¿Viste cómo te miró?

Capítulo 3: La chica de lentes

Creo que ya es tiempo de presentarme, mi nombre es Gabriel, no quiero entrar en especificaciones, simplemente diré, como en el principio, que soy alguien inexperto en numerosas cosas; una de ellas, el amor, estudio en el colegio Saint Germaint, en Quito, Ecuador, en ese colegio, digamos...que soy el más estudioso de la clase...por así decirlo...soy el típico nerd que se encuentran en películas americanas, claro que sin lentes y sin brackets, muy aplicado y encaminado, puesto que tengo una mirada hacia mi futuro muy fijo, soy alto, tengo ojos marrones y unas largas pestañas que son una bendición y maldición a la vez, pues por culpa de estas cosas llamadas "pestañas" siempre me han dicho que parezco mujer y claro esto me acomplejó y me molestó, a tal punto que una vez me llegué a cortarlas con un cutter, por la culpa de un idiota que siempre me repetía tantas veces el "tienes las pestañas de mujer", claro que en un primer momento no me molesto, pero repetidas veces, harta. Bendición, porque repetidas veces la única chica que tengo por amiga, Ana, siempre me alaga y galardona por esas "cosas", y siempre me dice que son algo muy atractivo de mí; estas "cosas" las corte en el sétimo curso, pero las desgraciadas volvieron a crecer y están aún más grandes, aparte de unas cejas pobladas, hoyuelos y de mejillas muy grandes, soy de una contextura esbelta; y...un chico apasionado y de buen corazón, amante de los libros, los "dibujitos chinos", los cómics y la composición de poesía, específicamente destaco en esto último; más o menos así soy yo...un chico no tan normal, que digamos.

Mientras iba caminando de regreso hacia mi casa, no podía quitarme la escena del abrazo de la cabeza, y lo único que hacía era fantasear con ese tipo de cosas o imaginarme con ella e ilusionarme aún más; llegué a mi casa, un largo y cansino tramo, de allí a acá (fue de suerte que no me hayan pasado cosas en el camino, porque andaba divagando en mis pensamientos, muerto en vida por causa del amor); al llegar tuve que sacar de mi bolsillo la llave para entrar aunque hubiera personas adentro que me podrían abrir, sólo era un capricho mío(algo como para sentirme poderoso), bolsillo vacío, vacío, no había nada, nada; en un primer momento quise pensar que me habían robado(puesto que en todo el tramo hasta llegar a mi casa estaba más perdido que la "x" en una ecuación), pero como un rayo de luz llegó a mí la idea de que tal vez se hayan quedado en la casa de Ella, eso quise pensar, y me calmó, fue un alivio. Toqué el portón y me abrió mi abuelita, mi abuelita Chelita, que recibió a su nieto con una sonrisa satisfactoria, me hizo entrar, traté de ser veloz y dirigirme a mi cuarto inmediatamente entré a casa, pero me tajó "la abue", con unas palabras que me hicieron tragar saliva.

-¿Ya te declaraste, Gabito?-Decía con seguridad, pero se notaba que era algo retórico, debido a la manera en la que lo dijo.

-¿Qué quieres decir, Abue?-dije con una voz miedosa, que se notaba, se notaba mi inseguridad, y si le agregamos el que me haya ruborizado, la situación empeoró, al punto de que mi Abue me molestara con Ella, en casi cada momento.

-Tú bien que lo sabes, hijito; no lo niegues, conozco la mirada de un chiquillo templado, y tú lo estás, ¿verdad?-Balanceé mi cabeza de arriba hacia abajo, confirmando sus suposiciones, que más que suposiciones, eran verdades (ella ya lo sabía) y no me quedó de otra más que decirle que estaba terriblemente enamorado de Ella, a lo cual me respondió con una carcajada y una palmada en la espalda y una frase que me doblegó: "Te dirá que sí, no te preocupes; cariño".

Acabada la frase, dio media vuelta y se dirigió a la sala a echarse y leer un fresco libro, lo habitual, nada extraño (creo que ya saben de quién aprendí); cosa que aproveché para irme directamente a mi cuarto tomar mi celular y comenzar a hablar con ella, fue muy pesado y repentinamente se tornó todo de color de rosa; cada paso que daba, mientras me acercaba más a mi cuarto, a mi celular, a su corazón. Llegué, llegué intacto físicamente pero emocionalmente estaba desesperado, nada cuerdo; fue una larga senda del primer piso al segundo, lugar donde yo habitaba, un pequeño pero acomodado cuarto que me agradaba; abro aquella puerta de vidrio, visualizo el celular, se encuentra justo encima de mi revoltosa cama, cama que se encuentra llena de ropa que dejo tirada por culpa de mi flojera; regla número 1, asegurarse que el internet se encuentre prendido, listo; entrar a su chat, listo; ver si está conectada, ...; no lo estaba, no se había conectado desde la mañana; no podía hacer nada más que dejar un mensaje y esperar a que lo vea:

-¡Hola!

-Este...pues...

-No sé...dime algo...sobre lo de hoy

Enviado a las 7:34

Solo me quedaba una larga espera, larga en mi mente, larga porque en ese intervalo por más corto que sea, en ese tiempo se formarán mil y una historias sobre lo que quiero que pase y lo que en verdad pasará.

-¡Hola!

-Pues...fue hermoso, la verdad... (Insertar monitos aquí)

-Sabes...ese abrazo fue hermoso

-Puede que no haya pasado mucho, pero...extraño tus abrazos...

Leído a las 9:12

Escribiendo...

Sí, así me respondió ella, Ella, la cual tenía como nombre de contacto: "Mi Cielito", caprichos y estupideces de adolescente.

-Este... ¡oye!

-Pues... ¿qué respuesta me darás?

-Sé que debería dejar que te tomes tu tiempo, pero... es que quiero saber ya xd

Leído a las 9:14

-Sabes...eres muy considerado a veces XD, no te preocupes, ya lo sabrás 7u7

-Y bueno... ¿Qué tal?

Leído a las 9:15

-¿Tú que crees? *-*

-Si he abrazado a la persona que amo...

Leído a las 9:18

-(emojis sonrojados)

Pues en esta parte no hay nada que narrar más que la conversación se tornó algo rara, o bueno así la sentí yo, porque para ella era la conversación de siempre. Y se acabó la noche de aquel día que me marcó.

¡Hola!, ¿qué tal?, por favor no se vayan sin votar que me ayuda a seguir con esta historia (basada en hechos reales), aparte los datos son ficticios xd, bueno sin nada más que agregar, ¡Buenas noches, lectorcillos!, besos.

                                         -Yeray