te dicen que fuiste vendida? ¿Qué harías si no pudieras salir de una gran mansión y tu dueño te dijera que eres suya como si fueras un objeto? Descubre como Phoebe vive con Peter Standford un hombre rico y guapo que no la dejará ir f...