Nuestra promesa

No quiero perderlo.

Después de caminar un rato llegaron a casa de Kuroko y se despidieron.

Narra Kuroko:

"¿Él te gusta?"

Sigo recordando esa frase, cuando Kagami-kun me pregunto si me gustaba Akashi-kun no supe que responder, mi mente se quedó en blanco, de alguna forma el primer impulso que tuve fue decirle que si pero sé que no es lo correcto, Kagami-kun se me confeso y no creo que sea tan buena idea contestar por puro impulso sin tener en cuenta lo que dijo, aparte no estoy tan seguro de que es lo que siento, también cabe la posibilidad de que yo no le guste a Akashi-kun de forma romantica, aunque por un momento me ilusione pensándolo.

Mientras Kuroko seguía sumido en sus pensamientos su teléfono empezó a sonar, cuando se percató de que le estaban llamando contesto.

-Habla Kuroko, ¿Quién es?
-¿Eh? ¿Acaso no tienes registrado mi número Kuroko?.-Dijo con una leve risa la voz al otro lado del teléfono.
-¿Akashi-kun?.- Pregunto Kuroko con un tono de alegría.
-Claro que sí, ¿Acaso ya me habías olvidado?.- Seguía hablando de forma animada.
-No, claro que no, solo que estoy acostumbrado a los mensajes y no a las llamadas.
-Lo sé, por lo general te envío mensajes porque creo que es más probable que puedas contestar a ellos.-Hizo una pausa y agrego con una voz más baja.-...esta vez te llame porque extrañaba escuchar tu linda voz.
.-Kuroko se sonrojo ante aquel comentario.- Yo también extrañaba escucharte Akashi-Kun.
-¿Cómo has estado? ¿Te ha ido bien?
-Sí, he estado bien, no he logrado hacer amigos más allá del equipo de basquetbol, pero con Kagami-Kun me es suficiente.
-¿No crees que estas muy apegado a Kagami?.-Dijo Akashi con celos.
-No sé a qué te refieres, es mi amigo es normal que me lleve bien con él.-Dijo un poco confundido.
-No me gusta que estés tanto tiempo con el.-Dijo con voz fría.
-¿Por qué?
-Creo que podría tener más intenciones contigo, ¿no lo crees?
-Akashi-kun...-Dijo de forma un poco apenada.
-¿Qué pasa Kuroko?
-Kagami-kun se me confeso hoy.
-¡¿Qué?!.- Dijo Akashi con casi un grito.- ¿Cómo se atreve? ¿Qué le dijiste?
-Le dije que no podía salir con él.
-Me parece bien, acaban de conocerse hace unos meses y sería raro que salieran.
-¿Por qué seria raro?
-Pues prácticamente son unos desconocidos y ambos son hombres.- Dijo Akashi sin pensar muy bien lo que contestaba.
-Ya veo...sería raro...-Dijo Kuroko desanimado.
-¿Qué pasa Kuroko?
-Akashi-kun, ¿Quieres decir que nunca saldrías con un chico solo por ser hombre?.-Pregunto con un nudo en la garganta.
.-Al escuchar la pregunta Akashi entendió lo que había pasado, lo había arruinado por sus estúpidos celos.- Kuroko no me refería a eso... yo solo....-No pudo terminar pues lo interrumpieron.
-No tienes que explicarme nada, esa es tu opinión, tengo claro que jamás saldrías con alguien del mismo sexo.-En otras palabras Akashi-Kun jamás saldría conmigo.- Y-yo me tengo que ir.-Dijo Kuroko al borde de las lágrimas.
-¡Espera!...- Pero era demasiado tarde, la llamada se había cortado.- Kuroko...

Narra Akashi:

¿Qué hice? Yo no quería decir eso, es decir, no me gustan los hombres, pero Kuroko es la excepción es la única persona con la que me pongo tan nervioso al hablar aunque sea por teléfono, él es diferente, claramente me gusta y quisiera salir con el pero le acabo de decir todo lo contrario, le dije que nunca saldría con un hombre, ¡Soy un idiota!, estoy casi seguro que estaba a punto de llorar...por mi culpa.

Me puse tan celoso al confirmar mis sospechas, ese tal Kagami quiere de la misma forma a Kuroko y ya se le confeso, si las cosas siguen de este modo puede que Kuroko considere estar con él, no quiero que eso pase, yo... ¡NO QUIERO PERDERLO!

Akashi no pudo estar tranquilo durante toda la noche, seguía preocupado por Kuroko y todo lo que le había dicho.

Al día siguiente Kuroko fue a la escuela, para ser sinceros con menos ganas que de costumbre, casi siendo obligado a asistir. Al llegar a su salón se encontró con Kagami.

-¡Wow! Te ves fatal pequeño.
-Gracias por el cumplido.-Dijo Kuroko sentándose en su lugar.
-Sabes que como sea que te veas me seguirás gustando.- Un leve sonrojo se generó en Kuroko.- Pero ¿Qué te pasa?
-No quiero hablar de eso aquí.

Kagami y Kuroko salieron del salón y se dirigieron al patio, se sentaron en una banca y continuaron conversando.

-¿Ya me dirás que paso?
-Se podría decir que tuve una leve discusión con Akashi-kun...
-¿Qué les paso ahora?.-Pregunto intrigado Kagami.
-Le conté acerca de lo que había pasado ayer.- Después de decirlo se tapó la boca.
-Vaya, así que Akashi ya sabe que me gustas.
-Lo siento, se me escapo decírselo.-Dijo apenado.
-No te preocupes, se podría decir que me ahorraste un trabajo.
-¿Un trabajo?
-Sí, tarde o temprano se lo iba a decir, después de todo estoy seguro de que somos rivales.
-¿Rivales?
-Algún día lo entenderás.
-Espero poder hacerlo.-Dijo sonriendo.- Gracias Kagami-kun, me has hecho sentir mejor.
-No hay de que, siempre estaré para ti.-Dijo mirándolo a los ojos.
-Es muy amable de tu parte.
-Sabes que eres importante para mi Kuroko.- Se quedaron mirando fijamente por un rato y poco a poco Kagami se fue acercando hasta quedar a unos pocos centímetros de distancia de la cara de Kuroko...