AHS: MURDER BOY

4. Nora

Diciembre 1992

- ¡Ven! Daria, no seas gallina. - le susurro mientras nos escabullimos en el patio de Larry Harvey.

- Tate, no debemos estar aquí. - me contesta con la voz cargada de miedosa expectativa. - Este lugar me pone los pelos de punta.

Llegamos a la puerta del sótano la cual esta cerrada con una cadena.

- Descuida, mi madre tiene a este tipo comiendo de su mano, nadie va a llamar a la policía. - le contesto mientras me dispongo a quebrar las cadenas con una palanca.

Daria pega un pequeño salto en el lugar.

- Creo que he oído algo. - dice mirando a los alrededores de manera paranoica. - Tate...

- Listo. - digo abriendo la puerta. - Vamos, entra.

Le hago paso a Daria y entro tras ella en el sótano de mi antigua casa.

Realizamos pasos lentos, cuidando de lograr que el viejo y mohoso piso rechine lo menos posible.

Cada pisada de las zapatillas de Daria causaba un pequeño chirrido que lograba ponerla cada vez mas nerviosa.

Sin duda no tenía material de ladrona.

- Tranquila. - le digo tomando su mano mientras avanzamos en la oscuridad.

- Tate, ¿Que hacemos en el sótano? - me dice con la voz temblorosa mirando hacia distintos puntos ciegos en la oscuridad.

- Quiero que conozcas a alguien muy especial para mi. - le digo mientras espero alguna señal.

- Creía que odiabas a ese tipo. - me dice pegándose a mi cuerpo luego de escuchar un movimiento en una esquina.

- Esto no tiene nada que ver con él. Esta fue mi casa primero. - le digo sin poder ocultar la ira contenida en mi voz.

- Estas de broma. - me dice abriendo los ojos como platos en la oscuridad.

- No es broma. - le digo sonriendo.

Avanzamos paso a paso a ciegas hasta que mis pies chocan con un objeto de plástico.

- ¿Que es eso? - pregunta Daria aterrada.

- Feliz Navidad - le digo levantando mi viejo carro de bomberos.

- ¿Un carro de bomberos? - responde Daria levantando una ceja.

- No es cualquier carro de bomberos. Es mi carro de bomberos, te presento a Phillip. - digo colocando el automóvil en sus manos.

- Wow, es pesado. - dice al tiempo que lo carga en sus brazos.

- ¿Tate? - una voz familiar suena a mis espaldas.

Daria pega un chillido ahogado ante semejante aparición y deja caer a Phillip.

- Tranquila. - le digo cubriendo su boca con una mano mientras le susurro en el oído. - Es mi amiga, es a ella a quién te quería presentar.

Daria tiembla bajo mis manos, pero se recompone.

- Hola Nora. - saludo a mi madre adoptiva. - Feliz Noche Buena.