Asfodel "Capitulo V"

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Asfodel el nombre de ese hermoso lugar, estaba en un cuento de hadas como en "firelight" o en "corazón de tinta".
-vengan las quiero presentar ante el rey-Susan camino había un gran árbol con agua cayendo de las ramas, ventanas iluminadas de tonalidades de amarillo, había un puente que guiaba hasta la puerta principal con arcos hechos de algún material blanco que formaban grandes pilares y finos  detalles de espirales y hojas entrelazadas en los arcos, la puerta era grande de madera con plantas doradas y plateadas cubriéndola, Susan dijo unas palabras que no logre vocalizar, las plantas se empezaron a mover, las enormes puertas se abren y había dos guardias con grandes armaduras plateadas y doradas y unos cascos con cuernos como los de el hermano de Thor, su cabello era largo y plateado , sus orejas puntiagudas y unas manos grandes y huesudas que sostenían grandes lanzas.
-repórtense-dijo uno de los guardias, su voz era grave y áspera, Mariana, Isabel, Alejandra y yo nos volteamos a ver y luego vimos a Susan, ella se acercó al guardia y le susurró al oído algo tan bajo que no alcanzábamos a escuchar, el guardia abrió mucho los ojos.
-le avisaré al rey- y de inmediato salió corriendo hacia el interior del castillo, sus paredes eran blancas con pilares dorados, una gran alfombra roja resaltaba en medio de la habitación dirigiéndose a un gran trono blanco con una corona grabada en dorado en la punta y dos puertas marrones a los lados por donde se metió el guardia.
-qué le dijiste?-dijo Mariana a Susan con un tono enojado
-le conté algo, que les contaré luego, primero lo debe de saber el rey-dijo Susan en voz baja.
-espero que no se tome demasiado tiempo-dijo Alejandra - mi madre a de estar preocupada-
-tranquila-dijo Susan- el tiempo aquí es diferente al mundo del que vienen-
-como en Narnia-dije emocionada y todas me voltearon a ver- oh no es el momento-
-algo así, aquí hay una pequeña diferencia de tiempo- seguía susurrando -pero primero antes de volver deben de saber que....-no pudo de terminar la oración por qué una voz se escucho.
-bienvenidas, señoritas-todas lo volteamos a ver era un hombre alto con el cabello marrón con canas apenas se alcanzaba a ver su color, con un traje dorado con encaje plata y una corona en su cabeza, sus ojos eran verdes tan claros que te podías reflejar en sus ojos, se acercó a nosotras-sean bienvenidas a Asfodel pequeñas viajeras, yo soy el rey Octavian.

A través de la puerta Donde viven las historias. Descúbrelo ahora