4. Recuerdos de mi hogar.

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Hubo un fin de semana donde por fin después de mucho tiempo pude abrazar a mis padres y hermano, los extrañaba y era obvio. Aquel fin, pude disfrutarlo completamente con ellos, fuimos al cine, comimos juntos, fuimos al parque... Son cosas que tenía bastante tiempo que no hacía y estaba feliz.

Aquel fin de semana también tuve la oportunidad de ver a Sajim y contarle la situación en la que me encontraba.

-¿Por qué no me lo dijiste antes? - dijo muy triste.

-No fue una decisión que tardara en ser aceptada, fue en el momento y no quería decírtelo, no quería lastimarte- dije

A decir verdad, no quería hablar del tema, solo quería abrazarlo hasta no poder más, ese fin de semana estuvo lleno de abrazos, ¿cómo no sería así?, había vuelto, pero solo serían unos días.

Después de un bonito fin de semana, tenía que regresar con mis abuelos. Quería platicar con alguien y no podía, algo que odiaba de vivir con mis abuelos es que después de la escuela no he escuchando un "Como te fue en la escuela" solo en una ocasión mi abuela me preguntó, y cuando estaba contándole ella se fue a su habitación y sentí muy feo, por eso no hablaba con nadie.

Entre en mi habitación y encontré mi libretita vacía con una nota "Cuando no tengas a quien contarle tus problemas intenta escribir lo que sientes... "

Mamá:

¿Por dónde empezar? Mamá me siento muy mal, muy arrepentida por todo el mal que te causo, me duele pensar que ahora hago sufrir a muchas personas, entre ellas estás tú, está mi hermano, está toda la familia cercana, pues esto de estar alejada nunca lo tuvimos pensado y me duele que sea así.

Eres inexplicable, eres única y eres todas las cosas bonitas que ahora se me pueden ocurrir y doy gracias por la mamá que me tocó.

Tu siempre has estado para mí, para escucharme para aconsejarme, la verdad no sé que haria sin tí y estos meses me has hecho mucha falta y a veces ya no sé que hacer, sin tu compañía todo se vuelve más difícil.

Las dos hemos cometido errores, por que no somos perfectas y nadie lo es, pero he aprendido mucho de tí y tú algo mínimo de mí, pero así te amo, te amo por ser tu y ser fuerte a los problemas.

Nadie te enseñó a ser madre, nadie lo sabe todo, pero tu me has enseñado a ser la persona que soy en cuanto a mis comportamientos y mi forma ver el mundo, me has enseñado a ser fuer, a tomar decisiones, a creer, a ser felíz, pero nunca me enseñaste a vivir sin tí, te extraño todos los días y el día que llegue para verte te abrazare como si fuera la última vez.

Camila.

Después pensé en mi hermano y en cuanto lo quería así que también le escribí.

Hermano:

Mi pequeño mocoso, aun eres pequeño lo suficiente para llenar de ternura mi vida. Jamás imaginé que tú pasaras por lo mismo que yo, una infancia sin hermano con quien jugar. Claro está que me tienes aunque esté lejos pero me tienes.

Eres mi mejor amigo, a tí te puedo contar cuando me siento mal y cuando estoy felíz, aunque a veces mos peleemos mucho yo te quiero. Estoy feliz de tener un hermano tan buena onda y protector (aunque eres menor).

Mientras yo no estoy te pido que CUIDES a mamá, que la hagas reír de vez en cuando, está en ti protegerla muestras no estoy.

Extraño tu risa y tus bromas todos los días, le promento que cuando vuelva jugaremos a las luchas como acostumbramos.

Te quiere Camila.

(ABRAZAR EL MOMENTO CON LOS OJOS ABIERTOS, AHÍ ES CUANDO ESTÁS REALMENTE VIVIENDO)

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