Amor, te odio

El amor de su vida

Recuerdo el primer día de clases...
Aunque no termino de entender cómo es posible si todo empezó en el jardín.

Brandon Rivers, 6 años.
Llorando por su madre en la puerta del salón.

*Flashback*
--¡Mamá!.-sollozaba.-MAMAAAAA.-gritó
--Brandon cariño.-se acercó la maestra.-más tarde vendrá por ti, tranquilo.
--¡No puedo vivir sin ella!
Brandon de 6 años, salió corriendo tras el amor de su vida, abrazó a su madre, tomó de su cartera su mantita, y regresó.

Victorioso desde el salón, agitando su mano eufóricamente, se despidió.

--Chao chao chao.-agité mi mano amablemente
--¡Hola soy Brandon!.-sonrió.-y ésta es mi mantita la Señora Pequitas
--¡Qué hermosa mantita!.-grité
--Tú también.-me dió un beso tierno en la mejilla y se fué.
*Fin del Flashback*

Todo comenzó con una mantita...

*Flashback*
--¡Maestra!.-entró al salón llorando.-No en cuen tro mi mant i taaa.-gritó sin poder contener el llanto.
--Tranquilo Brandon, la vamos a encontrar.-dijo mientras se arrodillaba para abrazar al niño.
--¡Bien chicos!.-decretó.-todos vamos a tomar nuestras maletitas y nuestras loncheritas y las vamos a traer al frente. ¿Ok?.-sonrió amablemente
La maestra empezó a buscar en todas las maletas y la última en revisar fue la de Carolina.
*Fin del Flashback*

Lo único que recuerdo con claridad después de ese momento, es que ya nada volvió a ser como antes.

*Flashback*
"Monja, viuda, soltera, casa..."
--¡Maestraaaa!.-gritó Carolina desde el suelo mientras sangraba.
--¿Pero qué hiciste Brandon?.-respondió apresurada mientras tomaba en sus brazos a Carolina.

La llevó al departamento médico, la Doctora le preguntó qué había pasado, pero ella no supo decir con claridad.
Carolina estuvo a punto de hablar, cuando miró por la ventana a un niño llorando con su mantita, y un pedazo de hoja con un corazón.
Agachó su mirada.
--¿Carolina?...-repitió la doctora.-¿Puedes decirme qué pasó?
--No pasó nada Doctora, gracias maestra.-bajó como pudo de la camilla y se fue.

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Carolina estaba sentada en el curso y un papel llegó a su pequeña mesa.

"Perdon no te queria empujar pero tu botaste mi mantita a la basura"

Volteó su mirada, encontrando otra mirada inocente de 6 años tras de ella.

"No debes enojarte por una mantita o sea no importa es solo eso"

Carolina se levantó y muy alegre le dió la carta de regreso.
Antes de poder volver a su lugar, Brandon agarró todas sus cosas y las tiró al suelo.
Se puso de pie y empujándola al suelo, corrió a su mesa, y rayó todas sus manualidades mientras eufórico gritaba
--NO ES SÓLO UNA MANTITA--

Carolina lloraba mientras veía todos sus trabajos del mes destrozados y todos sus materiales en el suelo.

--Brandon basta por favor.-gritó llorando desde el suelo.
--No es sólo una mantita.-dijo sacando todo de su mochila para tirarlo al suelo.
Carolina corrió a la puerta a llamar a su maestra ya que en recreo ella siempre se quedaba sola en el salón.

La maestra entró y vió todo en el piso, las hojas rayadas y con agujeros, los frejoles en todos lados, los fideos rotos y dispersos.

Brandon volteó a ver a su maestra, corrió a ella y empezó a llorar a sus pies.

Carolina de un corazón muy grande, corrió hacia él para abrazarlo pero sólo la empujo haciendo que volviera a sangrar la misma herida.

La maestra no vió más remedio que llevarlos a la dirección.
Entraron y la directora los quedó mirando asombrada.
Tomó el teléfono y personalmente citó a sus padres.
La escena frente a ella era inaceptable. Dos niños de 6 años que peleaban como si tuvieran 10. La niña sangrando lloraba sin control, el niño sucio, sudado, y con el uniforme dañado.

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Los niños esperaban fuera mientras sus padres hablaban con la directora.

--Directora ésto no puede estar pasando.- se puso de pie la madre de Carolina, golpeó su escritorio y dijo.-Es sólo una manta que cualquier niño tiene, entiendo que sea su preferida, pero discúlpeme, lo que hace éste niño no tiene nombre ni perdón.

La madre de Brandon empezó a llorar y la escena poco a poco cambió. Antes de que la directora pueda responder a los gritos de la Sra. Waters, y que la Sra. Waters pudiera seguir con su reclamo, la madre de Brandon estaba tapando sus oídos mientras lloraba.
--No es cualquier mantita.-dijo entre lágrimas.-Brandon tuvo un gemelo, y esa mantita era de los dos. El fin de año pasado.-intentó decir mientras lloraba incontrolablemente.
La madre de Carolina impactada, la tomó en sus brazos y la apretó lo más fuerte que pudo.
*Fin del Flashback*

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Desde ese momento, ambas madres crearon un lazo de amistad muy grande, y luchaban constantemente para que sus hijos se lleven bien.

Pero no pudieron hacer nada. Brandon ya me odiaba, y siempre hacía algo para lastimarme.

Del mismo modo que lo hice yo.

Antes de que salieran de la junta corrí al salón, busqué su mochila amarilla de Go Diego Go, saqué su mantita y la recorté. Recorté cada parte y cada mancha de la Señora Pequitas.

Debía hacer que deje de querer tanto una mantita que algún día tendría que botar.

Pero lo que nunca esperé, fue la historia detrás de ella, y todos los gritos que esa acción implicaron.

HOLAAAAA👑
En serio gracias por leer mi libro, en serio espero que les guste y bueno éste es sólo el inicio de todo, no olviden comentar lo que piensen, y darle favorito!!!!
Los amo a todos,
AHRE!
Con mucho amor y gritos,
Justoneusernamemore.