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Daniell

El cielo se tornaba rojo y dorado de vez en cuando una tormenta de fuego ahogaba los gritos de los humanos a nuestros pies. Desde el enorme ventanal podíamos ver el caos que había causado mi padre, unas pequeñas manos me rodearon desde la espalda, sonreí mientras estas bajaban lentamente y acariciaron mi entrepierna. Sonreí con un gemido. Me gire y bese a mi esposa.

Destiny estaba viva.

Cuando salto a las turbinas de la presa San Luis había creí haberla perdido, pero cuando una de las tantas concubinas de mi padre me aviso que Destiny estaba con mi padre, me alivie.

El padre de Destiny era uno de los primeros caídos, había tenido una humana de esclava y mi esposa salió de esa unión, cuando mi padre se enteró le dio la clave para que su lado humano desapareciera y sólo quedara el angelical o demoniaco.

Su lado celestial e infernal estaba equilibrado, pero cuando ella pasaba por emociones fuertes fácilmente uno de los dos dominaba al otro.

-¿Porque tiene que hacer esto?

Preguntó viendo como varios meteoritos cayeron sobre la ciudad. Tome la cortina de las ventanas y evite la desastrosa vista. Destiny aunque ya no fuera humana seguía teniendo sentimientos humanos y la prueba era que sus dos amigos Sean y Kayla vivían bajo nuestra protección, quisieran o no.

La muerte de Miguel había sido planeada desde un principio. Destiny había sido una parte del plan, mi padre pensaba en todo.

Esta nueva guerra era la decisiva, mi padre obtendría el poder de los tres reinos o los perdería para siempre. ¿Qué buscaba?, ¿poder?, ¿venganza?... No, buscaba a mi madre. Buscaba el amor.

Al poder obtener los tres reinos podría buscar la manera de reviviría, los archivos más viejos estaban el cielo, custodiados por mas ángeles que lo que estaba dios y su hijo.

Un demonio, un dios, un ángel o un hombre hacían cualquier cosa por amor y mi padre haría lo que sea por volver a tener a mi madre con él y a su hermano Miguel.

Destiny Donde viven las historias. Descúbrelo ahora