One and only.

Capítulo 15. "One and only"

Harry apartó el pelo de mi cuello y fue dejando suaves besos en este. Podría estar así toda una eternidad, pero no podía seguir con esto. No. Ya se había pasado bastante del límite.

- Ha-rry... -Intenté decir mientras lo apartaba.

- ¿Qué? -Dijo entre beso y beso.

- Para. Ya. -Contesté seria.

Hizo caso omiso y siguió. Su contacto me ponía la piel de gallina, pero esto tenía que acabar. Lo empujé fuertemente y salí corriendo hacia una de las habitaciones para encerrarme en ella. 

Ahora no podría mirar a Marie a la cara. Ni a él. Hubiera sido mejor que me hubiera controlado, por mucho que me arrepintiese después.

Seguí lamentándome hasta que escuché el sonido de la puerta principal abriéndose. No me atreví a salir antes de allí para no encontrarme con Harry a solas. Abrí la puerta con cuidado y fui al salón. Harry estaba sentado en el sofá, y los colchones estaban amontonados en una esquina. Evité el contacto visual con él y ayudé a Sophia, Louis, Liam, Niall y Lisa a colocar la compra en la cocina.

- ¿Qué habéis hecho mientras no estábamos? -Preguntó Louis con normalidad.

- Yo me desperté hace poco y vi la televisión. Pensaba que estaba sola hasta que me crucé con Harry por el pasillo al ir al baño. Cuando he salido ya habíais llegado. -Mentí. Menos mal que se me daba bien.

- Ah. -Respondió Sophia esperando que hubiera pasado algo más interesante.

Terminamos de colocar la comida y fuimos a sentarnos al salón. Intenté sentarme lo más alejado de Harry posible y lo conseguí. En unos treinta minutos llegaron los demás. No pude evitar fijarme en como Marie se sentaba encima de Harry y le daba cortos besos. No podía negar que estaba algo celosa, pero a la vez, arrepentida y vergonzosa. 

Los chicos empezaron a hablar sobre la comida. Me ofrecí voluntaria para cocinar y segundos después Harry lo hizo también. Por suerte, Niall nos siguió. Fuimos a la cocina y estuvimos un tiempo pensando que haríamos. Al final nos decantamos por unos espaguetis. Después, Niall se fue al baño y nos dijo que empezáramos.

Cogí la pasta de un pequeño armario y la puse en la encimera. Cogí una tijera para abrir el envase y empecé a cortar el plástico.

- ¿Piensas ignorarme toda la vida? -Preguntó Harry rompiendo ese incómodo silencio.

Sí. Claro que lo haría. No podía ni mirarle.

- Genial. Entonces a Marie le encantará saber que su mejor amiga se abalanza sobre su novio. -Amenazó.

Me giré rápidamente. ¿Cómo se atreve? ¡Si fue él! Bueno, igual que él me amenazaba yo también podría amenazarlo a él. Creo que se olvidó de los mensajes.

- Entonces a Marie también le encantará saber qué tipo de mensajes le mandas a su mejor amiga. -Sonreí victoriosa y me volví a girar para llenar una olla de agua, y poner al fuego la comida.

En ese momento llegó Niall y se puso a ayudarme. Harry de vez en cuando hacía algo, aunque la mayoría del tiempo solo estaba apoyado en la pared viendo como Niall y yo cocinábamos y bromeábamos.

- Esto ya está. -Dijo Niall poniendo la cuchara en el lavavajillas.- Id sacando las bebidas, yo voy a avisarles de que está la comida y ponemos la mesa.

Se limpió las manos con un trapo y volvió a dejarme a solas con Harry. Abrí el frigorífico y saqué las bebidas. Después cogí un vaso para cada uno y los puse en la mesa. Estaba abriendo una botella de Coca-cola cuando Harry apoyó las dos manos en el mueble a mi lado y vertió la bebida en mi camiseta. Me aparté rápidamente y lo miré furiosa.

- ¡Lo has hecho a posta! -Grité enfadada mientras con servilletas intentaba secar la camisa, aunque era inútil.

- ¿¡Por qué crees que te echaría eso encima!? -Articuló en el mismo tono de voz que yo.

- ¡Porque sí! ¡Eres así! 

Y así comenzó una discursión que acabó con un beso. Otra vez había vuelto a caer. Claramente esto era un laberinto del que me costaría mucho salir. Demasiado.

- ¡Lo sabía! -Susurró alguien emocionado a la vez que se escuchó la puerta de la cocina abrirse y cerrarse rápidamente.

Aparté a Harry rápidamente y miré a aquella persona. Sophia. ¿Por qué me iba todo tan mal?

- ¡Sois los dos unos capullos! De Harry casi me lo esperaba pero, ¡Alice! ¿Estás loca? Marie es tu mejor amiga. -Recriminó.

- Yo... No quería hacerlo. Juro que no volverá a pasar. Ni siquiera me acercaré a él. Pero, por favor, no digas nada a nadie. -Supliqué. No podía permitir que alguien más se enterara de esto.

- Fue mi culpa. Si quieres decirle algo a Marie, fui yo. Ella se resistía pero yo no paraba. -Me disculpó Harry para mi sorpresa. Lo miré incrédula y él agachó la mirada. Incluso pensaba que me iba a echar todas las culpas a mí, pero al contrario, me salvó. ¿Acaso estaba soñando y este día era solo una imaginación?

- No voy a decir nada; pero creo que deberíais hablar con Marie. No se merece esto. -Dicho esto se fue y cerró la puerta a su paso.

Todo iba de mal en peor.

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