Esclavo serás. (Raken)

Después del sufrimiento se acerca el alivio.

Narra Ken

Aquellos rayos del sol penetraban contra mi rostro, haciendo que abriera mis ojos lentamente.
Rasqué estos un poco y bostece.

—Joder, que sueño—Suspiré y volví a caer en aquella camilla de hospital.
Un cálido respirar chocaba en mi cuello así que decidí darme vuelta para vigilar quien era.

Me encontré con un bello WonSik el cual dormía como un tierno Ángel, aquellos rayos de sol hacían verlo tan bien..Su cabello negro y aquellas mejillas que daban ganar de achucarrarlas.

—Que mono—Sonreí y besé sus labios.

—Hablando de cosas monas, vienes y me besas—Sonrió y tomó mis labios para volverlos a unir nuevamente.

—Pensé que estabas dormido, eres un tonto—Reí y lo empujé un poco hacía atrás.

—¡Que casi me tiras!—Desde que estoy aquí que no me reía de esa manera. Alguien entró por la puerta asomando su cabeza, era la enfermera.

—¡Qué bonitos se ven!, Perdón por arruinar su momento pero, debemos hablar con el acompañante un momento por favor—Él asintió y se fue con ella hacía las afueras de la habitación.

Me recosté otro rato y me dediqué a mirar hacia aquel techo, el cual para una persona que no sabía que hacer estaba lleno de cosas interesantes.
Pronto Ravi entró por aquella puerta de un color crema muy bonito, llevaba una sonrisa en su bello rostro. Una de esas sonrisas que hipnotizan a cualquier persona.

—Kennie, tengo buenas noticias—Tomaba asiento en la silla a mi costado y entrelazó nuestros dedos—La enfermera me acaba de decir que mañana ya puedes irte a casa—Besó mi frente—También podrás volver al instituto.

—E-eso es genial—Suspiré. Volver al instituto era una de mis cosas más deseadas.

—Aunque..Cuando vuelvan al instituto, prepárate para lo peor, todos estos días que estuviste en el hospital me he estado conteniendo demasiado tiempo— Relamía sus labios sin un toque de vergüenza frente a mi, al parecer estaba bastante necesitado.

—Ravii.. Estaré cansado..Al menos espera unos días—Suspiré y sonreí.

—Será a penas vuelvas a la escuela, tenemos un contrato, ¿te olvidas?—Una parte de mi corazón se había roto en pedazos..¿Lo que hemos estado pasando tan sólo fue actuación?, ¿fue una cruel broma?.

—Pero Won-.—Antes de que terminara de hablar, me interrumpió.

—Joder, no me toques los cojones..Te he dicho a penas vuelvas al puto instituto, ¿crees todo lo que te dije hace unos días?, ¿eres gilipollas?..Ya me he ganado a tu madre. Además, ¿de que cojones te quejas?, Les llevarás dinero y pues de paso tendrás un lindo curro.—No entiendo nada de nada, no puedo lograr que mi cabeza reaccione en estos momentos..¿todo a sido una puta mentira?.

—Ravi..Yo..No quiero seguir. —Lágrimas inundaban mis ojos como si fueran dueñas de ellos, me sentía tan indefenso, me sentía solo en estos momentos, él me a cuidado simplemente para volver a follarme una vez esté vivo y coleando, me siento una puta.

—Me importa una mierda si no quieres seguir, hasta ahora eres el mejor que a follado de todos los que me he tirado, así que si tu no quieres, pierde cuidado..Te obligaré.—Susurró cerca de mi oído, mordiendo este.—Ya mañana volveré a follar a mi querido muñeco.—Sonrió de forma pícara.—Ah..Y lo que tenías, solamente era una desnutrición leve..Desde ahora me encargaré de que tengas las proteínas que te hacen falta.—Besó suciamente mis labios, dejando rastros de saliva en ellos y un fino hilo de está mientras se separaba.

Supongo que mi destino siempre será estar atado a él, maldición. Me sentía tan mal..En primer lugar por haber sido tan idiota y haber caído en algo tan bajo como una mentira, pensar que aquellas palabras que él me decía eran realidad y que podíamos pasar una vida juntos siendo felices pero..Vamos Ken, ¿cómo fuiste tan gilipollas de creerlo?. Supongo que el amor lleva más haya a la imaginación y la deja crecer dependiendo de los sentimientos, que estúpido que soy.

Dejé caer mi rostro y miraba como mis lágrimas caían en las sábanas blancas, empapandolas lentamente.
Me aferraba a estás blancas sábanas con la esperanza de que todo esto haya sido un sueño y pueda despertar lo más rápido de este, me sentía la peor escoria del universo. Tan ingenuo, tan estúpido, tan, tan..Yo.

¿Por qué cuando alguien te trata tan bien después de haber sufrido te enamoras?, O llegas a sentir que esa persona es importante para ti pero, no es así.
Confundí mis sentimientos, confundí el amor con cariño o aprecio y eso fue mi error, maldición. Mi corazón en estos momentos está roto.

—Oh vamos muñeco, deja de lloriquear..No deberías haberte enamorado tan pronto, además sabías que todo esto estaba por un contrato..No sé que más esperabas, ¿qué sienta algo por ti?.—Seguía hiriendo las palabras frías y secas que el dejaba caer de su boca, con aquella sonrisa tan hipócrita.

Alguien se tocó la puerta para asomarse por está, levanté la mirada para ver de quién se trataba y ahí se encontraba mi madre.. Recién llegaba y traía mi comida.

—Mi bebé, ¿por qué lloras?.—Dejo aquellos tazones apilados para acercarse a mi.

—Es que para mañana ya le han dado el alta, podrá salir y volver al instituto, sólo tenía una desnutrición leve.—Ravi sonrió y acarició los cabellos de mi madre mientras una cálida personalidad salía a flote.

—Oh Wonsik, eso me pone demasiado feliz..Por favor, cuida de mi hijo en el instituto.—Mi madre sonrió y tomó sus manos para acariciarla.

—Así lo haré querida mamá, ¿puedo decirle así?.—Aquella maldita sonrisa falsa..No, no puedes llevarla a ella a este juego tan asqueroso.

—Te odio.—Susurraba casi audible, estaba tan molesto...No quiero que la meta a ella, mi pobre madre no tiene nada que ver aquí. —Mamá, tengo algo que hablar con WonSik..¿Podrías salir un momento?. Mi madre asintió y así me hizo caso.

—¿Qué deseas muñeco?, Pensé que habíamos dejado todo claro..¿no quieres dejarme hablar con nuestra ma-.

—Quiero dejarte algo claro.—Suspiré.—A mi madre no la metas en tus estupideces o tus gilipolleces, ella no tiene nada que ver aquí, yo soy al que quieres, a ella no vuelvas a hablarle.. También quisiera que te vayas por hoy. —Mi Tono de voz era más serio que lo habitual pero...No quiero que le hablé a mi madre.

—Umm, ¿crees que me das miedo?. —Sonrió.

—Siendo un pequeño peón, no dudaré en revelarme contra el rey. Sonreí, mirándolo un tanto desafiante.

—Y yo..Siendo el rey, no dudaré acabar con quien se me revele. Abrió la puerta y se fue.

Así es como una nueva condena se hacía presente ante un pequeño peón, así es como el sufrimiento del rey empezaba y su tormento aumentaba..Pero estaría dispuesto a pasar por todo lo que sea necesario para defender a quien mas quería, y defenderse a si mismo.

//Gracias por leer, os quiero❤//