Duelo de Poder. (terminada)

Capitulo 1 El pasado regresa.

CAPITULO 1

Se encontraba en la ventana del lujoso despacho, 2 años habían pasado ya desde su separación, ese día en especial no le traía buenos recuerdos, una lágrima se resbalaba por su rostro mientras recordaba ese fatídico día, que debería haber sido uno de los más felices de su vida.

Flasback (25 de Febrero, ciudad de New York hace 2 años 2011).La brisa suave del nuevo día entraba por la ventana, mientras la tenue luz del amanecer inundaba la habitación, entre sueños sentía unas manos fuertes recorriendo su cintura y una boca suave incitándola a despertarse, su boca era cálida, pero a la vez tan posesiva, su lengua recorría sus labios húmedos llamándola a corresponderle estaban tan cerca, que ella, era consciente como nunca de su cuerpo poderoso que era todo virilidad. Tenía una fuerza irresistible que inundaba sus sentidos. Ya estaba empezando a sentir el calor que le recorría el cuerpo bajo sus caricias, y se le estaba acelerando el pulso.
Poco antes del total amanecer, sintió que le acariciaba los muslos, y suavemente le quitaba la camiseta. Intentó protestar, pero Esteban la acercó a él y le acarició con la boca la parte más sensible del cuello.Victoria lo empujó y emitió un sonido ronco cuando sus labios siguieron el camino hacia sus pechos y la cubrió de besos hasta llegar al vientre.Sabía a mujer, cálida y sensual, pensó Esteban y se recreó un rato saboreándola, acariciando sus caderas mientras ella perdía el control. Entonces le abrió los muslos y se hundió en ella profundamente, sintiendo cómo se adaptaba a él, y oyó su respiración entrecortada cuando empezó a moverse suavemente hasta que le clavó los dedos en la espalda y siguió su ritmo.Después de unos instantes, le acarició el cuello y la besó siguiendo el camino de su boca hasta el pecho, y jugueteó con el pezón hasta que sintió que su cuerpo se estremecía. La besó de nuevo, dulce y lentamente, y el beso se convirtió en algo tan erótico que ella sintió cómo el deseo recorría su cuerpo tembloroso otra vez, mientras el derramaba con un fuerte grito su simiente en su calidez.Esteban se giró con facilidad y apoyó la espalda en la cama, y ella se arqueó disfrutando de la sensación de poder mientras marcaba el ritmo y ponía a prueba la capacidad de control de su marido.-¿Has acabado?
-No, todavía no -rozó con el borde de los dientes un pezón masculino, lo mordisqueó y lo chupó, consciente de toda la excitación que le estaba causando.
-Cuando termines de jugar, mi amor...
¿De jugar? Victoria puso su mirada más sensual, entonces sí que lo mordió y lo hizo estremecerse, mientras se arqueaba y se movía felinamente para tenerlo aún más dentro, cabalgándolo, incrementando el ritmo hasta que los dos volvieron a encentrarse en lo más alto del placer con una intensidad que los dejó ardiendo de sensualidad.
Cuando dejó su cuerpo descansar sobre el de Esteban, el corazón todavía le latía con una fuerza increíble y tenía la respiración entrecortada. Sintió sus manos acariciándole la piel, calmándola hasta que se relajó por completo.¡Ha sido un despertar maravillosos! exclamo Victoria.
Feliz aniversario de bodas, respondió Esteban, no hagas planes para esta noche, te tengo reservada una sorpresa. ¿Ah sí? Respondió Victoria, no creo que se compare a la que yo de daré, mientras recordaba los escarpines de bebé guardados en su cómoda y le brindaba una sensual sonrisa a su marido.

Desayunaron en la terraza, mientras Victoria comía a toda prisa, se había demorado demasiado en la ducha esa mañana, no tendría tiempo para leer los periódicos del día, mientras Esteban miraba las páginas de la sección de negocios, pensó, los leeré mas tarde en el bufete.

Esteban, Estaba relajado y cómodo. Se apoyaba en el respaldo de la silla con gracia felina. Llevaba el pelo perfectamente peinado, estaba recién afeitado y tenía dos botones de la camisa sin abotonar. La chaqueta y la corbata descansaban en la silla de al lado. El maletín y el ordenador portátil estaban en el suelo.
El importante abogado, pensó ella distraídamente, poderoso y con una autoridad incontestable. Tenía una inflexibilidad y una dureza que sin duda provenían de haber sobrevivido, contra todo pronóstico, a la dura vida de la corte, lo amaba con tal locura, nunca se imagino que aquel insufrible compañero de universidad llegaría a ser dueño de su corazón.
Él alzó la vista y la miró fijamente con una sonrisa.-Si has acabado ya, tenemos que irnos, Eran casi las ocho y media cuando llegaron al bufete.*** Bufete Sandoval y San Román ***Buenos días Señora San Román, dijo Lucy su secretaria, tiene una visita esperándola en la sala, me ha dicho que no tiene cita, pero que está segura que usted la recibirá, se llama Ana Rosa Stevenson, dijo que habían sido compañeras de Universidad.