Batman/Spider-Man: Locura en Nueva York

Capítulo 3: La Araña contra El Murcielago

Peter estaba impactado pues aquella era la primera que vez veía a Batman en persona. Solo había escuchado rumores sobre él, cosas sin sentidos como que era inmortal; un demonio vengador en busca de criminales. Se decía que no se lo podia tocar, incluso que era un vampiro pero nunca creyó nada de eso. Solo una cosa era seguro: desde que lo vio el cosquilleo que le advertía del peligro se puso como loco. El vigilante cayó de pie frente al sorprendido adolescente que retrocedía unos pasos. El murciélago miro con frialdad al arácnido, luego al criminal desmallado en el suelo y volvió al rojiazul.

—Si lo que querias era matarlo casi lo logras —hablo de forma seca y directa.

—Yo solo quiero encontrar al Joker.

—El Joker es mi responsabilidad —exclamo Batman con autoridad—. Tú vuelve a tu casa y trabaja en controlar esa ira que tienes.

—¿Tú responsabilidad? ¿¡Tú responsabilidad!? ¡Ese monstruo esta en mi ciudad, si fuera tú maldita responsabilidad ya lo habrías atrapado!

—No tienes la menor de idea de como es él. No es como los patanes de la escuela o el ladron comun; es un psicópata impredecible que solo busca caos, muerte y desgracia.

—¡No me importa como sea! ¡No voy a parar hasta matarlo con mis manos!

—No te lo voy a permitir. Te estas dejando cegar por la ira.

La araña estalló en colera y se abalanzó sobre el murciélago para golpearle la cara pero este pudo esquivarlo con gran dificultad.

—Voy a matar al Joker sin importar quien se atraviese en mi camino.

Batman sabía que aquel adolescente estaba demasiado alterado y no entendería de razones en ese momento. Le lanzó un batarang cerca de la cara sabiendo que el chico lo esquivaria ya que lo vio cuando peleaba contra los payasos. Peter solo giró la cabeza siguiendo aquél aterfacto con la mirada pero cuando giro nuevamente para mirar al vigilante recibió un puñetazo en la cara que lo hizo retroceder unos pasos. Había creído que el cosquilleo era porque el batarang era una bomba pero en realidad era por el golpe que no pudo evitar.

—Si lo que quieres es pelear entonces te complacere, Peter —afirmó Batman.

El arácnido quedo sorprendido al ser llamado por su nombre pero no pudo preguntar como el murciélago lo sabía ya que otro puño iba en su dirección. Sin embargo esta vez usó su gran agilidad para dar un salto hacía adelante cayendo a las espaldas del encapotado para conectarle una patada en la espalda logrando sacarlo de equilibrio. Batman se repuso rápidamente y logró bloquear el izquierdazo que el rojiazul le lanzo aunque con algo de dolor en su antebrazo. Rápidamente respondió con un puñetazo pero este fue atrapado por la mano del adolescente que inmediatamente uso ambas piernas para darle una doble patada en el pecho de su enemigo haciéndo que se estrellara contra la pared. Al tenerlo acorralado le conectó dos golpes en el estomago y uno en la cara pero cuando iba a dar el segundo puñetazo fue bloquedo por el vigilante. Batman intentó golpearlo pero Spider-Man movió su la cabeza para esquivarlo y se alejó de un salto hacía atrás. Batman lanzó una bomba de humo al suelo y activó la visión infrarroja de la capucha. El adolescente giraba para todos lados sin poder ver nada y cuando le dio la espalda a Bruce este intento atraparlo pero Peter pego un salto al sentir el peligro y se adhirió a una pared.

—Tal vez creas que tu habilidad de sentir el peligro sea una gran ventaja pero no es así.

El vigilante había intuido que el jóven tenía aquella habilidad al ver como se anticipaba a los movimientos de sus diferentes contrincantes.

—¿Como sabes de eso? —pregunto muy sorprendido el arácnido.

—Se mucho de ti, Peter.

El chico se lanzó sobre el vigilante pero este logró esquivarlo. Batman sabia que el sentido de peligro de la araña le complicaría la pelea pero ya tenía un plan. Lanzó un puño giratorio haciendo que el sentido de Peter se activará y este agachara la cabeza pero fue recibido con un rodillazo en la mandíbula. El rojiazul retrocedió un poco tras eso.

—Se que perdiste a tus padres en un accidente.

El adolescente avanzó y lanzó un golpe que Bruce detuvo con gran dificultad usando el antebrazo mientras intentaba darle un puñetazo en el estomago que fue detenido cuando el joven lo atrapó.

—Se que buscas venganza por lo que Joker le hizo a tu tio.

Un cabezazo del arácnido impactó en la boca del vigilante que lo escupió sangre para luego recibir un potente derechazo en la mandíbula que lo derribó.

Bruce se levantó muy atontado por la súper fuerza de su enemigo y se puso en posición defensiva mientras el humo ya casí desaparecía por completo.

—Se como te sientes —afirmó Batman.

—¡No sabes nada! —le increpó el arácnido—. ¡Tu no perdiste nada! Jamás podre olvidar como aquel monstruo lo asesino a sangre fría —dijo mientras luchaba por contener las lágrimas.

—Se como es estar cerca y no poder hacer nada. Sentir el miedo y la desesperación. ver como un malnacido con un arma te arrebata lo que mas amas en el mundo. Se como son las pesadilla cada noche y toda esa ira acumulándose.

El adolescente cayó de rodillas al suelo y escondió su rostro entre sus manos dejando que las lágrimas llenarán sus ojos

—¿Algún día desaparecerá? —pregunto entre sollozos.

—La mía nunca desapareció. Seguramente piensas que si lo matas todo será mejor pero no es así. Buscaras a otro mal nacido, y otro, y otro, y otro hasta que un día despiertes y descubras que tu vida se volvió una venganza sin sentido como la mía lo era.

—¿Era?

—Tengo alguien, un compañero, que ilumina mi oscuridad —decía mientras miraba a Robin que habia llegado casi a comienzos de la conversació—. Dejame ayudarte, Peter.

El hombre le tendió la mano al adolescente.

—No te prometo no matarlo.

—Se que harás lo correcto

El arácnido le agarró la mano al vigilante y este le ayudó a levantarse.

—Hey, muchachos —dijo Robin mientras se acercaba—. El payaso que intentó huir tenia información: Ya se donde esta Joker.