Behind the door ↪SeHo↩

Falling whith you / Cayendo contigo

Dedicada a: MeiVirus ¡final final final!

Que recuerde había sido muy cuidadoso de que SeHun no me dejará marcas, pero en algún descuido mio, aprovechó, y lo hizo a pesar de que siempre le advertía que no lo hiciera.

Nuestro último encuentro después del partido, habíamos corrido riesgo de que su padre se despertara en medio de la noche a causa de los ruidos, por suerte eso no había pasado. Pero tal vez a causa de toda esa adrenalina corriendo por mi sangre hizo que me olvidara de todo, y SeHun lo entendió como un pase libre para hacer lo que quisiera.

Tuvieron que pasar dos días para que Kris se diera cuenta que las marcas que tenía en el hombro, no eran hechas por él. Si bien en el momento me hice al desentendido, él no me creyó el teatro y empezamos una nueva discusión que ya eran frecuentes en nuestra relación.

Me acuso "de engañarlo" lo cual era cierto, pero obviamente tenia que negarlo. Y le invente la típica escusa de que me había golpeado con algo, no me creyó y me pidió el divorcio. Me quede quieto, mudo y sin mirarlo, ante esa propuesta me sentía entre el cielo y el infierno.

No sabia muy bien como reaccionar, porque aunque no quisiera admitirlo era algo que muy en el fondo deseaba de hace tiempo. Pero también estaba SeHun, seria mucho más difícil el poder estar juntos o vernos cuanto tiempo queramos. Realmente era una decision de doble filo.

Salí de mi trance en cuanto escuche la puerta de la entrada cerrarse, con una fuerza que creí que las bisagras habían salido de su lugar.

Solté el aire en un suspiro inaudible, tomando de la mesita al lado de mi cama el porta retrato, que guardaba celosamente detrás de su vidrio la foto de los tres juntos que nos habíamos tomado en el verano pasado. Kris me abrazaba por la espalda ocupando la mayor parte de mi cuerpo, pero SeHun se la había ingeniado para apoyar su mano en mi cintura. Por suerte su padre no era alguien quien se fijara si algo mal había salido en la fotografía.

Para suerte mía, no era así, pero todo aquello quedo atrás, ahora me encontraba en un problema que ni yo mismo me lo planteé antes, por estar jugando al adolescente con mi amante. No siempre puedo pensar seriamente, no cuando SeHun me lleva sin permiso, me maneja sin limite y me devuelve solo cuando el quiere.

Justo como ahora que en vez de estar preocupado por como me relación se encamina, estoy pensando en el menor y sus encantos que no me dejan ni en los sueños más inocentes.

Después de aquella discusión y algunas llamadas a su teléfono que fueron en vano porque siempre mandaba al buzón de voz, decidí seguir mi día normal. Fui de compras, almorze con amigos y a la vuelta ya estaba haciendo la cena para SeHun y quizás -si venia- para Kris.

Como era costumbre, SeHun envolvió sus brazos en mi cintura, mientras inclinaba mi cuello para que sus húmedos besos hicieran contacto con mi sensible piel.

Tuve que deterlo, en cuanto escuche mi teléfono sonar, fui a atenderlo para solo recibir "no iré a casa esta noche". Solo atine a suspirar y pensar en positivo, quizás mañana volvería con una nueva actitud y algunos chocolates. Tan cliché y predecible.

—¿Era Kris?

—¿Eso importa? —de alguna forma me sentía enojado, demasiado para lo que me interesa que estuviera o no.

—Ven, te voy a relajar un poco

[...]