Al día siguiente vamos juntos al colegio donde gracias a Joaco nadie me molesto y aunque todo estuvo tranquilo había algo en mí que no me dejaba tranquila, que me presiona el pecho. Sé que mi papá volverá algún día y la tortura empezará de nuevo, siento tanto miedo al saber que Joaco no podrá estar ahí para ayudarme, ya que no puede estar todo el día encima de mí. Tiene que haber una forma de poder salir de la oscuridad que es mi vida sin tener que irme, tal vez sea Joaco esa luz de esperanza.
Aún recuerdo las tardes felices que teníamos, como mis padres se amaban tanto y parecía que nadie los separaría. El ultimo recuerdo feliz que tengo es en mi cumpleaños número 9 donde todos nos quedamos en casa e preparamos una torta de chocolate y luego nos tiramos en una piscina a disfrutar de la tarde, recuerdo lo mucho que nos reímos con Viki. Para terminar el día todos nos juntamos en la sala para ver mi película favorita ¨La bella y la bestia¨ mi parte favorita es la parte del baile, mi sueño era algún día bailar con la persona que ame para toda la vida.
Tantos momentos hermosos que se fueron con la partida de mi mamá. Sé que mi papá también sufre, varias veces lo encontré llorando, sufriendo por la algo que nunca me contara. Quiero ayudarlo, pero cada vez que lo intento salgo lastimada o algo peor, sé que suena tonto que lo diga, pero siento que aún está a tiempo de cambiar.
Yo no le podría perdonar todo lo que hizo, pero aún tengo la esperanza de que esa familia, las risas, el amor vuelva y que esta vez nada nos separe.
Mi papá una vez dijo:
El cielo puede estar cubierto con unas nubes grises, pero atrás de ellas siempre habrá un cielo azul.