El tiempo desaparecía cuando
sus risas arqueban un puentes
entre mis ojos y sus pupilas.Y tan solo una de sus miradas
daba una chispa de alegría,
haciendo sentir cálida
hasta la mañana mas fría.No sabías si vivías o morirías
pues sus palabras
te dejaban colgado de rimas,
de poesía.No querías que terminaran, anhelabas mas horas en el día,
solo para releer esas frases
llenas de energía.Pues de esa forma dejaba sin
poder a la tristeza que en ella
existía, le quitaba las fuerzas
a su extraña melancolía.Escribir la hacía fuerte contra
lo que no podía controlar,
te metía en su historia, lista
para continuar.Porque fuera de sí para
ella el universo era igual, sin
sentido y normal, no tenía
relevancia la nueva moda,
la vida o lo banal.Reconocía que era diferente, y
viviá un poco fuera de lo habitual, pero así disfrutaba cosas únicas, hacía lo ilógico mas real.El privilegio estaba en escuchar
sus historias contar, que no necesitaba mucho para hacerte saber que no se puede vivir sin
amar, ni sentir sin respirar.Que la vida esta llena de detalles
que tendemos a ignorar, pero cuando los vez, requiere esfuerzo
no llegarlos a olvidar.El final de mi historia empieza a terminar, no sin antes agradecer
a la chica con ojos de fuego y sentimientos de cristal.Me ayudo a ver los hermosos momentos que se pueden vivir,
pero nada mejor que tener con
quien poderlos compartir.
ESTÁS LEYENDO
My Poetry
PoetryPalabras que decifran no solo historias bonitas, sino sentimientos reales