Anny no sabia nada de su vida, recordaba muy poco. Nunca se preocupo por eso, creía que era normal. Hasta que la verdad salio a la luz. ¿Me tenian que ocultar todo este tiempo? Ian me cuenta mis historias, mis viajes, mi verdad y de donde en realida...
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El comienzo de todo
Mi nombre es Anny y lo conocí a él como un día cualquiera. Comencé mi día común y corriente, levantarme, saludar a mis papas e irme a alistar para ir al instituto. Llegando me encontré con mi amiga Norely, las dos nos quedamos mirando a un chico muy peculiar porque nunca lo habíamos visto antes, era lindo así que no se le haría difícil andar por aquí, se nos estaba haciendo tarde así que entramos juntas a nuestra clase de inglés, el profesor solo coge su libro y empieza a copiar en el tablero mientras los demás seguimos hablando sin prestar atención, es aburridor siempre verlo hacer eso pero es una clase más que tengo que tomar.
Mientras el profesor seguía en lo suyo mi amiga y yo nos pusimos a pensar sobre el chico que vimos al entrar, al instante que lo vi paso algo en mi cuerpo, algo raro como si él se hubiera apoderado de mi por un segundo y sus ojos cafés claros fueron como un hechizo, seguro el me ve como una de las tantas chicas que pasan por los pasillos del instituto así que no me hago ilusiones de que sucedería algo entre los dos.
Al acabar la clase fui a mi casillero que queda afrente de coordinación a sacar mis libros de la siguiente clase, vi al chico hablando con el director, me quede mirando fijamente a ver si podía saber de lo que estaban hablando pero el chico se levantó de la silla y salió, se dio cuenta que lo estaba mirando y se acercó lentamente a mí y me pregunto –oye disculpa, ¿sabes dónde queda el baño de los hombres? — su voz era sutil y suave, hablaba con una firmeza que nunca había escuchado — si mira, sigue este pasillo al fondo a la derecha, hay están — mientras decía eso me quede mirando sus ojos, sus tiernos ojos que con la luz que había en el lugar lo hacían ver perfecto, pero es mucho alago a un chico que aun ni conozco.
Cuando le dije donde quedaban los baños me respondió — jeje gracias, oye mi nombre es Ian y espero encontrarme contigo más veces — al instante me voltee, sentí que me puse roja de la pena y creo que él lo noto así que se fue.
Después de salir de clases me fui caminando sola para mi casa, ya estaba poniéndose oscuro así que decidí apurarme, percibí que alguien me seguía así que cogí varios atajos pero en uno de ellos me equivoque y entre a una esquina cerrada, la persona que me seguía se me acercaba y asustada le dije — ¿Qué quieres de mí? ¿Dinero? No tengo nada que me puedas robar — detrás de él llegaron otros tres hombres y me acorralaron poniéndome una venda en los ojos donde no podía ver y atándome los pies y las manos llevándome a un auto, solo pensaba en escapar y en los ojos cafés de Ian, no sé porque esa imagen se reflejaba en mi mente pero me distraía un poco de que me habían secuestrado.
