Lluvia de mañana

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No podía haber amanecido mejor para ella... El tiempo reflejaba a la perfección como se sentía: dolida.
Corrió la cortina para ver que en ver da el cielo lloraba, y no era solo cosa de sus oídos tristes que proclamaban lluvia...
Hoy se siente sola, triste, aterrada....
Sí, lo comprobó, gotas cristalinas caían de su querido cielo.  No lo pensó mucho y salió de su casa, así, despeinada, descalza  y en pijama, no importaba quien la podía ver, hoy no le importaba nada...
Cerró la puerta despacio, y rápida bajó escaleras abajo. Abrió el portón poco a poco, hace frío esta mañana pero a ella hoy no le importa. Se abriga con su bata de estrellas y lo decide, quiero mojarse. Por lo que sale moja sus pies, las gotas comienzan a mojar su pelo sedoso pero no importa, en verdad quiere resfriarse.
Al poco, ella comienza a llorar también. Aún no se siente ella, aún no se siente suya por mucho que lo sea. Hoy se siente extrañamente solas.
Sólo una cosa le podría hacer feliz...pero él no vendrá a no ser que ella lo llame, lo sabe. No suele ser así...por lo que, con un dolor fuerte en el pecho, cae de rodillas al suelo, no puede soportarlo mas y grita, con toda su fuerza grita un primer te quiero. El dolor aumenta con ese grito. Su garganta, pide que no la fuerce, pues ella prefiere callar. Le hace caso, pero se acurruca en el suelo bajo la lluvia y así cierra los ojos y recuerda en todo lo bonito que pasaron y  piensa en lo bonito que pudieron haber pasado.
Está totalmente empapada pero sigue sin importarle, hoy su amiga es la lluvia.

Queda pensando unos instantes mas y piensa en volver a gritar, pero esta vez no es un te quiero, no, esta vez le duele más y no lo grita, esta vez se dice a si misma "te quise ver feliz conmigo y creo que no lo conseguí".
La lluvia cesa pero ella no para de llorar sus penas...
Se levanta del suelo y parte hacia su casa de nuevo, donde todos siguen durmiendo. Se da una ducha de agua caliente cambia su pijama y se acuesta. Hoy tiene pensado no salir de la cama, dormir, recordar y llorar por lo que una vez quiso tener.

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