Capitulo 1.

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Ese no fue el mejor día que tuve. Estaba cayendo lluvía fina fuera y ese lugubre tiempo hacía la institución más terrorifica de lo que ya era. Me dolía la espalda de hacer tantas camas, y quien sabe lo que habían echo alli antes, olian fatal. Mis pies estaban doloridos de caminar alrededor de comida barata en cada habitación. El unico sonido que se oia era el de mis pies caminar a través del frio suelo de cemento. Los pacientes deberían estar en almuerzo o haciendo alguna actividad especial en otra habitación. Justo cuando acabe de recoger la comida de la ultima habitación, mi compañera  Kelsey se acercó a mi. Ella era unos años mayor que yo y conocía este sitio como la palma de su mano. Para mi, era solo mi tercer mes de trabajo, en el Hospital Mental Wickendale para criminales dementes. Trabajé principalmente como de ayuda para las enfermeras pero con fuertes medidas de seguridad y estando atenta vigilando este sitio, no había muchos heridos así que de todas maneras trabaje por si alguien me necesitaba. Era como la chica a la que todos acudían si necesitaban ayuda.

''Hola, ¿que estás haciendo aqui?'' preguntó Kelsey.

''Umm. . . ¿mi trabajo?''

''Todo el mundo está fuera. ¡Deberías estarlo tu tambien!''

''¿Porque?¿Que pasa?'' Pregunté.

''¿No te has enterado? El nuevo chico está llegando.'' respondió nerviosa.

''¿Y? No veo eso un gran problema. No paran de llegar pacientes cada día, ¿que hay de diferente hoy?''

''Bueno, ¿Has escuchado las noticias sobre el hombre que despellejo a tres mujeres?'' Su tono era nervioso debido a la noticia.

''Eh si .. mejor no me cuentes nada más.''

''Pues si, el está viniendo hacía aqui. ¡Y nos lo vamos a perder si no te das prisa!''

Kelsey agarró mi mano y me arrastró hacia la entrada. Estaba sorprendida y un poco nerviosa, no sabía porque. Quiero decir, ¿Sabes que clase de gente puedes encontrar en una institucion para criminales dementes? De todas maneras moderme las uñas no me servía, era un habito de nerviosismo que tenía desde pequeña.

Dimos un paso hacia la lluvia y esperamos por un minuto. Mire a mi alrededor para ver que kelsey tenía razón, casi todo el personal estaba esperando fuera por la emoción. Había oficiales de policia dentro, para mantener las cosas bajo control. 

Pero a parte de eso, todo el mundo estaba alrededor para ver al famoso criminal. También había gente a lo largo de la calle protestando para que le quitaran la vida al chico en su prisión/ centro mental o como lo quieras llamar. La mayoría de la gente lo quería ver muerto. Estaba apunto de dirigirme hacia dentro en vez de esperar bajo la lluvia cuando un policia oscuro salió de una furgoneta en la parte delantera del edificio. Dos guardias de seguridad saltaron primero y abrieron la puerta trasera. Ahora la expectación me atrapaba. ¿Qué aspecto tendría? ¿Cuantos años tendría? ¿Sería atractivo o repulsivo? Lo supe rápido. Los guardias llegaron a la furgoneta y cada uno agarró al chico por un brazo. Cuando él bajó del vehículo, pusó su cabeza hacia abajo, así que no pude verle la cara. Sus manos y pies estaban atados con esposas que tracateaban a medida que caminaba. Iba vestido con uno de los trajes azulosos que tenían que vestir los pacientes aquí. Aunque llevara eso puesto, podía deducir que era un hombre alto y delgado. Antes de que subiera los escalones de piedra, me miró y le pude ver con mejor detalle. Decir que era atractivo podía ser una atenuación. Estaba sorprendida por la innegable belleza del villano que ahora se encontraba detrás de mí. Podría deducir que tenía unos 20 años. Tenía unas grandes, largas y oscuras pestñas que emmarcaban sus grandes ojos verdes. Sus gruesos labios estaban ligeramente abiertos a medida que ascendía por. Las escaleras. Tenía un oscuro y despeinado pelo que movió y rizó poniendolo detrás de sus orejas. También tenía una fuerte y prominente mandíbulacerrada y unas cejas que surcaban en medio de la ira a medida que iba escuchando los comentarios de la gente que exclamaban que él debía morir. No sé que estaba esperando. Para arremeter contra él, gritar algo, nada. Esto es lo que la mayoría de gente hace cuando llegan, volverse locos, intentar escapar corriendo o chillar cosas estúpidas. Seguramente alguien tan malvado como él debería haber echo algo terrible. Quiero decir, despellejar a tres mujeres. ¿Que clase de humano hace eso? Pero no, él solo caminó derecho a través del pasillo sin decir una palabra. Di un golpecito a Kelsey.

"¿Entonces esto es todo?"

