Como todos los días Alison se levanta a las 8.00 de la mañana, se levanta lentamente de la cama y va hacia la ducha, es el único momento de paz que tiene en todo el día. Apenas sale de la ducha atraviesa rápidamente el pasillo sin cruzarse con nadie y llega de nuevo a su habitación. Se sienta en una silla frente al espejo y suspira pensando en que demonios hacer otro día con su pelo, menos mal que hoy es viernes y no tiene que estar pensando mas peinados. Opta por hacerse un moño despeinado, a continuación se levanta y se dirige al armario y escoge ponerse una sudadera gris, unos jeans ajustados y sus vans rosas.
"Oh maldita sea son las 8.45 no voy ha llegar a tiempo a la clase de Literatura" maldice.
Coge su bolsa con los libros y se pone sus pulseras antes de salir.
Corre desesperadamente por todo el campus, ni siquiera se para en la cafetería para beberse su frapuccino como todas las mañanas.
Entra en clase y se sienta como de costumbre en la ultima fila.
"Todavía no ha llegado nadie, que bien." suelta
"De eso no estés tan segura" dice una voz femenina entrando en la sala.
"Genial" murmura Alison.
"Yo también me alegro de verte estúpida" dice la chica pelirroja tirándole todos los libros al suelo.
"¿Se puede saber que haces?" grita
"¿Acaso eres ciega y no ves?" dice la odiosa pelirroja y se sienta en una silla
Alison recoge sus libros del suelo y suelta un suspiro porque gracias a dios nadie ha visto lo ocurrido.
Suena el timbre y empiezan a llegar los estudiantes, todos se sientan alrededor de Camila, la pelirroja odiosa que le hacia la vida imposible a todo el mundo, pero sobre todo a Alison.
"Por favor chicos ocupen sus asientos" agrega una voz masculina.
"¿Y la profesora?" pregunta un chico de pelo castaño con gafas
"Ella tiene un virus estomacal y no podrá venir hoy."
Todos los alumnos se vuelven locos, gritando y riendo porque la profesora no ha venido, sin embargo Alison maldice porque Literatura es su asignatura favorita.
La primera clase pasa rápido y Alison se dirige a su clase de Química.
Afortunadamente el día pasa muy rápido y Alison esta de vuelta en su habitación, sin saber que hacer un viernes más.
"Debería salir, divertirme como un adolescente normal en vez de quedarme un fin de semana aquí encerrada." dice mientras se le escapa una lágrima.
Alison se queda dormida hasta que se oye un golpe en la puerta.
"¿Si?" dice ella adormilada
"Hola...Alison..veras mañana hay una fiesta y me han dicho que te invite." dice un moreno alto, creo que se llamaba Zayn.
"Hey! Gracias Zayn, pero ¿quien te lo pidió?." pregunta dubitativa
"Los chicos que organizan la fiesta." responde sonriendo.
"¿Y son?" vuelve a preguntar Alison.
"Marc y Paul del equipo de rugby." contesta.
"Ah bueno, esta bien. Gracias por la invitación." dice Alison a punto de cerrar la puerta.
"De nada." se despide el
Alison se quedo prensando un minuto contra la puerta en los pros y contras de ir a esa fiesta. Marc y Paul no eran precisamente sus mejores amigos y no entendía porque la invitaban.
"Vamos Ali será divertido." se convence a si misma
"Decidido iré." suelta
El resto de la tarde Alison busca en su armario algo decente que ponerse para la fiesta, no encuentra nada así que decide ir al centro comercial y buscar un vestido.