i wanna be yours; spideypool

Arrepentimiento

–¡No me importa si me dejas, vete!–

Wade estaba pasado de copas, y ya era la milésima vez que la pareja peleaba, y a ella no le agradaba ni se sentía cómoda con la relación, así que había decidido dejarlo, e irse.

–Bien.–
Fue lo único que ella dijo, y se fue, dejando a un hombre lleno de rabia y arrepentimiento.

☁️

–No quiero seguir con esto.–

Peter hablo claro, dejando en Gwen una expresión triste, sin saber que decir.

–Está bien, solo dime porque.–

Las lagrimas en de Gwen ya empezaban a caer, y sus ojos se ponían más rojos cada segundo que pasaba.

–Te amo, pero esto no es correcto.–

Peter sentía ya un vacío, porque claro que no era correcto, ella estaba casada, y el solo era un chico.

–¿Puedo abrazarte antes de que acabe?–

Gwen dijo firme, aunque estaba llorando.
Peter asintió y Gwen se acercó para abrazarlo tiernamente, mientras lloraba en su pecho.
Peter solo le dio palmadas suaves en la cabeza.

☁️

–Peter, tienes una misión hoy.–
Fury dijo firme, a lo que Peter rodó los ojos.

–Bah–
Fue lo único que Peter dijo.

–Obviamente no irás solo, te acompañará un anti-héroe conocido.–
En la cara de Fury apareció una sonrisa.

☁️

Spiderman se encontraba en la cima de un edificio, viendo los autos pasar, y comenzó a pensar en ella, en Gwen, en que sería de su vida ahora, si es feliz, o si no.

Estaba por llorar, estaba arrepentido, quería ir a casa de Gwen y aunque su marido estuviera ahí, quería besarla, abrazarla, quería amarla.

Quería hacer algo que él jamás había hecho.

Quería hacerla suya.

–A la mierda.–
Peter susurró para sí mismo, y después se puso en posición para saltar, y cuando estaba a punto de hacerlo, sintió unos brazos en su cintura, obligándolo a retroceder.

–¿Acaso la arañita me abandonaría en una misión? Que irresponsable, Spiderman.–

Peter se sonrojó por debajo de su máscara, pues nunca había sentido unas manos así en su cintura, además de la voz sensual que se escuchaba desde debajo de la máscara de Deadpool.

El aliento del mayor olía demasiado a alcohol, y al castaño ese olor lo mareaba, lo hacía vomitar.

Pero a Wade no le parecía eso.

Por debajo de la máscara, los ojos de Wade estaban hinchados, rojos de tanto llorar.
Porque había cometido el peor error de su vida.
Había dejado ir a la persona que más amo.
La única persona que soporto su manera pervertida de ser.

–Oye...hueles a alcohol.–
Peter estaba más y más incómodo con cada segundo que pasaba, Wade no había soltado su cintura.
El mayor pasó su nariz por el cuello de Peter, el cual solo pudo apartar rápido la cabeza, a lo que Wade lo apretó más contra el.

–¿Crees que voy a dejarte ir?–
Wade dijo con su boca aun en el cuello de Peter, el cual solo lo vio confuso y sonrojado por debajo de la máscara.

–Me siento solo, quiero ser tuyo.–
Wade hablo, y tomo la barbilla de Peter, pero el menor logró apartarse de Wade, a lo que solo le dio un golpe en la cara.

–¡¿Qué te pasa?, ni siquiera sé quién mierda eres!, ¿qué te hace pensar que quiero que seas mío?–

Wade vio lo que parecían los ojos de Peter, y vio que la máscara que llevaba se había subido un poco gracias al esfuerzo que Peter hizo al apartarse de el.

Y después solo se río.

–Mira.– Peter posó su mano en su nuca.– No sé quién eres, pero no estás bien, y el alcohol no es la solución, Deadpool.–

Wade sintió escalofríos por su cuerpo al escuchar su nombre desde los labios de aquel superhéroe, y se dedicó a observar su cara por unos instantes, apreciaba cada pequeño milímetro del rostro un poco descubierto del menor, mientras que Peter le daba un sermón que a Wade no le parecía interesante escuchar.
El se había enamorado de aquellos labios, eran gruesos, y lindos, como para besarlos.

Peter fue la primera persona que se opuso a besarlo.

Peter fue la segunda persona a la que quiso besar.