fifteen

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—Cómo duele tanta distancia, aunque te escucho respirar y estás a cientos de kilomeeirrtrtros...

Chanyeol palmeó la espalda de su borracho amigo, bebiendo con calma de su querida amiga: la báltica.

—Lwa cagwue Shanyol —intentaba modular, llevándose las manos al pecho—, mi washo se fueh.

—Y dale con que las gallinas mean, culiao —el Chanyeol rodó los ojos, dejando la lata de chela sobre la mesa—. Al Luhan se le murió la abuela, asopado, y fue pal velorio no más.

— ¡Y hoy te vas, te vas, te vas, te vasssss!

—El hueón hueón, hermano.




Al otro lado del mundo

—您好,鲁汉 —el Luhan levantó la mirada del ataúd de su abuela, mirando al que le estaba saludando.

—Wena.

El chino frunció el ceño.

—什么?

—Oh, tshutsha, se me olvidó cómo hablar mandarín.

El otro chino le metió más conversa, Luhan ignorándole e intentando recordar cómo hablar Chino.

—Puta la hueá, me pasa por juntarme con el flaite del Kyuhyun y los Eczo.


La travesía del Sehun » hunhan.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora