Donde Louis perdona a Harry mil veces y cuida de él cada vez que llega ebrio a casa.
O donde Harry esta celoso de la forma en la que Louis es feliz sin él después de que decide ya no perdonarlo.
“Lo perfecto de mi realidad.” Harry. Sé que aún hay amor ente nosotros, las cosas han cambiado y ninguno sabe el porqué, no sabemos que me hizo ser tan diferente, todo lo que quiero hacer es ir a casa después del trabajo y besarlo, aunque mis besos son como un huracán y lo hacen caer, pareciera que mis brazos fueran de fuego, lastimándolo cada vez que intento tocarlo, como si él fuera mi saco de boxeo. Lo único que quiero hacer es pedirle perdón mientras susurro cuanto lo amo pero sé que es demasiado tarde, quiero tomar su mano pero ahora hay demasiado daño en su corazón, él vive en una mentira que yo mismo cree, llevando esos horrorosos buzos opacos que cubren sus brazos y maquillaje en el rostro sin dejar ver el hematoma de su mentón. Todas las mañanas que despierto lo veo hecho bulto en un rincón, con golpes nuevos a su alrededor y un labio roto tal vez, le pido perdón en vano escuchando un “todo está bien” de su parte, el me odia, yo me odio. Los recuerdos vienen a mi mente alrededor del día, yo llegando a casa ebrio, gritándole para saber dónde mierda esta la comida, golpeándolo porque la comida no está lista aun, gritándole a los niños que se callen, él pidiéndoles que vayan a su habitación, los niños corriendo a esta y encerrándose ahí, de nuevo yo gritándole para que me sirviera una copa de vino, gritándole por tres copas más, nalgueándolo diciendo cosa obscenas hacia él, tomando su cintura para sentarlo sobre mí, apretando su mentón con fuerza cuando lo veo llorar, diciéndole que solo es un marica, yo abusando de él mientras escucho sus suplicas y llantos. ¿Qué me paso?
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