Tenias Que Ser Tu

capítulo 11

No puede ser un día para el campamento y Santiago volvió a caer con Celeste, si volvieron y yo volví a ser plato de segunda mesa.
Ahora no tengo compañero de autobús bueno si, con el que se iba a sentar con ella, a ver quien resulta ser.
Cuando me subo al asiento busco el número que debía ser de Celeste todavía no puedo creer que Santiago me cambiara de lugar por menos Flor y su novio también consiguieron cambiarse para que no estuviera tan sola, me siento y estaba la única persona que no me había imaginado
-Ed que haces aquí
- Oh vaya estaba esperando a Celeste pero vi que regresó con su antiguo novio bueno ya no me preocupare por una enfadosa
Cuando lo ví sentí alivio de que fuera uno de mis mejores amigos y no un chico que se cree de lo mejor solo por estar en algún equipo, todo el día que estuvimos en el camión hablamos de tonterías y me la pasé de lo mejor con el sentía que estaba ocupando el lugar de Santiago, el me ha defraudado mucho y esta vez me dolió que si ya sabía cómo era su novia Celeste para que vuelve.
Cuando llegó la noche no pude más y me dormí en el hombro de Edward y sentí como el se quedó dormido en mi cabeza y los dos compartíamos una cobija ya que hacía frío.
A la mañana siguiente cuando desperté y el ya estaba despierto
-Buenos días linda
Con esto lo único que consigue es ruborizarme y el lo nota que me sonríe.
Con esto nos pusimos a hacer mensadas y cuando llegamos nos pusimos a armar las casas de campaña Flor y yo nos íbamos a dormir juntas y Ed y Jack en otra casa de campaña.
Cuando tuvimos las casas listas nos pusimos a hacer actividades y en la noche empezó a llover que las casas de campaña se nos metió el agua por lo que nos tuvimos que ir a otra casa de campaña pero todas estaban llenas así que nos tuvimos que ir a la casa de campaña de Jack y Edward obviamente Flor se metio en el sleeping con Jack y yo con Edward a darnos calor, en cuanto me acomodé siento la mano de Ed rodearme la cintura y con ésto su última palabra del día fue
-Te amo Ale
-Yo también Ed, le contestó
Y dicho esto me da un beso en el hombro y nos quedamos profundamente dormidos.