Conté mis años y descubrí, que tengo menos tiempo para vivir de aquí en adelante, que el que viví hasta ahora...
Me siento como aquell niña que ganó un paquete de golosinas: las primeras las comió con agrado, pero, cuando percibió que quedaban pocas, comenzó a saborearlas profundamente.
Ya no tengo tiempo para soportar absurdas personas que, a pesar de su edad cronológica, no han crecido.
Ya no tengo tiempo para lidiar con mediocridades.
No quiero estar en reuniones donde desfilan egos inflados.
Me molestan los envidiosos, que tratan de desacreditar a los más capaces, para apropiarse de sus lugares, talentos y logros.
Las personas no discuten contenidos, apenas los títulos.
Mi tiempo es escaso como para discutir títulos.
Quiero la esencia, mi alma tiene prisa.
Quiero vivir al lado de gente humana, muy humana, tan humana que no parezcan de esta raza.
Que sepa reír, de sus errores.
Que no se envanezca, con sus triunfos.
Que no se considere electa, antes de hora.
Que no huya, de sus responsabilidades.
Que defienda, la dignidad humana.
Y que desee tan sólo andar del lado de la verdad y la honradez.
Lo esencial es lo que hace que la vida valga la pena.
Quiero rodearme de gente, que sepa tocar el corazón de las personas.
Gente a quien los golpes duros de la vida, le enseñó a crecer con toques suaves en el alma.
Gente que aunque los hayan criticado por "depresivos" o "problemas mentales" solo porque no hayan entendido que su esencia es así. Así son naturales y puros.
Si, tengo prisa por vivir con la intensidad, que solo la madurez puede dar.
Pretendo no desperdiciar parte alguna, de las golosinas que me quedan.
Estoy seguro que serán más exquisitas, que las que hasta ahora he comido.
Mi meta es llegar al final satisfecha y en paz con mis seres queridos y con mi conciencia.
Espero que la tuya sea la misma, porque de cualquier manera, también llegarás.
Cuando se piensa en los momentos durante el curso de una vida, aquellos que se consideran culminantes, donde pareciera que todos los esfuerzos, la energía enfocada en pos de un objetivo, confluyen para hacerse una realidad tangible; ¿En cuáles de ellos nos reflejamos? ¿ En cuáles sentimos la profunda certeza de haber logrado la meta total de nuestra vida?¿ en cuál nos colma la profunda satisfacción de haber llegado?
En un deportista de competición, es muy fácil para nosotros reconocer éstos instantes, en los cuales experimentan la gloriosa sensación de haberlo hecho todo muy bien,de haber invertido correctamente su tiempo, su esfuerzo físico y mental, de haber dejado de lado muchos momentos de placer,para entregarse de lleno a la preparación, el momento de atravesar la llegada,el momento de la premiación.
O tal vez en el mundo del cine ó la música, podemos ver la concreción de ésos momentos sublimes en los cuales, serán nombrados entre los mejores y muchos serán testigos de ése privilegio.
Pero, en aquellos en que los objetivos,son más difusos,menos glamorosos,menos exhibidos a la vista del mundo, ¿cuál serán "el momento en el tiempo, en el cual sentirán la eternidad"?
¿Será el nacimiento del primer hijo? o tal vez ,¿ dar el examen final de una carrera universitaria, lograda con mucho sacrificio?¿será tal vez el primer encuentro con su otro yo significante (pareja)?
¿Cuál es la esencia que nutre ése momento en el tiempo? ¿Cuáles son los valores humanos que cargamos con nosotros para comprender cuándo surgirá ése instante en el cual lloraremos de felicidad,como alcanzando la eternidad?
Puedo darte sólo un ejemplo, en el cual ninguno de los ejemplos anteriores, tuvo peso ni relevancia: una persona en su lecho de muerte, despidiéndose de sus hijos, sintiendo la tarea cumplida y la satisfacción de ver a todos a su alrededor, eligiendo su viaje final, siendo amado y valorado, por sus nuevas generaciones.
Quizá ése momento en el tiempo,sea más modesto, menos pretencioso, pero no menos valioso.
No hace muchos días, pude comprender a una persona en una dimensión muy diferente, más cercana, menos lejana a mí, y en ése instante, sentí que incontables momentos habían formado un proceso paulatino, que unidos mostraban un cuadro completo, al que nunca había percibido como tal. Una persona que no me ha juzgado y me ha prestado ayuda siempre que lo he necesitado. Una persona a la que solo yo soy capaz de entender que su lado oscuro es su propia esencia.
(Muchas gracias, de todo corazón).
Supongo entonces, que deberemos llegar a una comprensión profunda de nosotros mismos, a una visión introspectiva completa, para saberlo a ciencia cierta.
Entonces, tal vez descubramos que uno de los momentos culminantes será haber alcanzado la comprensión necesaria para determinar ésos instantes, cuando nuestra conciencia se expanda para captarnos a nosotros mismos en toda nuestra inmensidad eterna y en toda nuestra finitud temporal.
Solo entonces,podremos, como la letra de la canción,ser definitivamente libres.
