Una historia mas. . .

Epilogo

Jolaaa mis chicos y chicas, se que ya dije que era el final, pero bueno no los quería dejar a medias así que, aquí les va el final 7w7r

8 años después...

Pensamiento de Nataly

Es loco como todo cambia de un momento a otro, es increíble ya que ahora mismo me estaba preparando para mi boda ya que Sara me pidió matrimonio en una pizzería. Si, raro el lugar en donde nos casaríamos era en un club privado que habíamos alquilado, muy elegante y sencillo a la vez , mi mama estaba como loca peinándome y maquillándome, Sara estaba en otro cuarto, estábamos hablando por el celular y ella estaba tan nerviosa como yo, no tenía ni idea de cómo le habían avisado a los chicos que me casaría con Sara. En la boda estaban Marcos, Ana, Ferb, Jessica, Jhosep, Gabriel, Jimmy, Rubio, por alguna extraña razón Chistina y Alvaro no habían aparecido, pensé que ellos vendrían todos juntos. Eso pensé. Eso pensamos todos. En la reunión solo estábamos mis amigos, unos pocos familiares de Sara y uno que otro familiar mío

Lisbeth: ¡Ya la novia viene! – mama dijo emocionada, todos llevaron su vista a la puerta donde yo estaba, el novio de mama, el brasileño, extendió su mano y caminamos lentamente hasta el lugar, en el lado izquierdo estaban mis familiares y en el lado derecho los familiares de Sara, estaba nerviosa y emocionada a la vez, mi mirada se encontró con la chica la cual iba a ser mi esposa, Sara. Se veía hermosa con ese traje azul, ella volteo para mirarme y casi se le caen los ojos, llego justo donde estaba ella y el brasileño me dejo a su lado.

Sara: Te ves hermosa- dice ella con un tono de emoción el cual yo no puedo evitar sonreír ante sus palabras- tan hermosa como cuando te conocí.-

Nataly: Tú también te ves hermosa Sara- todos se levantan y el sacerdote se acerca a nosotras.-

Sacerdote: Habéis venido aquí, para que Dios garantice con su sello vuestro amor, ante el pueblo de Dios aquí congregado y presidido por su ministro. Un día fuisteis consagrados en el Bautismo; hoy, con un nuevo sacramento, Cristo- voltee rápidamente y mire a Jessica y a Ferb, al escuchar esas palabras del sacerdote ellos hicieron como si fuesen a vomitar, lo cual hizo que me soltara una pequeña carcajada- va a bendecir vuestro amor, y os enriquecerá y os dará fuerza, para que os guardéis siempre mutua fidelidad y os podáis cumplir siempre con vuestra misión de casados. Por tanto, ante esta asamblea, os pregunto sobre vuestra intención- Sara no dejaba de mirarme y entre más lo hacía más nerviosa me ponía- Y..., ¿venís a contraer matrimonio sin ser coaccionados, libre y voluntariamente?

Sara: Sí venimos libremente.

Sacerdote: ¿Estáis decididos a amaros y respetaros mutuamente durante toda la vida?

Nataly: Sí estamos decididas.

Sacerdote: ¿Estáis dispuestos a recibir de Dios responsable y amorosamente los hijos, y a educarlos según la ley de Cristo y de su Iglesia? –el silencio que había en aquel lugar era sorprendente, Mire a Sara y ella estaba nerviosa, ya que sus labios temblaban.-

Nataly: Sí, estamos dispuestas.

Sacerdote: Ya que queréis contraer Santo Matrimonio, unid vuestras manos, y manifestad vuestro consentimiento ante Dios y su Iglesia- unimos nuestras manos.-

Sara: Yo, Sara Portillo te quiero a ti Nataly Morgado, como esposa y me entrego a ti, y prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida.

Nataly: Yo, Nataly Morgado, te quiero a ti Sara Portillo, como esposa y me entrego a ti, y prometo serte fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, todos los días de mi vida

Sara: ¿quieres ser mi esposa? – me quería dar un ataque de risa y no sé porque, Sara se notaba nerviosa, y yo igual, teníamos miedo de que yo o ella dijera algo que no era, todos me miraron, esperando mi respuesta.-

Nataly: Si, quiero. ¿Quieres ser mi esposa? –todos estaban atentos a cada una de las palabras que salían de nosotros.-

Sara: Si, quiero- el sacerdote nos miraba alegre y eso me tranquilizaba un poco ya que pensaba que yo me equivocaría y diría algo que no era- yo te recibo como esposa y prometo amarte fielmente durante toda mi vida.

Nataly: Yo te recibo como esposa y prometo amarte fielmente durante toda mi vida.

Sacerdote: Sara. ¿Quieres recibir a Nataly Morgado, como esposa, y prometes serle fiel en las alegrías y en las penas, en la salud y en la enfermedad, y, así, amarla y respetarla todos los días de tu vida?