Ladies Night [VIXX]

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Hacía ya casi un mes que entre el trabajo y las diferentes ocupaciones de su vida diaria, no se habían dado el tiempo para reunirse como siempre hacían cada semana.

Ken y Hyuk solo estaban esperando que N regresara de su viaje de negocios para poder hablar con él, y poder quedar para verse el fin de semana.

— Hablar desde aquí no es igual... necesitamos con urgencia vernos. ¡Pero ya! — escribió en su grupo de WhatsApp, Hyuk.

— Tienes toda la razón... ¡N!... ¿cuándo vas a regresar? Te necesitamos — escribió Ken.

— No sean impacientes, en un par de horas estaré aterrizando... tengo muchas cosas que contarles también.

Aunque los tres se morían de ganas por decir cómo les había ido durante el mes, ninguno dijo nada,  los tres ya sabían cuáles serían los temas principales a tratar el fin de semana.

* * *

Un día pasó y finalmente N los citó en el bar de siempre.

— ¿Binie, estás seguro que no te importa? — preguntó con preocupación.

— Hyukie bebé, deja de preocuparte por mi... ve, diviértete, sé que extrañas a esos anormales de tus amigos.

— ¡Ay! Por eso te amo — le dijo al tiempo que se acercaba a él y lo besaba en los labios.

Hongbin lo recibió muy feliz y después de separarse un momento agregó.

— No me hagas esto.

— ¿Qué cosa? — preguntó Hyuk.

— Si sigues besándome así, no voy a dejar que vayas a ninguna parte.

Hyuk rió y volvió a besar a Hongbin, pero esta vez con un beso más calmado y relajado, con menos efusividad.

Finalmente, después de darse algunos besos y arrumacos más, Hyuk subió corriendo las escaleras para entrar a su cuarto, darse una ducha y salir a verse con sus amigos.

Después de mirarse por última vez en el espejo, salió de la habitación y bajó las escaleras totalmente arreglado. Posó su mirada en Hongbin su novio desde hacía ya tres años, con el cual compartía la casa.

Binie acababa de entrar a su sesión de Netflix, buscando algo para ver y entretenerse mientras su novio se iba de fiesta. El mayor acababa de salir de un turno de 48 horas en la estación de bomberos, y lo que menos quería, era estar fuera de casa, prefería quedarse y relajarse un poco antes de irse a dormir.

— Binie ya me voy — le dijo.

— ¡Hey! No sin antes darme un beso, ven acá — lo llamó girando su rostro desde el sofá.

Hyuk se acercó, pero no lo hizo de frente, caminó hasta quedarse pegado al respaldo del sofá y tiró suavemente del rostro de Hongbin hacia atrás, para poder besarlo.

Por la posición en la que quedaron, Hyuk tenía todo el control del beso. Besó, lamió y mordió a su antojo los labios de Hongbin, hasta que finalmente se separó de sus labios y dándole un pequeño beso más, se despidió de él.

El corazón de Hyuk bombeaba muy rápido, siempre había querido darle un beso a Hongbin de esa manera, y si no fuera porque ya lo esperaban sus amigos se hubiera quedado con él. Sonrió como tonto cuando, después de subir a su auto recibió un mensaje de parte de Hongbin.