"Eso creo" suspiró.

"Fue muy malo, esperaba algo más emocionante". Me reí de su constante humor, ella nunca había fallado en hacerme reír. Sabía que ella estaba pensando lo mismo que yo. El chico que acababa de entrar era probablemente el más atractivo y magnífico hombre que habíamos visto nunca. Pero nadie quería admitir que estaba enamorado de un loco.

"Muy bien, volved todos a trabajar" la guardiana Mrs.Hellman, enseñada a chillar a todo aquel que se encontrara en el edificio. Tenía unos 50 años, con cabello rubio y ojos azules. Ella no me gustaba del todo, pero necesitaba este trabajo. Estaba sorprendida porque nunca había obtenido esta paga con tan solo 20 años. Tengo un grado per necesito seguir trabajando a mi manera y llegar a una posición mas alta. De todas maneras, volví otra vez al edificio y miré la hora. Mierda, era la hora del almuerzo. Y no me refiero a mi almuerzo. Tengo que sentarme y supervisar (con 2 policias más) que los pacientes coman su comida o que jueguen a las cartas o cualquier otra cosa que quieran hacer durante sus 2 horas libres. Me quedé en un lugar habitual en la parte trasera de la habitación ya que desde ah podria ver perfectamente a todos los pacientes. En la media parte de la primera hora, las puertas se abrieron y todo el mundo se giró a ver que ocurría.

Entró el chico nuevo con dos guardias al lado supervisandole en todo momento, pero ellos se veían muy inseguros ya que el chico era bastante mas alto que ellos dos. Él seguía con las esposas en sus manos y pies. Sus rasgos estaban endurecidos y sus cejas seguían apretadas con enfurecimiento. Todos le miraban estupefactos como si acabara de matar a alguien en frente de sus ojos. Pero él no les prestó atención, solo andó hacia una de las mesas vacías y tomó un asiento. No tenía comida, nada que hacer, solo se sentó y se quedó mirando a la pared. Mi primer pensamiento fué que tal vez era más demente que delincuente, pero despues pensé mejor de esto. Creo que si yo fuera admitida en un sitio como este con gente deseandome la muerte, solo necesitaría sentarme y limpiar mi cabeza. Pretendía ver a los otros pacientes, pero en realidad no les estaba prestando demasiada atención. Sólo estaba centrada en el chico de los rizos. No sabía porque. Debería estar asustada de él, y lo estaba, pero al mismo tiempo era muy intrigante. No sabía porque lo estaba pero me sentí atraída por él. Tal vez era sólo porque estaba asustada de él y no paraba de pensar en sus crímenes. Tal vez era solo curiosidad. Talvez...

Mrs. Hellmans llegó de forma abrupta y chilló que las 2 horas habian terminado y que los pacientes debían volver a sus habitaciones o celas, como les quieras llamar. La altura del chico nuevo iba ascendiendo a medida que él se levantaba. Obedeció a los guardias y ellos lo llevaron al sitio donde debería estar. Cuando la habitación quedó vacía, desafortunadamente, Mrs.Hellmans se acercó a mí. Sentí miedo. Ella era muy intimidante y nunca tenía nada bueno que decir. Si hablaba contigo en privado, solía ser para chillarte.

"Rose, ¿puedo hablar contigo un minuto?" me preguntó. Asentí con la cabeza y ella se acercó. No parecía contenta. De todas maneras, nunca parecía contenta.

"Lo has estado haciendo muy bien durante tus 2 primeros meses aquí. Me

sorprende que no te hayas ido. He estado pensando sobre darte más

responsabilidades aquí" dijo ella.

"Oh, muchas gracias"

"Tu pareces la mas simpática con los pacientes aquí. Creo que deberías seguir siendo enfermera y además, intentar ayudar a los pacientes un poco mas. Sólo si estas de acuerdo."

"Claro, me encantaría" respondí. Era verdad, estaba mas comfortable con un trabajo psicótico de lo que debería estarlo. Creía que era interesante estar alrededor de ellos y saber que pensaban, como pensaban. Una pequeña parte de mí siempre se preguntaba si de verdad ellos eran dementes. Esperaba que Mrs.Hellmans se fuera, pero ella seguía en frente de mí, así que aproveche para preguntarle algo que me había estado invadiendo la mente las últimas 2 horas.

"Ummm, el chico nuevo..." empecé a preguntar.

"Oh si, él es un sujeto muy interesante" respondió, como si fuera el sujeto de algún experimento de la ciéncia.

"Bueno, yo me tendría que marchar ya." Mr.Hellmans se fue andando sin dejarme terminar la pregunta.

"¿Cuál es su nombre?" pregunté detrás de ella.

Se giró y me miró fijamente, sus ojos azules mirando los mios.

"Su nombre es Harry, Harry Styles."

Psychotic. Harry Styles Fan Fiction. (Español).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora