Me Enamore de Ti. (BillxDipp) [Terminada]

Un trato es un trato

Aquellas palabras hicieron eco en la cabeza del castaño mientras miraba como en cámara lenta era atraído con fuerza hacia el rubio de mirada decidida, aquel letargo duro poco al sentir como su cuerpo se posicionaba sobre el antes mencionado en una posición muy poco decorosa dada la situación.

– ¿Q-Que haces?- pregunto titubeante y temeroso de la posible respuesta que le esperaba.

–Inocente hasta el tuétano, eres totalmente mi tipo Dipper Pines.- respondió con simpleza el demonio al tiempo que acariciaba la espalda del menor desde la nuca hasta las caderas.

Dipper solo se mantuvo en silencio presionando con notoria incomodidad sus propios labios casi a punto de morderlos al tiempo que casi de igual manera cerraba sus ojos. La mirada de Bill expresaba autentica diversión, no podía evitar sentir aquella emoción inundando su corazón, llevo su mano derecha hasta la cabeza del menor comenzando a acariciarle el cabello enredando sus dedos entre este, esbozo una tenue sonrisa y sin pensarlo, beso la frente del susodicho. Dipper permaneció quieto, no hizo ningún ademan exagerado haciendo por separarse y mucho menos se atrevió a abrir los ojos, solo permaneció en silencio en la quietud de la noche, aquella sensación en su frente pronto se fue desvaneciendo, pero por alguna razón que aún no entendía podía aun sentir aquella calidez traspasar hasta su memoria, como si aquello lo hubiese sentido de una misma manera años atrás, lo sentía tan familiar y a la vez tan lejano al final un sentimiento melancólico y vacío le invadió el pecho impidiéndole pelear contra aquello que en sus adentros anhelaba que pasara.

–No te hare daño, no más.- susurro Bill en el oído del menor ocasionándole un suave escalofrió.

–Ah que no puedes prometerlo.- respondió retante Dipper en un mismo susurro ocultando su rostro entre el cuello del rubio.

Bill solo bufo divertido volviendo a llevar su mano hasta el cabello del castaño.

–Tal vez tienes razón y no puedo, pero al menos lo intentare.- respondió con voz divertida girando unos grados su cabeza hasta dar con la mejilla del menor depositando un corto beso en esta misma aprovechando la cercanía.- hare de tu eternidad mi propiedad Dipper Pines, me perteneces.

Dipper se sobresaltó al escuchar aquello haciéndolo levantarse de golpe.

– ¿Qué has dicho?

– ¿Es que acaso no puedes pagar el precio?- pregunto Bill intentando hacer retractar al más joven.

Dipper solo frunció el ceño con molestia, se sentó sobre las caderas del rubio y extendió sus brazos de par en par llevando su mirada hasta la del rubio demostrando total decisión.

–Toma lo que quieras de mi.- afirmo Dipper sin despegar su mirada de la del rubio.

–Eres cruel Dipper Pines, muy cruel.- poco a poco Bill imito las acciones del castaño sentándose debajo del susodicho mientras que con sus manos tomaba el mentón del mismo.- Pero te tomare la palabra.

Sus miradas aun conectadas hacían de intermediario al alma de ambos, cada uno podía ver como el deseo del otro creía con cada segundo que pasaban juntos en aquella posición. La distancia fue desapareciendo poco a poco hasta que en un torpe choque sus labios se unieron en lo que ambos llamarían primer beso. Las sensaciones indescriptibles en los adentros del castaño no se hicieron esperar, era como un millar de mariposas revoloteando aterradas en su interior, al mismo tiempo intentaba darle explicación a la sensación en su cabeza, cosa que no hacía más que confundirle aún más.

No tardo mucho para que Bill tomara control del beso y lo condujera hasta algo un poco más rítmico haciendo notar su experiencia en aquel campo, Dipper no hacía más que dejarse guiar por el mayor que de poco en poco llevaba a recostar al castaño sobre la cama de su aun desaparecida hermana, la mente del muchacho ya comenzaba a divagar, minutos antes se debatía entre si parar y ofrecer otra cosa o no, las sensaciones despertando en su interior no hacían más que aumentar su lívido y el del rubio que al sentirse correspondido no se había atrevido a parar ni por un poco de oxígeno para el castaño.