"ANaToMía POéTicA"

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...y su pecho fue el verso más dulce aquella noche,

y la noche duró eternamente cual insomnio de suicida,

noche que no era noche, tan solo oscuridad,

más profunda que sus ojos vacíos al llorar,

Vacíos, como su corazón,

que no latía, agonizaba,

como D.Quijote en su cama, al final.

Al final no era noche,
ni vacío, ni corazón,
tan solo era una chica rota con deseos de cartón.

Cartón donde descansa el mendigo,
de dónde toma su vino,
y se refugia del frío, y del calor.

Que vino de dónde venían sus únicos recuerdos,
esos donde veía a su hija con un vestido rosa,
demasiado tierno como para que ahora siguiese siendo cierto.

Hoy ya es una señorita, de la noche,
solo queda ese recuerdo,
la vio subirse a un coche,
a ganarse el pan y el sueldo.

Anatomía Poética ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora