Explotó todo, o al menos eso creo, quiero hacer muchas cosas, tengo que hacer muchas cosas, por mi y por los demás, son tantas cosas que tengo que hacer que ya no se lo que quiero, ya no se que es lo que hago por mi o por los demás, tengo 20 años, un amor ficticio, una carrera que no se donde va a terminar, amigos de noches y rondas de porro, un liceo por terminar y sigo acá, igual que hace un año... Sigo igual, es raro porque siempre busco la forma de hacer cosas diferentes pero termino en el mismo lugar, termino sin saber que hacer, sin saber a donde ir, sin tener de donde agarrarme, ni siquiera se que quiero hacer.... Y tengo veinte años. Trabajar estaba bueno, solo que tenia que soportar muchas boludeces por unos pocos pesos, pero aprendí que tengo que pasar por eso, digo; más adelante de seguro me encuentre con situaciones peores y no precisamente voy a achacarme. Tengo que entender que no puedo hacer todo al mismo tiempo, no me puedo dividir; debería dejar de fumar o de andar todo mal por la vida, o sea, lo quiero hacer pero a su vez no, digo si, bueno no, MIERDA!
Así es mi mente siempre, que si, que no, que blanco, que negro, que quiero esto pero después no lo quiero más, en eso soy igual a mi padre y lo quiero cambiar, pero para eso tengo que ser más exacto a la hora de las decisiones, un gran amigo me dijo una vez "tenes muchos conflictos con vos mismo por resolver"
Y si, tiene razón, no puedo ser un niño toda mi vida, no puedo dejar que todo a mi alrededor se caiga en pedazos y yo no haga nada, aveces siento y noto que soy una persona que reacciona de forma extraña a las cosas, no de una forma indiferente sino que no dramatizo tanto, capaz que al pensar que todo puede estar peor no me estoy dando cuenta de lo grave que es cierta situación, por eso siempre reacciono tarde a las cosas pareciendo un estúpido, o sintiéndome como un estúpido, a veces me siento lento, como que no encajo en ningún lugar, como que nada de lo que hago esta bien, y aveces en el mismo día me siento de forma totalmente contraria, voy, hago, hablo, camino, me rio, voy, vengo...
Necesito paz...
Necesito poner las cosas en su lugar y decidirme
¿que tan difícil puede ser dejar de ser un niño de veinte años?
Créeme Mathi, no va a ser fácil, pero acordate que sólo es cuestión de proponerselo
