Nos levantamos a las 10 am con el desayuno preparado por papi Haz, Lucho y yo estabamos muy feliz porque la persona que los dos amabamos nos sorprendio de esa manera. Desayunamos unas ricas medialunas con café con leche, vimos el prónostico de hoy que nos indicaba que iva a ser un calor extremo! Me ocultaron algo ellos dos, ¡Una sorpresa hermosa! Hoy ivamos a ir a una quinta, los tres, por navidad. Me gusto esa idea, cada vez me agradaba más. Tenía tantas ganas de hablarle a Lucho, pero me ponía muy nerviosa o no sabía de que tema poder hablar. *reí*. Luego de desayunar fui a preparar mi bolso con maya, galletitas, sprite, todo para comer y algunos juguetes.
Me subí al auto, papi Haz manejaba, yo iva en la parte de átras y Lucho en el asiento delantero, escuchabamos música muy fuerte, y linda. Los tres ivamos a cantando al ritmo de la música, eso me agrado, me parecio familiar y tierno.
Llegamos a la quinta, es muy grande, es linda, tiene una pileta hermosa, un patio enorme, y no se me olvido traer mi patineta para andar. Me gusta andar en ella, y más si papi haz me ayuda. ¿Le gustara la patineta a Lucho? *me empecé a preguntar por dentro* Tengo muchas ansias de conocerlo más, me gustaría, me agregaría verdaderamente.
Fui al baño a ponerme mi maya y a dejar mi ropa de lado, me tire de un chapuzón a la piscina y luego ellos me acompañaron. Jugamos a muchos juegos ahi adentro, marco polo, al tiburón. Hasta que el vientito refrezco y salimos por frio. Nos cambiamos, pero no le dimos fin a la diversión de la navidad, fuimos los tres a andar en patineta, bicicleta, y rollers. Me divertí, hicimos carreras, pasamos momentos juntos. Aquella quinta estaba a tres horas de mi casa, por lo tanto cuando oscurecio a las 21:00 pm nos largamos de allí. Se estaba dando fin a mi navidad. Fue muy divertida por suerte, no me la imagine asi, con solo pensar que mi papá no la pasaría conmigo se me había nublado la mente y llenado de pensamentos muy feos. Pero por suerte fue todo lo contrario...