Instagram |Mario Selman|

52.

N/A: Todo lo que este en cursiva es dialogo en español.

Mario.

-MARIO, YA ME VOY.- Gritó desde el pie de la escalera.

-Espera, ya voy.- Dije corriendo escaleras abajo.

-Bueno, ya sabes que hacer y no te pongas nervioso.- Caminamos hasta la puerta y la abrió.- Recuerda, sonríe y se tú mismo, nos vemos al rato.

-De acuerdo, gracias por ayudarme con todo esto Ariel.- Sonreí.

-De nada, para eso estoy.- Me abrazo.- Ahora ve a ducharte y vístete que a las 6 tienes que ir por ella.

-Si, lo tengo muy presente todo.

-Okay, ahora sí me voy, tengo que irme a duchar, vestirme, maquillarme y peinarme.- Reí mientras cerraba la puerta de la casa y subí corriendo las escaleras, toque la puerta de Cat, ella abrió al instante y en sus manos traiga un vestido.

-Hey, ¿Ariel te ayudo en lo que necesitabas?.- Camino hacia su cama extendiendo el vestido sobre ella.

-Si, estoy nervioso.- Me senté a un lado del vestido.

-Ay vamos Mario, ya la has visto antes.

-Lo sé, pero las veces anteriores que la he visto no habíamos tenido tanta conexión como ahora.- Hice una mueca.- Además... me sudan las manos.

-Que asco.- Reí.- Sal de mi habitación asqueroso.- Me jalo del brazo hasta la puerta y mientras ambos reíamos.

-De acuerdo, iré a ducharme y quiero que para las 5:30 estés lista, Catalina.- La mire amenazante.

-Si, lo que digas.- Cerró la puerta en mi cara logrando golpear mi nariz.

-Auuuch.- Me queje.

-No seas niña.- Gritó Cat desde el interior de su habitación y ambos volvimos a reír.

[...]

[...]

[...]

- TE DIJE QUE A LAS 5:30 DEBÍAS ESTAR LISTA, CATALINA.- Grite nervioso/enojado desde la planta baja.

-SOLO DAME UN SEGUNDO.- Ella grito como respuesta.

-Hey, ¿qué pasa aquí?.- Salió mi madre de la cocina.- ¿Por qué tantos gritos?

-Le dije a Cat que a las 5:30 debía estar lista y ya pasa de esa hora.

-Pues, ¿qué hora es?

-5:34

-Es un exagerado, mamá.- Dijo Cat terminado de bajar las escaleras y poniendo sus ojos en blanco.- Solo estás nervioso.

-Ay mi bebé ya está grande.- Me apretó las mejillas.

-Ay, ya mamá.- Reí y aparte sus manos.

-Vámonos, ¿no que mucha prisa?

-Bien, vámonos ya.- Abrí la puerta principal.- Nos vemos al rato, mamá.- Bese su mejilla y Cat me imito.