2: Un deseo de cumpleaños.

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JongDae miraba su reloj en forma de dinosaurio en su habitación, miraba la manecilla de los segundos con un embelesamiento digno de un niño.

Cuando el reloj marcó las 12:00am, JongDae abrió su habitación por primera vez en un año y salió corriendo intentando recordar el camino que debía recorrer para llegar a la habitación de sus padres.


Sus pies cubiertos por unos calcetines de pandas y su pijama de dinosaurio se movían rápidamente junto con él.
JongDae abrió la puerta de la habitación de sus padres rogando que aún no estuvieran dormidos, Y en efecto, ambos se preparaban para dormir.

JongDae abrió la puerta de la habitación de sus padres rogando que aún no estuvieran dormidos, Y en efecto, ambos se preparaban para dormir

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Su padre, el señor Kris, levantó la mirada que anteriormente la tenía sobre su pantalón de pijama para buscar la etiqueta.

-JongDae- hablaron los dos adultos.

Su madre se desmaquillaba frente al espejo y su padre permanecía junto a la cama.

JongDae intentó tomar aire, pero sentía que sus pulmones se negaban.

Su madre corrió a su closet y sacó un tanque de oxígeno con una mascarilla.

El padre del muchacho lo hizo pasar y lo sentó en el pequeño sofá que tenían en la recámara.

JongDae se sentía agobiado por sus padres, quería decirles su deseo de cumpleaños pero antes de poder hablar, ya tenía una mascarilla de oxígeno.

-No debiste correr, tenías el radio comunicador- más que un regaño, su madre sonaba preocupada.

-JongDae, sabes perfectamente que tu no debes correr. Pudiste hablar y nosotros hubiéramos corrido a tu habitación-

Con mucho cuidado JongDae se apartó la mascarilla de la cara y sonrió.

-Padres, hoy es mi cumpleaños- anunció con tranquilidad.

Ambos padres sonrieron enternecidos por su pequeño hijo.

-¿Quieres gastar tan rápido tu deseo de cumpleaños?- preguntó su madre.

-Yep- asintió JongDae.

-Bueno, ¿Que vas a querer, Dae?- preguntó su padre mientras lo tranquilizaba con leves caricias en su cabeza -¿Vas a querer una nueva pijama?-

-Tal vez un nuevo videojuego- habló su madre.

JongDae negó, había esperado 3 meses para pedir ese deseo. Ya no importaba si sus bandas favoritas sacaban disco, si habían sacado una nueva parte de su saga de juegos favoritos, él sólo quería una cosa.

-Quiero un dibujo-

-¿Un dibujo?- preguntaron al unísono sus progenitores.

-Si. Estaba mirando por mi ventana y vi de casualidad a un chico dibujar.-

-¿Entonces quieres que contratemos a ese chico para que te haga un retrato?- preguntó su padre

-hum- asintió JongDae

-Bueno, creo que puedo hablar personalmente con el chico y....- su madre quería exponer su idea, pero JongDae habló.

-hoy a las 5:00pm en el parque, en la tercera banca frente al lago- soltó con una velocidad increíble.

Ambos padres rieron y asintieron.

Sus padres tenían el dinero para deshacerse en mimos por su hijo, pero amaban la humildad y sencillez que poseía JongDae, su pequeño bebé.

-Y una cosa más- dijo

-dinos- su madre le apretó delicadamente la mano, pues sabía que debía cuidar su fuerza.

-Hoy duermen conmigo-

Ambos padres rieron y asintieron, a veces olvidaban que su hijo era un ser humano común y cualquiera.

Después de un par de minutos los tres estaban en la cama de JongDae con este último en medio de los dos adultos que dormían cómodamente, y es que no importaba cuánto JongDae quisiera dormir, su corazón estaba feliz y no lo dejaba descansar.

Cuando por fin el sueño llegó a él, soñó con el rostro de aquel chico y la bella sonrisa que siempre lo distinguía.

-Feliz cumpleaños a ti, feliz cumpleaños querido JongDae, feliz cumpleaños a ti-

JongDae abrió los ojos con una sonrisa gracias al bello sueño y al feliz despertar.

JongDae vio el pequeño pastel individual de fresas que traían sus padres como cada año, sólo que esta vez se veía especial.

-Buenos días, mi angelito- dijeron sus padres.

-Buenos días, padres- JongDae sonrió antes de tallarse los ojos.

-¿Que quieres hacer hoy? Tu padre y yo tenemos una Junta al medio día, pero en cuanto termine ambos volveremos a casa para que hagamos lo que tu quieras- su madre sonrió y dejó a un lado el pastel. Se sentó junto a su hijo y removió los cabellos de su cara.

-Primero quiero orinar y darme una ducha, pero con ustedes quiero ver una película y posiblemente jugar monopoli, pero antes- JongDae tomó aire -¿Aún recuerdan mi deseo de cumpleaños?-

Ambos padres rieron y asintieron, su hijo aún conservaba una inocencia digna de un niño.

-Claro que si- sonrió su padre -Volveremos a tiempo para hablar con el joven que nos dijiste-

JongDae asintió lentamente con una pequeña sonrisa de nerviosismo que lo delataba a los ojos de su madre.

-Entonces eso es todo- su ritmo cardíaco empezó a alterarse como nunca antes, pero debía calmarse para evitar arruinar ese día.

》Vamos corazón, aguanta sólo este dia《 se dijo.

Sus padres se despidieron de su pequeño antes de irse a su trabajo.

JongDae fue al baño y al orinar una sonrisa se dibujó en él.

JongDae quería brincar por todos lados, pero sabía que podía ser peligroso. con calma decidió darse un baño y esperar a que ese día terminara, quería contarle a su almohada sobre como era ese chico frente a frente.

-Aún no empiezo el fanfic- se recordó en la ducha -Debería llamarlo.....¿Chen y el chico ardilla? -

Chen dejaba las gotas de agua caer

-¿Cómo se llamará? ¿Su nombre combina con el mío? ¿qué voy a hacer con Sehun? Debería dejar de hablar sólo-

JongDae siguió con su ducha mientras en su cabeza se formulaba varias preguntas, pero una era constante: "¿Será que le voy a caer bien?"








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Gracias a -Pxnguinx- por la nueva portada. ¿Me dejarías ponerla en el PDF?

Nota 2: amé esta imagen.

Créditos a: a quien la hizo xD

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Créditos a: a quien la hizo xD

[HIATUS] EL EFECTO MARIPOSA || CHENMIN || XIUCHEN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora