Capítulo 2

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Actualidad... 

Hace dos días mi vida dio un giro de 360 grados, ahora me encuentro perdida, sin saber por donde empezar para cumplir mi único objetivo en este momento: mantener con vida a aquellos que amo. 

Luego de sentarnos a hablar, llorar, gritar, y descargarnos en definitiva, ideamos un plan de supervivencia momentáneo; resulta que Nick era poseedor de un sótano reforzado para este tipo de situaciones, ya que sus padres eran un poco paranoicos para nuestra suerte, lo raro es que al entrar notamos que no había nadie en él, cosa poco lógica porque se supone que tendría que haber gente resguardándose dentro, o al menos esperábamos encontrarnos con la familia de Nick, pero como ya dije antes, allí no había nadie más que nosotros. 

Tomamos todo lo que creímos necesario, ropa, comida, mantas, abrigo, todo lo que nos sirviera como armas, y preservativos, porque ya saben, el ser humano tiene necesidades, y no queremos reproducirnos en el medio del apocalipsis, digamos que no está en nuestros planes por el momento. 

- Hay que recorrer la ciudad en busca de provisiones, no sé si esto nos dure más de una semana, somos muchas personas - Habló Derek, estábamos sentados formando un gran circulo de personas en el sótano de Nick. 

- No sabemos lo que hay ahí afuera, ustedes vieron lo que pasó con ese chico en el pasillo, no sabemos qué son capaces de hacer esas cosas, están por todos lados - Habló Nathan, un chico rubio bastante alto, que, por lo que pude deducir en el juego de Paintball que organizamos meses atrás es bueno con las armas, especialmente si lo ponen en un puesto de francotirador. 

- Tiene razón, no sabemos como tratar con eso, evidentemente es un virus que actúa rápido y se propaga a través de la sangre, si nos rasguñan o muerden estamos fritos - Habló Monic mirando a Derek con clara obviedad, cosa que extrañamente me molestó. 

- Pues, no sé ustedes, pero yo quiero saber en donde está mi familia, quiero respuestas y no las voy a conseguir sentada en un sótano viendo como poco a poco las cosas desaparecen - Dije, me paré del cojín en el que estaba sentada y los miré a todos. 

- Estoy de acuerdo con ella, necesito ver si mi familia está bien - Clark se levantó y se cruzó de brazos a mi lado, mirando a todos con una ceja levantada. 

- Bien ¿qué tienen en mente? - Preguntó Kendall devolviéndole la mirada a Clark. 

- Tenía pensado que cada uno de nosotros tome un carrito del supermercado que está a unas calles de aquí y llenarlos con provisiones - Hablé, Derek y Clark asintieron con un movimiento de cabeza invitándome a que prosiguiera - y luego conseguir una radio, si evacuaron a nuestras familias seguramente nos estén buscando a nosotros, y la única forma de contactarnos es a través de una estación de radio, probablemente tengamos que inspeccionar algunas patrullas de policías. 

- Entonces el plan es... - Dijo Monic y dejó la frase flotando en el aire, esta chica me estaba exasperando. 

- Dividirnos en dos grupos, grupo A y grupo B, el grupo A será el encargado de llenar los carritos con comida, y todas las cosas que necesitemos, el grupo B se encargará de buscar una radio que funcione en las patrullas, y si es posible conseguir armas y municiones, hay que matar a esas cosas, es la única opción. - Habló Derek con semblante serio, Monic y Clara lo miraron horrorizadas - Pueden quedarse si quieren, necesitamos gente que se quede aquí por si alguien necesita un refugio. - Las chicas asintieron repetidas veces y yo les regalé una sonrisa burlona, ambas me sacaron la lengua y rodé los ojos. Derek me pegó en la cabeza levemente y lo miré con cara de "¿es en serio? estamos en el medio de un apocalipsis zombi ¿y aún te molesta que haga eso?". El ambiente guerrero que se había generado se fue al carajo. Pero supongo que es mejor, si menos nos estresamos más fácil va a ser encontrar a nuestras familias. 

- Bien, Michelle, Nick, Lina, Kendall y Nathan, ustedes formaran el grupo A, son los más veloces. - Habló Clark a mi lado. Los cuatro últimos solo asintieron con la cabeza, Michelle levantó la barbilla con superioridad y fingió mirarse las uñas - Ari, Derek y yo iremos en busca de la radio y las armas - Dijo posando sus manos en mis hombros.  

- Bien, deprisa, agarren sus armas y salgamos, hagan silencio, el ruido les llama la atención, no cometan estupideces, eso va para ti Michelle - Dijo Derek y Michi lo miró ofendida - y traten de volver antes de que anochezca, no sabemos como está la cosa de noche. Si se pone feo no duden en darles en la cabeza y correr hacia el refugio. - Derek tomó mi mano y me arrastró fuera, seguido de Clark, que intentaba seguirnos el paso. 

- Hey ¿qué te pasa? - Le susurré al notar su mal genio. 

- Este tipo Clark no me cae. - Dijo mientras caminaba aún con mi mano entrelazada a la suya. 

- Ya, intenta ignorarlo, no es un mal tipo y lo sabes. - Asintió con la cabeza y poco a poco su expresión de enfado se fue suavizando. 

En el camino habíamos encontrado cuatro patrullas levemente destruidas, para nuestra suerte no había ningún "zombi" a la vista. Cada uno se fue por su lado a inspeccionarlas, yo estaba dentro de una, recogiendo las balas de dos de las pistolas que encontré en la guantera, cuando en determinado momento se me dio por ver qué hacían Derek y Clark, ambos estaban en lo suyo, ajenos a la escena que se encontraba frente a mis ojos; en el horizonte de la calle que se encontraba frente a mí, divisé a cinco figuras que bajaban a toda velocidad en carritos de supermercado completamente atiborrados de productos, rodé los ojos con diversión al verlos, pero mi cara se transformó a una de horror al ver a la gigantesca horda de zombis que los perseguía. Los cinco carritos pasaron a mi lado como un rayo, pude divisar la cabellera rubia de mi mejor amiga, que al pasar por mi lado me gritó "¡Corre, imbécil!", en ese momento mi cerebro hizo click y vi las llaves de la patrulla debajo de el asiento del conductor, recé porque funcionaran, y para mi suerte, así lo hicieron. Le grité a los chicos que corrieran al auto aún con el motor encendido, y una vez que estuvieron en él huí a toda velocidad de la horda que se acercaba cada vez más. Llegamos a la casa de Nick y bajamos lo más rápido que pudimos del auto, los demás todavía batallaban para poder pasar los carritos hacia el sótano. 

- ¡Ustedes encárguense de los carritos! ¡nosotros les daremos tiempo! - Gritó Nathan, quien comenzó a disparar a los zombis junto con Clark y Derek, ya que eran los únicos que llevaban armas de fuego con ellos. 

Ayudé a entrar los cinco carritos hacia nuestro refugio y les grité a los chicos que podían entrar. Estábamos todos fatigados, bajo las interrogantes miradas de Monic y Clara que buscaban una explicación de todo lo sucedido.

- Y bien ¿qué carajos fue todo eso? escuchamos disparos cerca de aquí - Dijo Clara mirándonos a todos. 

- Digamos que conducimos a una horda salvaje de zombis hasta aquí - Le contesté y sonreí nerviosa.  

No Hay Zombies A La Vista Donde viven las historias. Descúbrelo ahora