Conociendo a Rocky

Cap.- 56. Sensaciones.

Es ver cómo me mira y que se pare de repente el mundo. No puedo dejar de mirarle a los ojos y él a mi vestido. Cuando sube la mirada hacia mi cara yo agacho la cabeza y pongo mis manos sobre mi vientre como avergonzada de que me vea así, y en esta situación. No puedo controlar lo que siento, y realmente la rabia, la incertidumbre, el verle aquí me obligan a llorar. Se me escapa una lágrima y me la quito con la mano rápidamente. Espero que no lo haya visto pero me temo que no he tenido tanta suerte.

Noto como su mano me roza la cara y me susurra.

-No pasa nada. Ya lo sabemos los dos.-me dice y hace que me siente en la cama. Él también lo hace y hay una notoria distancia entre nosotros. Creo que está incómod, o nervioso, no lo sé.

-Lucas...¿por qué has venido?-le pregunto evitando mirarle.

-Porque me estaba rayando, y no estaba haciendo nada en la fiesta, sinceramente.-me confiesa.

Vamos, que ha venido por puro aburrimiento, no por mí.

-Ah...-me sienta mal y creo que lo nota. Se acerca algo más a mí.

-A ver...No entiendo porqué me mentiste, y porqué has llegado tan lejos. Me ha molestado que hayas hecho esto, sobre todo porque...bueno después de la pasada fiesta...Rocky nos liamos. No sé qué piensas sobre mí, no sé porqué has hecho esto o con qué fin, pero eso en una chica no me gusta, no me gusta nada que me mientan y menos para intentar tener contacto conmigo. Me gustan las tías que van de frente. Y yo soy un chico muy directo, y si hubiese sido otra te hubiera bloqueado y otra vendría, pero tal vez me faltaba algo si no hablaba contigo.- me dice y las lágrimas vuelven a desbordarse por mis mejillas. Agacho la cabeza, y él hace una pausa. Al ver que no contesto, sigue.- Sé que te dije que no pasaría nada malo entre los dos, que no perdería el contacto contigo, pero sí que es cierto que me ha jodido muchísimo esto...y quiero pensar en si realmente quiero seguir teniendo contacto contigo.-me dice y me descoloca totalmente. 

Ahora sí que me hundo, me hundo literalmente. No sé para qué tanta tontería de vestiditos y mierdas cuando viene aquí y me dice en mi cara que tal vez no quiera saber nada de mí, ¿a qué juegas joder?

-Vienes a mi casa, y me haces hacer todo el rollo de cambiarme de ropa para luego al final decirme que tal vez no quieras saber nada de mí...¿Cómo debería tomarme esto Lucas?-le digo medio gritando y llorando.-¿De qué cojones vas tío?-le recrimino y él se pone tenso.

-He venido porque necesito explicaciones y estoy muy rayado contigo joder, no es tan difícil de enteder. Joder Rocky...es que...

-¿Es que qué Lucas? Mira si has venido aquí a reírte de mí por haberte hecho esta putada ahí tienes la jodida puerta. ¡Venga! Cuéntales todo a todos tus amigos, y a tus amiguitas, y a quien te dé la gana si quieres, estás tardando. Cuéntales que soy una mentirosa y una patética por haberme enamorado de un chico y haberme hecho pasar por otra chica por mi puta inseguridad. Cuéntales como una simple chica, otra de tantas va detrás tuya y como lloriqueo por no poder controlar esto, cuéntales todo Lucas ¡VENGA JODER!- le grito y no sé porqué pero no puedo dejar que las palabras salgan de mi boca, no puedo controlarlo y me levanto de la cama enfadada, agitando los brazos. Lo único que ahora mismo quiero es que se vaya de mi casa.

-Es que ahora mismo  te odio por haberme vacilado y a veces las ganas contigo me pueden.-me suelta y no sé a qué se refiere.

-¿Qué?-le pregunto

-Que dejémonos de tonterías.- me dice y se levanta de la cama.

Decidido, da un paso hacia mí, acortando demasiado nuestra distancia y me acorrala contra la pared. Me acaricia la cara y noto toda su respiración en mi cara, sus pequeños jadeos y su mano tocar mi espalda. Estoy totalmente ida, soy totalmente suya pero dentro, en el fondo, me siento fatal. Ha dicho que me odia por esto, y no creo que fácilmente lo olvide.

Se abre la puerta y la cara de mi hermano aparece por sorpresa. Mierda.

Rápidamente separo a Lucas de mí, que se queda apoyando su frente contra la pared y yo me dirijo a mi hermano.

-¿Qué pasa?- le digo acariciándole la cabecita. Está asustado. Mierda, seguro que nos ha escuchado discutir.

-¿Qué te pasa?-me pregunta en voz baja sin dejar de mirar a Lucas.

-Nada pequeño, venga, vamos a dormir, que sino mañana no va haber quien te levante de la cama.

-Estás llorando.- me dice y no sé qué hacer.

-Pero de la risa. Lucas ya se iba a casa, ¿verdad Lucas?-me dirijo a él sin mirarle y si él contesta que sí.

Me llevo a mi hermano hacia su habitación y le vuelvo a acostar, pero esta vez es él quien me abraza y me da un beso de buenas noches. Sé perfectamente que va a tardar en dormirse.

Salgo de la habitación entornando su puerta y ahí está Lucas, apoyado en el marco de mi puerta, esperándome.

-Tal vez no haya sido buena idea venir aquí...-me dice Lucas y yo ya no sé cómo afrontar la situación.

-Lo sé.-digo.

Baja las escaleras y yo voy detrás suya. Abre la puerta, sin darse la vuelta, pero en cuanto sale y voy a cerrar la puerta, me quedo mirando cómo se aleja, y es en ese momento cuando se da la vuelta, andando, y se marcha, sin decir ni siquiera adiós.

"Esto está acabado", me digo para mis adentros y mis llantos no dejan de florecer desde mis adentros.

Me voy al baño, me miro al espejo con el vestido y tengo ganas de romperlo al recordar cómo me miraba. Me lo quito llorando y lo tiro, me vuelvo a poner el pijama y me acurruco en mi cama sin bajar la persiana. Cuando consigo conciliar el sueño, un mensaje llega a mi móvil y me despierta.