"Always Together"

"Tres"

"Que linda te ves con tu cabello recogido" dijo el chico de ojos grises "que bien que pueda volver a verte".

"Es un placer volver a verte" le dije riéndome.

"Mi nombre es Adam, por cierto" me dijo bajando su mirada "no te dije la otra vez como me llamaba".

"Oye, tranquilo, es normal que te suceda eso" dije con una sonrisa muy amigable "¿nos podemos sentar?" dije señalandole la banca que se encontraba con nieve debido a la época.

"Por supuesto que si" tomó de mi brazo y me llevo hasta la baca.

"Que caballeroso" le dije riendo.

"Ese es mi segundo nombre" dijo mientras me sonreía y yo también. Es un chico muy simpático.

Ambos nos quedamos callados, solo observamos a nuestros hermanos jugar y sus lindas risas, llevo unos días aquí y me encanta estar con mi hermanito. Falta una semana para que sea navidad y no sé si mi mamá quiere que entre a estudiar aún, en el orfanato estaba en noveno grado. Y ya que no lo terminé debo hacerlo, pero me pregunto muchas cosas desde que vine como por ejemplo: cómo este chico se fijo en mi, por qué las chicas quieren ser mis amigas. Tengo mucho que pensar estos últimos días y tengo mucho tiempo para hacerlo. Siento unos dedos tocando las puntas de los mechones que salen de mi pelo recogido, no hago nada, solo pienso quien lo harás y obviamente es Adam. Pero no quise prestarle atención porque quiero que llame mi atención de formas distintas y no tocando absurdamente mi cabello.

"¿Te gustaría ir a comer pizza conmigo hoy en la noche?" dijo mientras me quitaba mi coleta y dejaba que mi cabello cayera por mi espalda. Y... ¿qué se supone que debo decir? ¡Es la primera vez que un chico me invita a salir! Okey, respira y piensa una respuesta coherente.

"Voy a preguntarle a mamá" dije mostrando mi celular. Se nota que no sabía que responder.

"Oh tranquila, yo me encargo de eso" tomó mi celular y entró a whatsapp, buscó el contacto de mi madre y hablaron:

Mamá: Hola cariño.
Adam: Hola mamá de Andie, soy Adam, quería pedirle permiso para que ella vaya a comer conmigo pizza hoy en la noche. Yo la llevo y la traigo.
Mamá: Esta bien chico, cuídala.

Definitivamente mi mamá se pasa de buena, es la primera madre que veo que acepta tan rápido. El solo sonreía victorioso, mientras veía mi cara solo me sonrió tiernamente e hizo de nuevo mi coleta.

"¿Qué clase de madre acepta que un chico que no conoce salga con su hija? ¿Cómo un chico sabe hacer colas de caballo a una chica?"

"Una madre que me conoce y tengo una hermana que vive solo conmigo, es costumbre" me dijo sonriente.

Este es un mundo paralelo, definitivamente.

(...)

El almuerzo fue comida chatarra, una hamburguesa de doble queso, papas fritas con salsa y un vaso enorme con Coca-cola. Nunca he comido esta clase de comida en bastantes años; creo que Tyler piensa lo mismo por su rostro.

"Que feo despertaste hoy" le dije viendo sus manos.

"No es eso, el clima de Durham hace que mi cara se vea triste" dijo serio. "Callate porque aquí la fea eres tu".

Si, estamos en Durham. En realidad no entendía en donde rayos estabamos, el orfanato estaba en Londres. Durham es un lugar de gente sencilla, la casa es muy grande como para ser de un barrio pobre. Aunque eso no es asunto mío. Es triste que siempre este nublado aunque los rayos del sol salgan por entre las nubes, todos andan con sudaderos o abrigos largos. Se acerca cada vez la noche y cada vez me late aún más fuerte mi corazón, es mi primera cita por así decirlo. Adam es un chico muy lindo y en realidad me gustan mucho sus ojos, pero va a ser muy incómodo cuando estemos totalmente a solas. Miraba "Corazones En Conflicto" que es una de las películas que más ponían en el orfanato, miraba el preciso momento en donde la palabra "te amo" sonaba en boca de los dos enamorados que son los protagonistas. Miraba esos momentos cursis, que empalagan pero no podemos dejar de ver, cuando suena el ensordecedor sonido del timbre. Era Adam.

"Andie, te vienen a buscar" dijo Tyler de una forma un tanto grosera. "Más te vale que lo beses y iré a partirle la cara al estupido"

Le sonreí "no sé que suceda, idiota. Cállate mejor por favor" besé su mejilla, tomé un bolso pequeño en donde guardo mi celular y fui directamente a la puerta.

Lo primero que pude ver fue un carro no tan viejo pero no tan nuevo, de seguro era un chico de dinero viviendo en un lugar no tan bueno. Luego miré a los lados y no encontraba el rostro de Adam, camine cerrando la puerta atrás de mi y dirigiendome hacia el jardín. Sentí unas manos un tanto grandes cubriendo mis manos, obviamente es Adam.

"Sube al auto, no preguntes" dijo Adam finjiendo un tono de un secuestrador. El carro era muy lindo, en la radio sonaba Somewhere only we go de Keane. Es la canción más depresiva y pegajosa que conozco, Adam se sentó frente al volante y me dijo: "Señorita, vamos a la pizzería".

(...)

"¡Eres un tonto! No puedes ni manejar" le dije tomando con fuerza el cinturon de seguridad.

"Oye tranquila" dijo molesto pero con una sonrisa satisfactoria y me pregunto si se sentirás feliz solo porque le dije tonto. "Llegamos Andie". Dijo estacionandose y bajando corriendo del auto para poder abrir mi puerta.

Dentro de la pizzería habían muchos chicos, chicas, familias. No he comido pizza entonces esta será una de las experiencias más interesnates de toda mi vida, había una mesa sola y directamente Adam me señaló que fueramos a sentarnos allí. El pidio una pizza de peperoni con queso extra, cuando llevaron la pizza se me antojo. Tome una y fue lo más delicioso que he comido en toda mi maldita vida, Adam me observaba con una sonrisa tierna porque claramente entiende el caso mío. Comí 4 pedazos de pizza y Adam comió otros 4.

"Que comelona eres, linda" mi ruborice automáticamente.

"Lo siento, es la primera vez que como esto" le dije riendo.

Movió su brazo derecho y lo puso sobre mis hombres, como si fuera un abrazo y medio. Yo solo me quedaba callada y no le decía absolutamente nada por vergüenza, sentía mis mejillas hirviendo por el color camercí que tenían. Con su mano izquierda tomo mi mejilla e hizo que lo mirara a los ojos, seguí poniéndome más roja.

"Tienes unos ojos muy lindos" dijo sonriendo tiernamente. "Y tu cabello se viene mucho a tu linda carita".

Genial, estoy como una mierda manzana.

"Eres muy linda Andie, ¿lo sabias?" yo solo podía ver como su rostro se acercaba lentamente al mío.

"No lo sabía" le dije ruborizada aún.

"Pues es un gusto poder ver a una persona tan hermosa como tu de cerca".

Lo único que sentía era su rostro estando más y más cerca del mío. Hasta que nuestras respiraciones se hicieron una.