Vuelvo a ti.

Dejarse llevar suena demasiado bien.

Bisbal:

Ya de camino hacia mi hotel, no podía dejar de pensar en lo que había ocurrido entre aquellas cuatro paredes. Había sentido algo tan intenso que era incapaz de expresarlo con palabras, yo quería a Rosanna, y estaba seguro de esto. Me había hecho por fin encontrar el equilibro que necesitaba mi vida, y estaba consiguiendo que de una vez por todas asentara la cabeza. Me convencí de que lo que había pasado con Laura, tan solo era un ataque de nostalgia y un cumulo de emociones tan incontrolables que se escapaban de mi alcance. Ahora cada uno seguiríamos con nuestra vida, como habíamos hecho todos estos años atrás. La promoción del disco, y todos los compromisos que esto acarreaba me mantendrían ocupado en los próximos meses, y esto solo se quedaría en una anécdota. Todo esto del reencuentro me había hecho volver a un pasado, que yo pensé que tenia muy superado. 

-Hola amor- dije al entrar en mi habitación. 

-David, ¿me puedes explicar donde diablos te metiste durante dos horas?- Me contesto Rosanna visiblemente enfadada. 

-Necesitaba ir a dar una vuelta, aclarar mis ideas, escapar un rato de aquí, me sentía preso en este lugar, y quise salir a respirar un poco de aire fresco. Eso ha sido todo, Rosanna, entiende que vivo en un continuo estres, y a veces necesito desconectar un poco de la realidad.

-¿No habrás ido a ver a Chenoa, no?- Me miro de forma inquisitoria. 

-Claro que no, no seas tonta. Antes no se que me paso, esto del puto reencuentro me esta volviendo majara. No seria tan tonto de ir a ver a mi ex, exponiéndome a miradas curiosas, y mucho mas tal y como esta el asunto después del concierto. Estamos en el punto de mira. Y ya sabes que soy mas de entrar en el numero uno en las listas de ventas que de protagonizar portadas de revistas del corazón. Laura es toro pasado, no te mentiré si te digo que estoy preocupado porque toda la presión va a recaer sobre ella, pero yo ahora tengo otra vida, y tu eres la protagonista de ella.-Mentí piadosamente.

-No me vuelvas a hacer esto nunca, prometemelo... Me hablaste muy feo, nunca lo habías hecho y me dejaste hecha polvo...

-Te prometo que nunca mas volverá a ocurrir, no soy ese tipo de hombre, pero estaba realmente muy nervioso, entiéndeme. 

Rosanna se acerco a mi y me abrazo. Cerré los ojos para intentar sentir una sensación similar a la que había experimentado no hacia mucho rato con Laura, pero no fue así. Todo esto era muy artificial, muy mecánico, muy frío... Así que mi mente volvió hasta aquel momento, recordando su olor, su suave aliento contra mi cara, su mirada profunda en conexión con la mía, sus dedos entrelazándose con mi pelo...

-Ay David, ¡me estas haciendo daño! No me aprietes tan fuerte, me vas a hacer papilla.- Rio Rosanna, mientras cortaba la magia de aquel recuerdo. 

-Amor, ¿donde esta mi móvil? Me lo deje olvidado antes, y no se donde lo pude dejar.

-Emm... si... ahí... encima de la mesa...-Me señalo en dirección a la mesita de noche. 

Me acerque hasta allí, y lo primero que vi al desbloquearlo fue un whatsapp de Ito que decía lo siguiente:

"Tio, David, creo que no era el mejor momento para subir esa foto a tus redes, ni reivindicar y gritar a los cuatro vientos tu amor por Rosanna, pienso que esta fuera de lugar". 

Mi cara cambio por completo, no entendía nada de lo que Ito me estaba diciendo, ¿cuando había subido yo una foto con Rosanna? Se habrá confundido y seguro que sera alguna cuenta de apoyo a David Bisbal, o algún usuario fake. Fue lo primero que me vino a la mente, aun así me metí a mi Twitter e Instagram, para asegurarme.  

-Ross, mira, creo que alguien me ha hackeado y entrado a mi cuenta de Instagram. Un día muy poco apropiado para hacerlo, y por supuesto, no es simple casualidad. 

-Esto... David... Tengo que confesarte una cosa... Antes de que digas nada... Solo lo he hecho para protegerte, para protegernos a los dos... la prensa esta siendo cruel... no sabes todo lo que están diciendo sobre ti... y me puse celosa...-Dijo Rosanna rompiendo a llorar.

-¿Que me estas queriendo decir? ¿que esta puta broma de mal gusto ha sido cosa tuya?

Cubrí mis ojos con mis manos, y empece a maldecir a todos mis ancestros. Estaba tan enfadado que la adrenalina estaba haciendo subir la temperatura de mi cuerpo, respiraba con dificultad y sentía el corazón bombeando con fuerza desde la primera a la ultima terminación nerviosa de mi cuerpo. Por un momento, pensaba que me estaba dando un infarto. Inhale aire con fuerza, me recompuse, y por fin logre balbucear algunas palabras. 

-Rosanna, necesito que hagas las maletas y te vayas, nos veremos en unos días, desearía estar unos días rodeado por mi familia y reflexionar sobre todo esto. Ni siquiera a Ella se le ocurría hacer esto... ¿quien coño te crees? Si hace dos horas era el cabrón que le había hecho la cobra a mi ex delante de casi cinco millones de personas, ahora soy el cabrón que le ha hecho la cobra a mi ex delante de casi cinco millones de personas y encima sube una foto a sus redes sociales proclamando el amor que siento por mi novia. No, no, no, no... esto no me puede estar pasando a mi... Me niego... ¿Que he hecho mal?- Estaba tan confuso, que ni mis frases carecían de coherencia o conexión entre si. 

-David, por favor, por favor, perdóname...

-Rosanna por favor, vete...