Después de haber aprendido la magia espacial Kini y yo decidimos marchar a Niwtan, la Capital. Ya nos habíamos despedido de todos y andábamos por el camino principal de cuarzo que llevaba a la ciudad.
-Que rápido ha pasado todo- Dijo mi hermano mirando al cielo despejado.
-Lo sé, ha sido una locura, pero me gusta esta magia- Puse mis manos hacia arriba a la altura del diafragma y puse en marcha uno de los hechizos, no era un hechizo poderoso pero si bonito, de inmediato una luna de tres centímetros de radio comenzó a rotar alrededor de mí.
Kini sonrió -¡Ese hechizo me encanta! A demás no gasta maná, más a nuestro favor.
A nuestro alrededor se podían ver los árboles de un vivo color verde, atravesar el bosque por el camino de cuarzo era lo más seguro que había, se oyeron ruidos de pasos que provenían de atrás.
-¡Ey! ¡Mellizos Tréndiwer!
Kini y yo nos miramos, desenfundé la espada y miramos al extraño sujeto. Era Will que venía corriendo hacia nosotros con un saco a la espalda -¡Os olvidáis de mí!
Volví a guardar la espada decepcionada, -Oh eres tú.
Will bromeó -Yo también me alegro de verte- Me guiñó un ojo.
Mi hermano le dio una palmada en la espalda, a pesar de ser de la misma edad, Kini le sacaba una cabeza a Will por no hablar de que mi hermano parecía un armario y él no tanto -¿Que pasa compañero?
-Tengo dos cosas que decir -Aún hablaba algo sofocado, cogió aire -Uno, ¿qué os parece si organizamos una fiesta?
-¿Qué clase de fiesta?- Pregunté
-Como un grupo de guerreros que van de aventuras, a eso me refiero.
El guerrero de las sombras se quedó pensativo un momento -Me parece una buena idea, pero si somos una fiesta, ¿cuál es nuestra misión prioritaria?
Nos quedamos los tres pensativos y finalmente dije -Que más da, lo ideal sería hacer muchas misiones y si mal no recuerdo... -Miré a Kini -Me dijiste que sabías donde encontrar una armadura... -Sujeté mi barbilla con la mano -No recuerdo el nombre...
Mi hermano supo enseguida de lo que hablaba -¡Oh! Ya lo recuerdo, la armadura de Háfferum.
Will entró en la conversación, anteriormente estaba un poco perdido -¿Y donde dices que se encuentra?
Mi hermano sonrió con culpabilidad -No lo sé.
Le miré extrañada y William se limitó a reírse a carcajadas -Este tío es genial, mírale- Le pegó una palmada en la espalda.
-Vaya dos...
-En verdad tengo un mapa en mi alijo en el que está marcado el lugar donde se encuentra la armadura.
Me emocioné pero solo un poco -¿Y tu alijo está en...?
-En Capital- Dijo señalando el camino blanco.
William se adelantó entusiasta -¡Allá vamos!
Choqué los cinco con mi hermano y corrimos un poco para alcanzarle -Genial, aquí empieza lo bueno.
El camino aún era largo y en el frondoso bosque aún no se veía la salida, seguíamos cruzando el bosque, estábamos en silencio pensando cada uno en sus cosas, yo iba junto a Will y Kini un poco más alejado por delante de nosotros, yo iba pensando en mis cosas y cuando quise darme cuenta comencé a recordar ese día... Me encontraba en la torre descansando en mi habitación, estudiando un libro sobre magia a la luz de la luna, me disponía a dormir cuando alguien llamó a mi puerta, me levanté de la cama, iba tan solo con un camisón morado oscuro, me puse mis botas negras, abrí la puerta y allí estaba Will un poco sonrojado -Ho-hola... es que... no podía dormir, vaya, veo que te has cortado el cabello a media melena, estás preciosa.
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Los ojos del dragón
Viễn tưởngLos ojos del dragón están custodiados por una joven llamada Mika Tréndiwer. Un día decide irse del pueblo de Min y emprender una aventura sin saber nada de su poder oculto, su objetivo es tan solo ser conocida en las Tierras de Sébber pero consigue...