Sus ojos verdes me miraron, como nunca antes lo habían hecho. Cada vez había menos distancia entre nosotros. Me acarició la cara con una mano, y con la otra me apartó un mechón de pelo, y me lo colocó detrás de la oreja. Estábamos a centímetros, él me colocó una mano a la espalda, obligándome a pegarme más a él, hasta que nuestros labios se juntaron. Era un beso muy tierno. Al separarnos, me miró con la misma intensidad que antes.
-Jessica...
-¿Sí?-dije yo ruborizada.
-Jessica, despierta. DESPIEEEEERTA.
Abrí los ojos, tenía a mi hermano mayor delante, riéndose a más no poder.
-¿Besa bien la almohada?-se burló.
-Compruébaló tú.- le grité mientras le tiraba la almohada en toda la cara. Solté una carcajada.- ¡Sal de aquí!-lo eché a empujones de mi habitación.
Cerré la puerta y me tumbé en la cama a pensar. El sueño era tan bonito. Y el chico, ese chico... Sí, me suena. Pero, ¿de qué?
*flash-back*
Estaba de camino a casa de una amiga. Llegaba tarde, así que decidí tomar un atajo, y fui por el parque. En un banco, se encontraba un grupo de chicos que aparentaban tener mi edad, o puede que un año más.
-Preciosaaaaa-me gritó uno. Pasé de su comentario.
Otro se acercó a mí y me pidió el Whatsapp. Yo me limité a empujarle. Él rió y le miré. Tenía los ojos verdes, tengo debilidad por los ojos verdes. Su pelo era castaño y tenía una sonrisa preciosa.
En el resto de camino, no pude dejar de pensar en él.
¡Era él! ¡El chico que había visto el otro día! Qué guapo era...
***********
Amy, mi mejor amiga, me llamó, y me invitó a pasar el día en su casa. Me preparé y fui para allá.
Toqué el timbre. Esperé impaciente, y nadie habría. Volví a tocar y la puerta se abrió, pero no era Amy, era... ¿QUÉ? Lo reconocí por sus ojos verdes, era él, el chico de mi sueño.
¿Me habré confundido? Miré el número de la casa, el 23. No, no me había equivocado, era esa, pero...
Él rió al verme confusa y yo me mordí el labio, sonrojada. De repente salió Amy, y yo suspiré aliviada.
-Hola Jessy.
-Por un momento pensé que me había confundido, que alivio.-ella rió.
-Este es mi primo, Joshua.
Me ofreció su mano para que le saludace, mientras me miraba con una cara..
-Oye, tú no eres... ¿la chica del otro día?-dijo- Sí, sí, la del parque.
-Te tuve que dejar loco para que te acuerdes, eh-él rió.
-¿Se conocen? Bien.-intervino Amy
-Es una larga historia-dijo él.
Pasé y nos sentamos en el sillón. Yo estaba en mi mundo, no dejaba de pensar en Joshua. Primero sueño con él, y después descubro que es el primo de mi mejor amiga..
Un golpe en la cara con un cojín, me sacó de mis pensamientos.
Ellos rieron, yo le eché una mirada pícara y a la vez perversa a Amy, y le di un... ¿"cojinazo"?
Estuvimos hablando, y decidí sacar el tema de qué hacía aquí Joshua.
-Estoy aquí pasando el día, ya que mis padres están de viaje y estaba sólo en mi casa.
-¿Al pequeño le da miedo estar sólo en casa?-me burlé.
-El pequeño, que por cierto te saca una cabeza, se aburría lo máximo-dijo él, seguido de una carcajada.
Yo bajé la mirada, he de admitir que soy un poco orgullosa.
El tiempo se me pasó volando y cuando me di cuenta, se había hecho de noche, y me tenía que ir a casa. Amy estaba atendiendo una llamada, así que fue Joshua quien me acompañó fuera.
-Adiós.-me despedí.
-Nos volveremos a ver, eh-más que una pregunta, parecía una afirmación. No pude evitar sonreír, y él también lo hizo.
Volví a casa, y la verdad, Joshua no salía de mi cabeza. Ni su nombre, ni su pelo, ni sus ojos, ni su sonrisa,... No hacía nada que lo acababa de ver, pero no sé porque qué, estaba deseando volver a verlo.
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Hipnotizada
RomanceJessica es una chica de 16 años. Conoce a un chico, y descubre que es el primo de su mejor amiga. Lo que desconoce, son los sentimientos que éste le va a acasionar. Se sentirá "hipnotizada por el amor".