Promesas

Capitulo 6.

Un poco después estábamos frente a un auto de lujo, un BMW negro.

Entonces el negocio si deja no? - y suelto una pequeña risa.

Es el de los mandados - me dice el mientras nos subimos al auto.

Nos movemos a traves de la ciudad entre el trafico, la verdad que me relaje y por un momento dejé de preocuparme por todas las cosas que tenia en la cabeza, pero creo que me relaje demás ya que mime dijo:

Que haces tu con un encendedor? - me miro de una manera autoritaria.

Para encender estos - dije de manera obvia mientras sacaba mis cigarrillos de la bolsa de mi suéter.

Fumas? - me dijo sorprendido.

Si, ya hace algún tiempo - le digo yo - en la cárcel me enseñaron, ya que todos con los que me juntaba o mas bien convivía fumaban, no iba a ser la excepción, no?

Vez eres demasiado manipulable niña - Yo lo miro, y no digo nada por que tiene razón.

No por nada en si, pero la tu del pasado, creo yo quisiera matarte, ya sabes tu promesa - levanto los dedos del volante - yo no te diré nada.

Querido amigo mío, las promesas nunca se cumplen - Le dije mientras encendía el cigarrillo.

Quizás he cambiado pero en realidad fui forzada ha hacerlo, ahora en realidad no creo en las promesas las personas siempre pueden fingir que nunca se prometió nada entonces, no hay razon para creer en su palabra.

Las promesas siempre tienen vigencia - susurro, sin querer y creo que mime logro escucharlo, y note que se puso algo incomodo.

Mejor, vamos por esos tragos - Me dice mi amigo mientras se estaciona frente a un bar, algo fancy.

En realidad que lo necesito, amigo mío - aun podia notar la incomodidad o inconformidad de mime.

El puede seguir creyendo en las personas, solo yo ya no lo hago.

Nos bajamos del auto y había algunas personas alrededor, no les tomamos mucha importancia y entramos al establecimiento, mi sorpresa comenzó cuando uno de los meseros saluda a mime.

Jefe, en que lo puedo ayudar? - el chico se veía algo intimidado por la presencia de mi amigo en el lugar.

Tranquilo chico, solo vengo a tomar unos tragos estaremos en la barra privada - mime le da una palmada en la espalda y le dirige otras palabras.

Si alguien pregunta por mi, diles que no me encuentro - el chico asintió en repetidas ocasiones, haciendo ver lo nervioso que se encontraba.

Owen no?, buen trabajo sigue así - le da otra palmada en la espalda y comienza a avanzar por el lugar, justo a un lado de la barra estaba un puerta, mime tuvo que empujar con ambas manos ya que al verla un poco mas de cerca pude notar que esta tenia una gran tamaño y grosor por lo que supuse que es blindada.

Ingresamos a esta sección del bar, y pude notar por que mime dijo que es "privada", desde lejos se puede notar la categoría de las personas que están en este sitio.

El dinero no es algo que falte de este lado del bar, y las personas que estaban aquí lanzaban miradas prepotentes, y que tratan de analizarte para ver si perteneces a su grupo.

No se notaba presencia de armas, pero la seguridad del sitio y de las personas que estaban ahi imponía e intimidaba.

Mime ignora todo a su alrededor y se dirige a la barra, en donde comienza una platica y toma asiento, yo solo lo sigo y tomo asiento junto a el.

Hola Martha, lo de siempre por favor - mime habla con una de las chicas que se encuentran detrás de la barra.

Claro jefe. - Dice la chica para comenzar a preparar lo que le pidió.

Tu pequeña, que tomaras? - mi amigo me dirige la mirada.

No lo se, elige por mi - el frunce el ceño - cualquier cosa que sea fuerte estará bien para mi.

Bueno, si tu lo dices - deja de mirarme y dirige su vista hacia Martha. - Martha que sean dos.

Ella solo asiente y sigue preparando algunas cosas.

Bien pequeña, tienes donde vivir? - me pregunta.

Un poco confundida comienzo a analizar la información que antes había obtenido de el, por lo que si el ya sabia que yo me encontraba en la carcel supongo que debe de saber donde vivo actualmente, y sospecho que también nuestro "encuentro" de hoy tampoco es una casualidad.

Creo que lo debes de saber perfectamente, o me equivoco querido amigo? - mime toma el vaso que Martha justo dejo frente a nosotros y ríe un poco antes de darle un trago.

Martha solo frunce el ceño y se retira a otra sección de la barra, junto a otros chicos.

Mime comienza a hablar por lo que mi atención vuelve a el, ya que mi vista se había enfocado en un chico, que se encontraba junto a Martha.

Pequeña Arely, claro que se donde vives, pero seria raro si te lo dijera no? - el me mira directamente y vuelve a tomar otro trago.

En realidad lo seria - doy un trago a mi bebida, y demonios era lo mejor que había tomado, siento como el alcohol pasa por completo por todo mi sistema y al instante me brinda un poco de calor, le doy un vistazo al vaso.- Demonios si que es bueno.

Lo se Martha es la mejor, siempre vengo aquí cuando necesito de un buen trago - miro el vaso de mime y en realidad le gusta ya que esta a nada de terminarlo.

Bueno mime, entonces me dejaras trabajar contigo? - el mira su vaso y le da un trago demasiado largo para terminarlo. - Solo quiero tener algo con lo que mantenerme, sin tener que sufrir carencias y sin que me juzguen.

Mime le hace una señal a Martha, y esta comienza a preparar otra bebida.

Tomo mi vaso y lo termino, el alcohol ahora no calienta sino que quema al momento de tomarlo.

Martha, otro por favor - le indico a la chica que ya se encontraba preparando las bebidas.

Que puedas tomar alcohol no significa que estés lista para la maraña de situaciones a la que te enfrentaras, estas segura? - mime se gira y recarga su espalda sobre la barra y comienza a examinar el lugar con la mirada.

No hay nada que sea seguro en esta vida - recargo uno de mis brazos en la barra y con el otro tomo el vaso lleno que Martha dejo frente a mi. - solo la muerte amigo mío.

Creo que eso me funciona pequeña - mime le da un largo trago a su vaso - Bienvenida a mi mundo.

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