Take all of Me. (BTS)

☜♥☞ Capítulo 7 ☜♥☞

.•❤ POV JUNGKOOK ❤•.

Tenía un cigarrillo en los labios. Era el cuarto que fumaba y se me estaba terminando, no solía fumar con frecuencia, sólo lo hacía cuando estaba estresado o nervioso, en ese momento me sentía de ambas maneras y quería relajarme sin importar si consumía la cajetilla completa. Mi cuerpo aún vibraba no sólo por el frío que me calaba los huesos, sino por la adrenalina que todavía me recorría de pies a cabeza con gran velocidad.

Sobre mis hombros caía una gran carga. Fornicar con tu hermano no es cosa fácil ni mucho menos agradable para algunas personas, a mí simplemente me la sudaba el asunto. Me importaba poco si lo dañaba, su dolor me causaría satisfacción.

Apagué el sobrante de cigarrillo aplastándolo contra el suelo y caminé hacia el interior del edificio. Hacía alrededor de veinte minutos que había aparcado en el estacionamiento, me mantuve dentro de mi auto un par de minutos, mirando el asiento trasero por el espejo retrovisor, soñando despierto, reviviendo cada escena, cada gemido, cada jadeo, cada suplica...

En un inicio, cuándo supe que el chico que tenía enfrente era mi hermano... traté de saber más de él, mi subconsciente decía: >>Es agradable, ¿no lo crees?<< y sí, mi sub tenía razón, lo era. Simplemente no iba hacerle nada, ya lo haría sufrir después, me propuse llevarlo a casa pero todo colapsó igual que una casa de cartas al escucharle decir que su hermano le había arruinado la vida.

¡Él me había arruinado la vida a mí! ¡Yo era el mayor y él era un maldito bastardo! ¡Él había disfrutado de mi madre desde la infancia! ¿¡Y yo!? ¡Yo tuve que aprender a vivir sin el cariño de ella, sin la guía que necesitaba para saber lo que estaba bien y lo que estaba mal! ¡Él me había arrebatado a mi madre...! Pero ya no importaba... Poco a poco lo iba a fastidiar al grado de hacerle desear el no haber nacido...

Llamé el elevador y esperé con los ojos cerrados hasta que éste llegara, mientras lo hacía alguien más se detuvo junto a mí, era un hombre, lo supe por su fragancia. Abrí los ojos al escuchar las puertas del elevador y entré, el tipo que estaba junto a mí imitó mi gesto y se paró a mi derecha. Ninguno de los dos dijo nada, sólo nos movimos a la par para tratar de presionar un botón.

—Oh, lo siento. —se disculpó alejando el brazo riendo tímidamente.

—¿A qué piso va? —medio lo miré. No se veía muy mayor, tendríamos casi la misma edad o tal vez un par de años más.

—Al 15... —presioné el botón con el número 15 y me recargué en el frío metal, a fin de cuentas yo iba al mismo piso. Volví a cerrar los ojos y suspiré escuchando la tonadita clásica—. Es nuevo, ¿verdad?

—¿Eh? —era obvio que me hablaba a mí, a menos que estuviera loco y le gustase hablar con la nada. Abrí los ojos metiendo las manos en mis bolsas y lo miré con más detenimiento. Tenía casi mi estatura, su piel era un poco bronceada y su cabello color chocolate igual que sus ojos, su nariz era perfecta, por un momento le envidié que tuviera la nariz tan recta, sus labios eran entre delgados y gruesos y me sonreía a pesar que no me conocía.

—Es usted el que se ha mudado al 225 junto con otro chico y una pequeña, ¿verdad?

—¿Por qué lo pregunta? —vacilé un poco arisco.

—Bueno —sobó su nuca y prosiguió—, no es que yo lleve mucho tiempo viviendo aquí, de hecho, acabo de mudarme apenas hace unos días. Ayer por la tarde salí de mi departamento justo cuando los vi llegar con el vendedor, por cierto, mi departamento es el 220 —informó sonriendo—, no conozco a nadie aquí. La mayoría de las personas son mayores y personas con el ego demasiado elevado que pasan por alto el "buenos días". ¡Oh, que mal educado! Jung HoSeok. —estiró la mano esperando que yo la apretara, y lo hice.