Todos estaban en la sala de conferencias, aburridos mientras una llovizna caia sobre raccon city esa tarde de marzo.
Nuevamente ante los ojos de chris jill valentine era la más hermosa criatura de todas.
Simplemente era sumamente hermosa, rebosaba de una belleza inusual que logró ablandar el duro corazón de chris.
Eran aproximadamente las siete de la noche hasta que chris desvió su mirada al rincón en donde jill estaba quien habia portado unos jeans apretados que resaltaban sus largas piernas y una camiseta ceñida color azul que a pesar de ser un conjunto común para chris ella lucia más que perfecta.
Chris pensó que si era el unico que notó que jill al agacharse se le habian soltado 2 botones de su camisa y se lograba ver el pronunciado escote de sus grandes pechos.Chris negó con la cabeza, apartando pensamientos inapropiados de su mente, se acomodó la erección que parecia destrozar su delicada bragueta e imploró a quien lo escuchase sus plegarias de que nadie lo descubriera, no obstante recibió una mirada resaprobatoria de su superior, el capitán wesker.
¿estaria wesker pensando que se estaba masturbando en plena conferencia? La simple idea le avergonzaba y chris supuso que estaba rojo como tomate maduro, pues tenia todas las mirafas de sus compañeros posadas en el. En especial 2 enormes ojos azules, enmarcados por largas y espesas pestañas ambarinas, que le observaban expectantes y curiosos.
Ya que jill era la novata de s.t.a.r.s nadie le prestaba tanta atención, con sus cortas 2 semanas de trabajo aun así se volvió una de las mejores agentes que existe, chris no habia tenido tanta suerte de haber dialogado mucho con ella, pero solian intercambiar sonrisas muy a menudo. Chris queria relacionarse mejor con ella mejor; por más estupido que sonara ansiaba saber sus pasatiempos ó su comida ó color favorito, datos triviales sin mucha importancia, pero chris parecia tomar esos aspectos con demasiada seriedad.
-bien, pueden retirarse. Chris, jill necesito su informe con urgencia a primera hora, mañana.
Chris asintió con la cabeza algo aturdido y contempló a wesker largarse secundado por el enorme Barry Burton que chsrlaba con joseph frost sobre los recientes acontecimientos en las cercanias a las montañas arklay. Brad vickers salió de igual forma no sin antes, darle un corto beso en los labios a jill.
Chris observó la escena, pensando en como una semidiosa como jill pudiera traer algo con alguien tan patetico como brad.
-cuidate- le aconsejó Brad con una sonrisita nerviosa al cruzar la puerta.
" hijo de puta" pensó chris antes de retirarse de la oficina y miar a jill con ira, jill no aguantó la curiosidad y lo siguió sin que chris la notara...
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chris x jill : un juego de infieles
Romantikcuando chris conoció a jill la quimica entre ellos era más que obvia pero ¿podran estar juntos? "¿para que amarnos cuando podemos limitarnos a satisfacer nuestros deseos egoistas?