Después de...

4

Muerta puedo ver a Fyly dormido, mi mejor amigo, el que me acompañó cuatro años antes. Viendo cómo se comporta ahora que estoy muerta, rompiendo cosas, llorando, gritando, creo que sentía algo por mi y hasta ahora, lo sé. Que estúpida. Quisiera estar viva, que este fuera solo un sueño, una pesadilla y le diría a Yhlf mi segundo mejor amigo que Tomy está loco por el desde hace años, que a Quym está siendo engañada por su novio y que Ally deje a ser tan penosa ella es increíble y tiene toda una vida para lograr sus sueños. Pero ahora solo me queda verlos día tras día sin poder abrazarlos, hablarles ni sentirlos, solo permaneciendo en sus recuerdos.

- Aaaaaaaaaaaa- gritó Fyly al despertar, tomó la foto en donde estábamos el y yo abrazados y habló con ella.
-Si regresaras no volvería a guardarte mis sentimientos. Te amo, viva o muerta y siempre lo haré.
Y confirmo, le gustaba pero siempre lo vi como un amigo y nada más. Pero si estuviera viva no tendría el alma como para decirle que yo no lo amo de la misma manera que él me ama.
Fyly tomó la foto y se acostó, la puso en su pecho y empezó a llorar en silencio. Me acosté junto a él y empecé a acariciarlo mientras le decía que aunque no me viera yo siempre estaré ahí junto a él. Se que es algo tonto ya que no me puede sentir ni escuchar pero de todas maneras lo hice y permanecí junto a él hasta que se quedó dormido.

Dicen, que los muertos no duermen ni sueñan y hasta ese día lo creía pero juro, que solo parpadeé y ya era de día, no encuentro lógica para esto pero me sentí tan bien, ya no sentía tanto dolor y coraje por mi muerte en mi interior. Cuando estaba viva una de mis cosas favoritas era dormir al igual que el smoothie de mango. Cada vez que hago lo que me gusta cuando estaba viva, me siento mejor y más viva pero, por qué al estar con mis amigos no sucede. ¿Será que nunca los valoré?, ¿no fueron importantes?. No se y estoy confundida. Pero sigo pellizcándome día tras día esperando despertar y volver con ellos y jamás dejarlos ir. Bien dicen que nada se valora hasta que se pierde y si, ahora valoro mi vida, mi preciada vida, la que ya no tengo. Se me fue de las manos como agua.