OGGETTO (Finalizada)

CAPITULO 39

POV OGGETTO 007 ANNABEL ANTHON

La noche se volvió larga desde que me encerraron en mi habitación dejandome con una   nota que me destrozo por dentro.

Desee con todas mis fuerzas que solo fuera una mala broma de Zeth pero como saber que me esta mintiendo si jamás habia recibido una carta de el, apretaba con mas fuerza el papel mientras cerraba los ojos.

-Buenos dias Annabel-

-Buenos dias-

-Tú madre aun no se despierta- Sentía miedo pero de pronto el nuevo novio de mi madre se encimo en mi pegando mi cara a la mesa y de pronto senti su miembro duro en mis gluteos.

-¡Suéltame!-

-Shh Ann ella no se puede enterar- 

-¡Que me sueltes!-

-SHH ANN, NO ENTIENDES QUE TU TIENES LA CULPA POR INCITARME, ADEMÁS QUE TU ERES MUCHO MÁS JOVEN Y TODO LO TIENES EN SU LUGAR-

-¡QUE ME SUELTES!- Mis manos se pegaron en las de el y de pronto humo comenzó a salir el hombre se separo de mi y corrió a echarse agua en las manos mientras que vi un pequeño fuego disiparse sobre mis palmas-

-¡Hija de puta! que mierda eres, deberías ¡ser quemada como una perra bruja!-

-Yo no... lo siento no, no fue mi intensión-

-¿Qué pasa aquí?-

-Pasa que tienes una puta bruja en tu propia casa- la vista de mi mama me observo viéndome de pies a cabeza incrédula, no sabia que hacer, asi que abri la puerta de la cocina y corri con fuerza hasta el bosque.

Al abrir mis ojos el papel se volvía cenizas y el humo negro aparecía.

Lo solté con miedo, no miedo a quemarme si no miedo a saber quien soy cuando el dolor se apodera de mi no podía ese ser mi poder como Oggetto un poder que puede ocasionar miles de peligros, pero esto parecía lo mas normal que habría en mi vida además de la sensación desagradable que tenia en mi boca era casi amargo y es que me enamore de ti Zeth sabiendo que esto no estaba bien y ahora solo por una carta pide disculpa no creo que esta sea tuya no eres tu así.

Pegue mi palma en el frió concreto y solo quedo la mancha de un papel quemado, mientras miraba el cielo gris, amenazante de una gran tormenta y mis mejillas empezaron a humedecer.

La puerta de mi habitación sonó y seque lo mas rápido las lagrimas de mis ojos.

La puerta se abrió y ahí estaba la misma mujer que había visto hace rato.

-Buenas, niña me permites pasar-

-Si claro adelante- La mujer se voltio y miro de reojo a Koen y después se giro tan rápido como si tuviera el cabello suelto y le hubiera dado un coletazo.

-Gracias, tú como sea que te llames me quedare aquí-

-No deberia estar usted aqui mucho tiempo-

-Si tienes un problema en que haga las medidas dicelo a Moise entendido?-

-Si madame disculpe- La puerta se cerro, dejándonos a solas, una completa extraña y yo.

-Perdona que venga hasta ahora es que bueno Moise puede consumir todo mi tiempo pero no podía ir a dormir hasta conocerte y si el tenia toda la razón eres muy guapa Annabel-

-¿hablaron de mi?-

-De echo por ti es que yo estoy aquí pero no te preocupes seras la más hermosa todos te envidiaran, Moise pagara a muchas televisoras  para que filmen la ceremonia-

-¿ceremonia?-

-Por su puesto la boda sera increíble obvio que yo te regalare el vestido, Moise es un buen amigo de hace años me alegra que encontrara alguien con quien compartiera su vida después de lo sucedido con su esposa pero cuando me dijo que tu eras joven, nunca me imagine que realmente fueras tan joven-

-Yo no pienso casarme-

-Oh querida entiendo los nervios de novias son los peores y ademas creo que eres más joven que la hija de Moise- 

-No son nervios realmente no pienso casarme-

-Así que realmente eres tan testaruda como tu padre- no sabia a lo que se refería seguramente había escuchado mal pero decidí preguntar.

-Mi padre?- 

-Perdona que tiene tu padre-

-Escuche que mencionaste algo de el, lo conoces-

-Claro que no querida, es la primera vez que te veo, yo eh vivido la mayoría de mi vida en Francia así que dudo mucho conocerlo- 

-Lo siento-

-Bueno a lo que vine antes que ese gorila venga por mi- 

Ella saco una cinta de su bolsa del suéter y me realizo medidas del cuerpo para ser mas específicos midió mi cuello, busto, cintura, glúteos y el largo de mis piernas.

-Sera el más hermoso te lo prometo-

-Gracias...-

La puerta se abrió y Koen estaba de pie mientras la mujer salia del cuarto y se escuchaba la cerradura dar vuelta.

Mañana hablara con Zeth para que me explique si el me dejo la carta y si es fue que me de una buena razón por la cual solo jugo conmigo, yo en ningún momento debí fijarme en el.

Lo se fue un capitulo muy corto para lo que me eh tardado en actualizar pero si ven eh pensado en eliminar la historia ustedes que opinan?

Un beso Cris Petrearce