CAPÍTULO 20

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Elijah

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Elijah...

Veo que Alex se inclina y entonces la besa y eso hace que me ponga furioso, así que camino hasta la mesa donde se encuentran y tomo a Alexander por el cuello de la camisa y lo tiro al piso.

-¡Pero qué mierda! -escucho que grita Alex.

Volteo a ver a Cam y le digo: -Nos vamos de aquí ahora mismo.

-¿Elijah? -escucho que dice mi nombre Alex, mientras se levanta. -¿Qué demonios te pasa?

-He dicho que nos vamos Camille, toma tus cosas.

-¡Ni Camille, ni leches! -me dice -yo no me voy contigo a ningún lado, ¿Acaso estas tu loco? -se levanta de su silla y se acerca a Alexander para ver como esta.

-Cam, no voy a volver a repetirlo, nos vamos ahora mismo. -Siento como todo mi cuerpo se va tensando de solo recordar que la estaba besando Alexander.

-Te ha dicho que no irá contigo a ningún lado -veo que se pone enfrente de ella - además por si no lo sabías ella vino conmigo.

-Será mejor que te calles y te apartes Alexander.

-¡Pero qué demonios, pasa contigo, Elijah!

Las personas a nuestro alrededor empiezan a observarnos y veo que Camille no se mueve, así que doy un paso al frente para tratar de llegar a ella, cuando Alex se interpone y dice:

-No entiendes que ella no ira contigo a ningún lado. -dice y me empuja hacia atrás.

Busco la mirada de Camille y veo que está decidida a quedarse con este imbécil, por lo que la retó con la mirada para que venga conmigo por las buenas, al ver que no se mueve, hago el intento de volver a acercarme a ella, pero Alex vuelve a impedirme el paso, por lo que lo tomo por sorpresa y le doy un golpe en la cara haciendo que de unos pasas hacia atrás.

-¡Alex! -escucho que grita Cam y aprovecho para cargarla en mis hombros y llevármela. -Elijah, bájame ahora mismo.

-Te lo advertí y no me hiciste caso -le digo, aun sin bajarla

-¡Mierda! -grita y sonrío ante su insulto, cuando salimos de la discoteca, volteo a ver si Alex viene siguiéndonos; al percatarme de que no es así, me dirijo al coche.

-Súbete, por favor. -Le digo, mientras le abro la puerta.

-Ni de coña me voy a ir contigo -dice mirándome a los ojos furiosa.

-Lo hacemos por las buenas o por las malas tú decides Wonder Woman.

Y así sin más se sube y cierro la puerta, me doy la vuelta y me subo al carro. En el camino al departamento vamos sin decir nada, pero la observo de reojo y veo que su cuerpo está más relajado. Cuando llegamos al edificio, se baja de inmediato del coche.

-Camille, espera -veo que se apresura a llegar al elevador, por lo que corro tras ella - Camille te he dicho que esperes.

Detengo las puertas del elevador que están a punto de cerrarse, pero ella sigue sin decir nada.

-¡Joder mujer!, ¿Es que acaso quieres volverme loco? -le digo, mientras entro al elevador.

Se voltea hecha una furia para enfrentarme y dice: -¿Volverte loco? estas de broma ¿Cierto? Eres tú quien va a terminar por volverme loca, no sé qué rayos está mal contigo, Elijah. Un día eres el idiota más grande que he conocido, diciendo que no me quieres cerca de mí y al otro día te comportas como si te importara y no quieres que nadie se me acerque. ¿Qué se supone que debo hacer?

-En primer lugar, no deberías de ir dejando que cualquiera te bese. -Y de solo pensar en ello, me enfurezco.

-¡Eres un maldito hijo de puta! -me grita de repente, y entonces se abren las puertas del elevador y sale.

Voy detrás de ella y cuando estamos a punto de llegar a mi departamento la vuelvo a cargar.

-¡Elijah, bájame ahora mismo! -pero ignoro su comentario e intento abrir la puerta. -Te juro que si no me bajas, gritaré para que Stef venga a ver qué es lo que está pasando.

-Buena suerte con eso, pero antes le he enviado un mensaje preguntándole si estaba en casa y adivina qué es lo que me ha dicho.

Cierro la puerta con llave una vez entramos y luego las escondo, me dirijo al sofá y bajo a Cam.

-Quiero irme a mi departamento ahora mismo -dice -la última cosa que quiero es seguir viendo tu estúpida cara.

-No te iras a ningún lado, hasta que hablemos.

-¿Hablar? ¿De qué se supone que vamos hablar? -veo que se pone a pensar un momento y luego dice -¿De tus revolcones con Sarah?

Ese comentario hace que me ponga furioso y volteo a verla -¿De eso se trata todo esto? ¿Por eso besaste a Alexander?

-¡YO NO LO BESE! -se levanta y se dirige hacia la puerta. -Y si así fuera ese no es tu asunto, ahora abre esta puerta.

Me acerco a ella y la tomo por la muñeca para que voltee a verme y quede de espalda a la puerta.

-¿Lo quieres? -Pego mi cuerpo al suyo y comienzo a acariciar su cabello- ¿Quieres estar con él? -comienzo a sentir como los latidos de su corazón empiezan a latir más rápido y como le cuesta respirar.

-Yo... solo quiero irme, Elijah por favor.

-Sarah no significa nada para mí, no tienes que preocuparte por ella.

-Eso no es mi asunto -dice, tratando de recuperar la compostura. -Tu puedes acostarte con quien quieras que a mí me...

Y entonces la besos, ya no quiero seguir escuchando nada más, solo quiero que por un momento seamos Camille y Elijah. La levanto por la cintura y enrolla sus piernas en mi cuerpo, sin apartar mi boca de sus labios, la llevo hasta mi cama, me separo de ella para admirar su hermoso cuerpo mientras se desviste, quiero recordar cada detalle de ella, su pálida piel, como mis dedos se sienten al recorrer su cuerpo, la forma en la que muerde sus labios al verme.

-Elijah -dice mi nombre mientras la vuelvo a besar y jadea, maldición esta mujer hace que me vuelva loco.

-No digas nada, solo se mía esta noche -le digo mientras cubro su pequeño cuerpo con el mío.

He tenido tantas veces sexo y puedo decir que esto no se compara a ninguna de las otras veces en las que he estado con alguien. Todo con Camille es diferente; para cuando alcanzamos el clímax, siento que mis labios están hinchados de tanto besarle, pero no me cansaría de saborear sus labios y teniéndola entre mis brazos caigo en un profundo y tranquilo sueño.  

My ExceptionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora