OneShots | Shadonic | Lemon ©

2. Blackout

Cuando hay apagones en la ciudad, muchos disfrutan para pasarla bien.

2

Es media noche, tal vez minutos menos o minutos más. No lo sabe, y en esos momentos no le importa. Se siente algo atrapado entre la oscuridad casi absoluta que inunda la ciudad en esos momentos.
Pero se siente bien. Le encanta la oscuridad.

Por una vez en meses, quizás años, no escucha el incesante ruido que hacen las personas en su trabajo, producto de las máquinas que usan. Por una vez en tanto tiempo puede disfrutar del silencio.

También puede aprovechar para dormir, pero no lo hace. Ahorita se siente inquieto. Mira a oscuras su habitación. No escucha los pasos que espera.

Suspira enrollando la bata más en su cuerpo. El viento pega de lleno contra su cuerpo y siente frío.

Vive en un edificio, y en esos momentos está apoyado en su balcón con los brazos cruzados. Si fuese de día tendría hermosas vistas, pero aún falta mucho para que amanezca. Así que se resigna mientras se sienta en su sillón mullido.

Mira hacia el cielo, le gustan las estrellas reflejadas en este. No hay luna, debido a que las nubes la cubren.

Sonríe irónico cerrando sus ojos. Tal vez dormiría ahí, quiere dejar de pensar en cosas tontas en esos momentos. Su cabeza da vueltas. Pero para él ya es normal.

—No me esperaste —comentan de pronto a sus espaldas, casi sobre su sensible orejita. Respinga un poco, sorprendido. No había oído pasos aproximarse a su persona. Aunque por parte de él ya está acostumbrado.

—Sabes que odio que te aparezcas así. —Frunce el ceño, tanteando con sus manos hasta lograr sentir el mechón de su acompañante inesperado. Sonríe casi de forma melosa mientras rodea sus hombros con los brazos. No tarda en sentir como corresponden su abrazo por la cintura.

—Lo siento —ríe divertido dando un piquito en la comisura de su boca por accidente, pues quería dárselos en los labios.

—No tengo la cara por otro lado, amor. —Niega con la cabeza parándose un poco de puntitas para besar sus labios. Su pareja sonríe apretándole más contra su cuerpo. Se siente algo cansado pero quiere hacerlo.

Con su pie tienta un poco hasta sentir como este pega contra el sillón. Da una fuerte palmada en su culo y le tira con suavidad en el mullido.

—¡H-Hey! —chilla sorprendido y un tanto atontado. Los labios de su pareja besan exquisito. Parpadea varias veces—. Mi amor, te extrañé —ronronea abriendo sus piernas.

Y gime, echando su cabeza hacia atrás al sentir como la mano contraria da un apretón en su necesitado miembro que se halla debajo de su ropa ligera.

—¿Te has desnudado para mí? —pregunta el otro arrodillándose en frente suyo pues al tantear por debajo de su bata, no ha sentido ningún tipo de ropa. El menor asiente, abriendo al máximo sus piernas para dar paso completo a las manos traviesas que meten de una dos dedos en su culo. Los cuales se mueven de una sola vez, intentando encontrar su punto.

—Mierda —chilla por su parte, comenzando a sentirse excitado. Mueve sus caderas contra esos dígitos. Y puede oír como su novio se masturba, lo sabe. Por como jadea mientras mete de forma profunda los dedos en su ser—. Oh, S-Shuny, entra ya. P-Por favor...

—Te va a doler —bromea incorporándose un poco para quitar por completo sus ropas. Su erección duele, se aprieta contra su bóxer y le incomoda. Sonic se sienta un poco en el sillón, y tantea de nuevo, hasta tocar los testículos del azabache que jadea ronco cuando los aprieta—. Travieso —jadea levantando la mirada. Ve como la luna llena brilla, lo cual le da visibilidad en esos momentos.