Capítulo 2

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Victoria.

─¿Ya nos vamos? ─les pregunto colgando la mochila en mi espalda y soltando un suspiro casi imperceptible, ellos se miran a los ojos y posan su mirada sobre mi. 

─Si, está bien, nos vamos ─murmura mi mejor amiga sonriéndome, Max va al baño y toca para llamar a Jeremy, su mejor amigo.

─Eh, ya sal, nos vamos.

─¡Voy! ─grita el chico desde adentro. Sale con el cepillo de dientes en la mano y lo guarda en su mochila antes de sacar algo y acercarse a mi─Max le dio uno a Valerie, pero ya que pareces muy indefensa y no creo que tengas con que defenderte, ten, es mío, pero puedes quedártelo ─me dice con una pequeña sonrisa sin mostrar los dientes, tomo el cuchillo y lo ruedo en mis dedos unos segundos antes de levantar la mirada.

 ─Gracias. Pero no soy indefensa, no lo digas, al menos no hasta verme en acción ─el ríe y los cuatro salimos de mi casa hacia el patio, abrimos las rejas y salimos formados con cuidado de que ningún muerto nos sorprenda.

─Estén alertas y atentos, pero no deshagan la formación ─susurra Max mirando hacia atrás, todos asentimos y caminamos hacia un auto de color blanco algo grande, al llegar intenta abrirlo pero una alarma bastante ruidosa empieza a hacer eco en la soledad de la calle, abro los ojos como platos y me meto dentro para sacar los cables y cortar el que maneja la seguridad del lado de las alarmas.

Todos metemos las maletas en la cajuela y nos apresuramos a subir al ver un pequeño grupo de cuatro o cinco muertos caminar hacia nosotros, me cambio al asiento de atrás junto a Jeremy y Val de copiloto junto a Max.

Miro desde la ventana trasera como se van haciendo mas pequeños de a poco y bajo la mirada sintiendo un peso gigante sobre mis hombros.

No puedo perderlos, no quiero perder una vez mas a mi familia. No quiero verlos convertidos en esas cosas horripilantes.

─¿Estás bien? ─pregunta mi mejor amiga viéndome desde el espejo, la miro y asiento.

─Solo... Espero que estén bien.

─Verás que si ─dice Max quitando los ojos de la carretera para mirarme por unos segundos.

─¿Puedes jurarlo? ─el coche queda en un silencio incómodo y suspiro recargándome en la ventana─¿ahora me entiendes? ─cierro los ojos e intento ser positiva, siempre lo soy, todo el tiempo trato de ver lo bueno de las malas situaciones, pero es el mal presentimiento, la forma en que mi estómago se estruja en mi pecho me da mala espina.

─Uh, Victoria llegamos ─dice Valerie colocando su mano sobre mi hombro. Abro los ojos y la miro asintiendo, aprieto el mango del cuchillo con fuerza mientras revisamos el lugar, afuera no hay nada... Hablé demasiado rápido, una de esas cosas aparece en la esquina y Jeremy es el primero en reaccionar pasando el cuchillo por una de sus cuencas oculares, el cuerpo cae inerte contra el pavimento y reprimo las ganas de vomitar al ver su rostro, era uno de los chicos con los que bailé las noches anteriores, era agradable y no merecía esto.

─Vayamos por ese lado, donde estaba este podrían haber mas y no queremos cruzarnos con mas de cinco cuando no sabemos ni siquiera que es lo que saben respecto a la defensa ─ordena Max señalando otro pasillo, entramos y nos para en una parte que desconozco─¿Tienen una idea de a dónde podrían haber ido? 

Lo pienso y abro los ojos como platos cuando recuerdo la sala que me mostró mamá días anteriores, dónde iban a guardar los fuegos artificiales.

─Yo sé, bueno, no estoy segura, hay una casilla, es pequeña, pero de seguro están allí. Mi madre me la mostró la primer noche, estaban guardando y acomodando fuegos artificiales para ayer en la noche festejar el ultimo día del festival de la primavera.

El último suspiro || TWD #AwardsCountingStars #PremiosMoonWhere stories live. Discover now