Holaaaa de nuevo!! Acá les traigo un nuevo fanfic, sobre Corazón de Melón.
Esta historia será puramente Bl y Gl! Así que si no les gusta pueden ver hacía otro lado y no critiquen.. Ya están advertidos/as!
Bueno y para los que si les gusta este géner...
Bueno, antes de empezar, muchas gracias por leer mi nueva historia, iré subiendo un capítulo o dos por semana, todos los sábados ya que es mi día libre y podré terminar, arreglar y subir el capítulo. Okay, quería avisar también, que no se preocupen si no entienden bien las características de los personajes ya que iré colocando al final del episodio las imágenes de cada uno de los que haya descrito, así les será más sencillo.
Era un día normal, todo tranquilo, dentro de lo que se podía en la escuela Sweet Amoris, hace pocos minutos todos los alumnos se habían marchado a sus casas, solo quedaba la directora Shermansky, y tres profesores, la profesora de ciencias Delanay, el profesor de historia Farrés y el profesor de arte Patrick.
Como decía, todo era tranquilo hasta que el ruido de una fuerte explosión se escuchó dentro de la sala de ciencias, los profesores junto con la directora, sorprendidos y enojados, pensando que algún o algunos alumnos entraron a la escuela y causaron problemas se dirigieron al primer piso rápidamente para lograr localizar el problema. Sin embargo, lo que vieron jamás en toda su vida creyeron que iba a suceder. Después de varias charlas y explicaciones, tomaron una decisión, una que cambiaría la vida muchos y repito, muchos alumnos al día siguiente.
-Martes 8:30 am-
Un nuevo día en la escuela Sweet Amoris, había comenzado, todos los alumnos estaban en el patio por pedido de los profesores que no dejaban que nadie de los últimos años entrara, salvo todos los más pequeños.
-Buenos días alumnos, quiero pedirles a todos ustedes ya que están aquí, que hagan el favor de dirigirse al gimnasio- Comentaba el profesor Farrés, algo nervioso junto a la profesora de ciencias.
-¿Por qué profe? ¿Sucedió algo malo? ¿Qué hiciste pelo de menstruación?!- Masculló un rubio de ojos claros, llamado Nathaniel, provocando la ira del pelirrojo y la risa de muy pocos, ya que varios estaban asustados por la pelea que se armaría ante esas palabras.
-¡¿Siguen aquí?! ¡Al Gimnasio, Ahora!- Grito molesta la Sr. Delanay, con los brazos cruzados en su espalda.
Todos los alumnos, hasta Castiel, el joven pelirrojo entraron rápido al lugar ya mencionado, con el profesor Farrés no había problema pero con esta profesora ninguno quería problemas.
Al entrar en medio del gimnasio había un escenario, el mismo que usaron para el concierto, arriba de él, se encontraba la directora, pero eso no era lo extraño, lo extraño era la gran multitud en el fondo del escenario, ya que estaban todos con capuchas negras, que tapaban sus rostros, y habían personas de muchos tamaños, lo que daba a entender que eran niños pequeños y otros eran mucho más altos.
-Buenos días alumnos y alumnas, el día de ayer, sucedió algo inexplicable, luego de muchas vueltas y charlas con los profesores, decidimos que era lo correcto el hacer esto...- Comenzó hablando la directora, vestida con su típico traje rosa, y en brazos su perro del demonio, Kiki, sin ofender a Demonio el perro de Castiel.No dijo nada por unos minutos esperando que todos estuvieran sentados en las sillas que pusieron, además de agregar algo de suspenso. -El día de ayer, aparecieron estas personas que dicen ser del ¡FUTURO!-
-Disculpe directora, pero eso es imposible- Interrumpió, una de las alumnas de pelo castaño y ojos celestes claro, con una sonrisa ladina como si fuera lo más obvio del mundo.
-Esto es una tontería, vamos chicas hay que irnos al aula- Declaró Ámber, una joven rubia de ojos medio celestes verdosos, mientras acomodaba sus cabellos, pero no se levantó ya que la mirada de la directora, toda enfadada más por el rostro rojo que ponía la hizo quedarse quieta.
-¡¡Suficiente!! ¡Aquí están sus hijos que quieren presentarse, y ustedes quieren irse! No podrán hacerlo, tienen esta oportunidad y yo como directora no dejaré que la pierdan, ahora nada de irse... - suspiró para tranquilizarse, tomando un vaso con agua que le ofreció Patrick. -Bien... Retomando lo que decía... ¡¡Que pasen los primeros!!- Se fue al fondo del escenario para ver todo con una sonrisa de vieja chismosa llena de curiosidad de saber cómo reaccionarían sus estudiantes.
Los chicos del futuro se debatían entre quien iría primero, hasta que un encapuchado chisto con molestia y tomando la mano de otros dos, uno mediano y uno más pequeño se puso al frente de todos.
-¡Hola futuro! Como los perdedores no se quieren presentar, lo haremos nosotros porque somos los mejores, dah- Dijo haciendo una pose de ser el mejor con una sonrisa que no se podía apreciar por la capucha.
-¡Ya cállate! Tu eres el perdedor más perdedor de los que estamos aquí- Grito un encapuchado desde atrás.
-Como digas como digas, sé que me amas~ - Dijo divertido antes de mirar a los del futuro. -Solo espero que mi familia no se desmaye o no naceré-
Mientras el chico discutía con las dos personitas que llevo al frente para decidir quién comenzaba a hablar, en el público, los chicos del "pasado" hablaban entre ellos dudosos, nerviosos otros llenos de emoción al saber que estaban sus hijos ahí en ese lugar.
-Priya, ¿tú que piensas de esto? Para mi es emocionante- Decía entre risas una joven peli naranja de ojos verdes.
-Solo espero que aparezcan mis hijos y ser buena madre aah me pone de los nervios saber con quién estaré aunque no dudo que es emocionante- Contestó la castaña de ojos celestes.
-¡Bueno querido público! Nosotros somos los hijos de Priya Kumar- El primer encapuchado el más grande se quitó la capucha dejando ver a un joven castaño hasta las orejas, de ojos celestes oscuros, una sonrisa coqueta y de piel tan blanca como la leche.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Bueno gente! Acá les dejo el primer capítulo de esta historia. Espero que les haya gustado, y el sábado próximo, sin falta subiré el siguiente (si no pasa nada que me impida subirlo).
